GAZA: guerra y genocidio

Antes expuse aquello que se entiende como ‘antisemitismo’, cuya raíz (los pueblos semíticos) son esencialmente de origen arábico, y se asume el ‘antisemitismo’ como una discriminación antojadiza por razones culturales, religiosas o de raza hacia quienes poseen esta estirpe.

Políticamente se impone el concepto de ‘antisemitismo’ a la persecución de cualquier tipo de ‘lo hebreo’, solo por ser ‘israelita’ o ‘judío’. Las persecuciones en Europa por parte del cristianismo, en el medioevo, fueron llamadas ‘antijudías’, y las expulsiones de judíos se verifican a lo largo de la historia hasta llegar al horroroso holocausto nazi.

El concepto ‘antisemita’, ya en forma extendida y sin matices, se instala políticamente en el lenguaje de la corriente ‘sionista’, una vertiente nacionalista de carácter extremista y ortodoxa.

Para entender: cuando la OLP palestina acepta el derecho de Israel a existir como Estado, juntamente con el derecho de la Nación y Estado Palestino: se está pronunciando políticamente, carente de toda discriminación religiosa, cultural o de raza. Mal entonces se podría acusar a la autoridad palestina de ‘antisemitismo’ si ésta crítica y condena el apartheid aplicado por la política ‘sionista’ sobre los territorios OCUPADOS y gestionados en forma arbitraria por el Estado Israelí.

Cuando una organización como Hamas declara que su propósito es hacer desaparecer a Israel, no sólo como Estado, sino que se hace necesario eliminar a todo judío de la faz de la tierra, y eso justifica la matanza de niños y civiles israelíes: entonces sí estamos ante una postura ‘antisemita’ porque su base ideológica es discriminatoria en extremo, aplicado ‘solo por la realidad de ser judíos’, como fue el motor ideológico del nazismo. Y es antisemita porque postula a eliminar una parte integrante del pueblo de origen arábico, y postula a una visión sesgada de la historia y a la imposición de una cultura religiosa de parte- musulmana- y de ésta: en su versión más extrema.

Cuando el gobierno sionista actual, en Israel, y su propaganda, conjuga el ‘antisemitismo’ en todo aquello que crítica a Israel y su política de exterminio del pueblo palestino, y se queja de igual modo por las severas observaciones políticas sobre su control colonialista, y coloca al que resiste con piedras y palos en Cisjordania al mismo nivel del que lanza misiles indiscriminados sobre población civil en territorio de Israel: entonces asistimos a una Gran Manipulación, en donde las muertes atroces e injustificadas de 20 mil civiles, en su mayoría niños y mujeres, en Gaza,  son equiparadas por la publicidad sionista, con iguales muertes y secuestrados israelitas por parte de Hamas.

Según la propaganda oficial del gobierno hebreo:  terrorista es un adolescente que usa una honda con piedras en contra de blindados, y merece la cárcel, equivalente a un terrorista de Hamas que mata a balazos a jóvenes indefensos en un festival… es lo mismo, es igual, no hay diferencia.

La crítica política por las acciones de Israel es, para la cúpula gubernamental, tan ‘antisemitismo’ como la denuncia de la cruenta violación de todo derecho humano en Gaza y en Cisjordania.

La ruptura de las leyes de guerra y de los Tratados internacionales… son otra critica inválida marcada por la fiebre ‘antisemítica’(según reza la propaganda) … y se llega a calificar de ‘antisemitismo’ la postura de la ONU y la acción de la Cruz Roja o las observaciones objetivas de ‘Human Rights Watch’.

Volvamos a la racionalidad, la cordura y ya no ofendamos a la inteligencia del Ser Humano: el genocidio en Gaza ha roto todo límite de justicia, incluso de retaliación bíblica, en donde el ‘ojo por ojo…’ se ha quebrado en su equivalencia y sentido de justicia. Ya ha pasado a conformar parte de los horrores que el mismo pueblo israelí ha sufrido en su historia.

La consternación provocada por el  terrorismo de Hamas, en su acción macabra sobre civiles e inocentes israelíes, y el acto más deleznable de la guerra: el secuestro…ameritan una respuesta de defensa y de equiparación política por vías militares –(bajo las leyes de la guerra que la mayoría de los Seres de Paz no compartimos)- Sin embargo, cuando tal réplica armada sobrepasa los límites de lo políticamente aceptable y militarmente justificable, entonces entramos en otra franja de la oscura beligerancia: el genocidio.

A la luz de los hechos, decir que cuanto acontecido en Gaza es uno de los mayores genocidios de la historia actual, y que tal acto ha roto los parámetros aceptables de la guerra…no es una postura ‘antisemita’ como lo agitara la propaganda del gobierno sionista actual, ni conlleva la idea de hacer desaparecer al Estado de Israel, ni mucho menos.

El gobierno del señor Natanyahu ha caído en la paranoia guerrerista más desenfrenada, y en lugar de buscar soluciones políticas que ya no justifiquen la acción del extremismo islámico, hace justamente lo contrario: llevando agua sucia al molino de la guerra total, que espera ganar, pero cuyo precio político e histórico, de una eventual victoria, sería menos que ‘pírrica’, y seguramente, en el tiempo, podría significar una afectación grave para la existencia del Estado Israelita.

Proceso cambio de Constitución:

La porfía y obtusidad de la clase política en Chile

El estallido social de octubre-noviembre del 2019 no se oponía a los beneficios logrados en treinta años de modelo neoliberal, administrado por la izquierda social demócrata, sino que exigía eliminar las brutales desigualdades que contaminaban el progreso y la justicia social, y apuntaba a más, no a menos, y a mayor democracia económica que comprendiera una repartición de la riqueza, equitativa y harto diferente a la existente. Nunca hubo una renuncia a los Derechos alcanzados o un desprecio hacia estos logros.

Iniciar un proceso de ascenso que superara los nudos del sistema y mantuviese la plataforma de beneficios, pasaba por cambiar la Constitución emanada de la dictadura – 1980- y reformada bajo la presidencia de Ricardo Lagos el 2005. Y en consulta nacional tal itinerario fue aprobado por el 70% de la población sufragante. Nunca se entendió como ‘la solución’ y siempre se tomó como el pie inicial de un tiempo de reformas urgentes y necesarias. TAL FUE EL MENSAJE.

La izquierda, beoda de quimera revolucionaria, vio en la propuesta de la primera Convención Constitucional una bifurcación delicada, algo aventurera, pero que, calculó, podía administrar. El 60 por ciento de los votantes dijo que tal propuesta no era viable, y la rechazó.

La derecha cantó victoria y levantó la carta magna del 80 como la panacea infranqueable que se erguía como único camino constitucional posible. Sin embargo, el mandato de crear y darse un nuevo Pacto se mantenía y así se procede a un segundo tiempo de preparación, eligiendo a un comité de expertos que diera marco y pauta a la discusión en un Consejo Constitucional elegido por votación universal.  La derecha, esta vez, y su franja más extrema, los republicanos, ganan la mayoría de la convocatoria. El resultado, después de meses de deliberación, fue una propuesta de un conservadurismo ortodoxo lejos incluso de las ideas liberales modernas, muy marcadas por doctrinas inspiradas por el opus dei, que logra un nuevo rechazo, del 56 %, dejando en vigencia la misma Constitución que desde el inicio de este raro proceso quiso cambiarse.

Republicanos y la derecha que pelea su mismo espacio (UDI) leen que en verdad la gente ‘quiere y se queda con la Constitución actual’, y eso a ellos da un secreto sabor a victoria, porque nunca han creído en este proceso y adoran las obras de su referente histórico, la dictadura.

La izquierda lee ‘que hay cansancio electoral sobre el tema constitucional’ y ahora se conforma con la Carta que en su día se identificó como el escollo que impedía mayor justicia y derechos.

La clase política en Chile descifra aquello que conviene a su gestión de poder.

La gente, el pueblo, la ciudadanía, sigue con ‘un pendiente político’ que se ha agravado y se ha hecho aún más agudo en estos últimos tres años. Las causas reales del estallido social nunca han tenido siquiera una variación que permita un leve cambio de ruta. Todo sigue igual. Y al estancarse: estamos peor que en el año 2019-2020. Ni ‘refundación’ ni ‘conservadurismo’. Ya no se confía en una izquierda demasiada empapada de conveniencia e inserta profundamente en el modelo que la gente quiere reformar y la clase política pretende prolongar. La derecha perdió su ocasión para demostrar que su discurso, a todas luces demagógico, en realidad era transformable en propuesta constitucional.

Esta clase política chilena parece leer que, después de todo, aquello que se impuso en el 80 bajo tiranía y las reformas en democracia del 2005, no es, malgrado la opinión del pueblo, un mal texto constitucional, y quizá podrían asegurarse la alternancia de gobierno entre los dos sectores por otros treinta años. Y con esta lectura y este relato insólito, ellos, la clase política toda, está haciendo fermentar la próxima crisis social y política en Chile.

Cuando las bases políticas de un país entran en putrefacción, encubriéndolas con capas de malas lecturas y vanas ‘soluciones’ los resultados no suelen preverse: se entra en la incertidumbre que engendra monstruos políticos, hijos de la aventura, y salvadores que afiebran y enceguecen la justa visión y razón de la gente.

Ojalá lo peor no suceda en Chile, y surja por fin una alternativa racional, inteligente y verdadera que ofrezca la solución que se buscó con los millones de personas en las calles del país en aquel despertar de octubre-noviembre del 2019.  Porque la inusitada violencia de aquellos aciagos días y noches no marcó la pauta política, sino que lo hizo la manifestación masiva extraordinaria que pacíficamente expresó el rumbo del cambio que se exige. Luego, la oscura arremetida de la ira hizo lo suyo. Y al fuego de la anarquía, los tentáculos de la provocación echaron toda la combustión habida en los servicios secretos aun emboscados entre las sombras de un poder subterráneo.

Lo malo y peor no son los dos fracasos de intención de cambio constitucional: el desastre y aquello que debe ocupar a los chilenos y chilenas es la lectura maniqueísta, oportunista y mentirosa de la clase política, la cual, con enorme irresponsabilidad siguen buscando lecciones y relatos fáciles en una situación grave, delicada y determinante para el futuro de este país.

Propuesta de Constitución para Chile

ANTES DE LEER LA PROPUESTA

Esta es mi mirada y opción personal. Respeto a quienes divergen de mi postura y aun en la crítica no les considero mis ‘enemigos’ ni yo lo soy de alguien por pensar diferente.

Acudo a la lectura del texto constitucional con mente abierta, y con una mirada puesta en dos aspectos: a) apoyar todo aquello que supere injusticias, pobreza y retraso; b) plena concordancia con los puntos que aclaren medidas de futuro, relacionados con medio ambiente, tecnología, nuevos modos de trabajo y relaciones laborales modernas, y que potencien Derechos basados en la Libertad y en la Justicia.

Como persona empeñada en sendas de espiritualidad, espero que la Dignidad Humana, en especial de las minorías- esencialmente de los pueblos originales- sea por fin abordada con realismo, justicia y solución política. Que el Derecho Espiritual no sea limitado a la libertad religiosa o institucional, y exista un desarrollo de la Educación en términos de libertad humana que no se limite a los asuntos económicos… o ‘modos de elegir’ genéricos, o construcción formal de familia… que, en todo caso, no ahonden en la realidad social y humana que existe en el Chile de hoy. Y este sesgo sólo podría darse por un exceso de ideologismo, o por imposición de una mirada unilateral. Y eso nunca será bueno: no lo fue en la propuesta anterior, y no lo sería en ésta.

Espero que el sistema de Justicia sea profundamente revisado en su andamiaje todavía sustentado en tiempos ya sobrepasados por la realidad.

En fin, espero: Progreso y Visión de Futuro, y superación de lo que nos ata al conservadurismo que restringe a la democracia.

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CONCLUSIÓN DESPUÉS DE LEER LA PROPUESTA

He leído acuciosamente el proyecto que los chilenos y chilenas debemos votar para su aprobación o desaprobación.

No puedo sostener opiniones en contra de un cuerpo constitucional que repite, en forma aún más somera e imprecisa, aquello que YA se halla en la actual constitución reformada, o que de hace tiempo forma parte del sistema jurídico chileno. Insisto: mucho de su contenido es casi remedo de lo ya estipulado por el Contrato Social y Legal actual. Tendría que manifestar mis reparos a la actual Constitución o a leyes concretas vigentes, antes de entrar en los aspectos que este texto repite y reitera.

Sí, noto con preocupación aquello que NO está: no hay reconocimiento real de la situación de los pueblos originarios, y los enmarca en un plano de respeto y aceptación multicultural, desconociendo el profundo e histórico quiebre político en este asunto. Tema que fija una línea de peligro: porque habiéndose perdido la oportunidad para hacerse cargo de un Hecho que existe, se le ha sepultado en la generalidad de los conceptos, en la pobreza del trato y en la insistencia majadera de que ‘Chile es Nación indivisible’… y no que alguien quiera partir a la Nación… sino porque los prevalentes en esta Constitución ven en los pueblos originarios la causa de la hipotética separación de Chile en paisitos independientes. Un fantasma, una imagenería, que solo existe en el sopor de la fiebre de la desconfianza y la discriminación.

Peligroso es determinar, tantas veces en el texto, la amenaza del terrorismo sin una especificación jurídica del fenómeno. Podemos intuir aquello que mueve a algunos convencionales cuando plantean lo del terrorismo – ligado en gran medida al conflicto indígena en el sur del país- pero una Constitución no es un panfleto, y es precisamente este lugar jurídico el idóneo para establecer principios que permitan construir leyes sobre pilares claros. Porque las veces, varias, que esta propuesta trata la palabra ‘terrorismo’, lo hace desde la ambigüedad sin un sustento que deje en evidencia ‘qué se entiende por terrorismo’ en esta Constitución. Peligroso es todo relativismo en un Cuerpo Base de la Nación. Porque hay muchos vericuetos leguleyos descritos en este texto que se han construido de tal modo con la intención de usar, estos puntos en las sombras, en casos en donde se declare ‘terrorista’ a quién el poder de turno considere.

Curioso es el lenguaje del texto: en donde menciona al ‘presidente de Chile’ y nunca incluye a una ‘presidenta de Chile’. Podría decir: ‘La Presidencia de Chile’ o ‘el o la presiente o presidenta de Chile’ o ‘el o la ciudadano -a que ejerza La Presidencia”.

Hay normas formales y superficiales, sin peso real, interpretables e insignificantes, sobre: la crisis climática, la defensa del medio ambiente, los derechos de la Mujer, los derechos al Agua, la tecnología y el desarrollo del futuro.

Es un texto que huele a rancio, a añejo, formal, empaquetado, y resorte para la manipulación de una abogacía ladina y maliciosa.

Mucho de sus párrafos YA SON LEY y NORMAS. No aporta nada nuevo, y a ciertos tramos incluso su redacción es contradictoria.

Y lo novedoso que sugiere: como el sistema de Plebiscitos y propuestas de leyes por parte de la gente: bien puede hacerse ley en las actuales condiciones constitucionales.

Por último, la redacción sobre los partidos políticos y sus porcentajes y la composición del parlamento nos empuja a las viejas ideas del binominalismo y de los amarres que fueron desechos por las reformas posteriores a la actual Constitución.

Es mala. Es ambigua. Es peligrosa. Es carente. No es moderna. No sirve para el futuro. No postula al desarrollo de los próximos 40 años.

Es un programa político de un sector asustado del progreso. No da consistencia para nuevas y buenas leyes. Hay baches abismales que un aspirante a tirano – (de cualquier color) – podría echar mano con resguardo constitucional.  

Comparativamente, la propuesta anterior -(rechazada)- era garantía de un tiempo de desorden y de incertidumbre, pero en su brío sí se hacía cargo del Chile real, aun sí en su maximalismo no garantizaba el impulso al Bienestar al cual aspira la ciudadanía. Esta propuesta, por su parte, simplemente ignora al Chile real, no abre porvenir y es una red de resguardo para un sector pequeño y recalcitrante que pretende encerrar a Chile en un conservadurismo que siga dando mucho a pocos, y al resto, que somos todos: sigamos recogiendo aquello que chorrea de la opípara mesa de los ‘decentes’ de esta Nación.

Conclusión

Nunca estaré por la injusticia, y jamás me colocaré al lado de los poderosos que gobiernan desde la ambición y la injusticia.

El pasado nos sirve como lección y aprendizaje, nunca para hacer de esta una realidad forzada de la cual no hay escape ni salida.

El progreso se mide por el Bienestar de la gente, por la Libertad siempre más profunda y responsable, por la Democracia que integra e incluye, y no sesga y divide.

Y en todo Compromiso Social en donde La Paz esté ausente como concepto y visión, y la pobreza no esté incluida como el enemigo de la dignidad que debe ser eliminado: hay- en tal propuesta- un alma oscura que mira a intereses que por años largos nos han hundido en la hipocresía y maldad -(que nos presentan como ‘realismo político’ y ‘única forma de gobernanza’)-

Esta clase política- toda– debe hacerse cargo de su fracaso, de su ineptitud, y de su insensibilidad y falta de amor por su pueblo.

Ahora, dependemos solo de nuestra capacidad para forjar el futuro renovando y revolucionando nuestra idea y concepción de Soberanía popular y de Autodeterminación Democratica.

Romper con la desinformación y con la ‘lógica de la guerra’

Antisemitismo: proviene de la discriminación hacia las lenguas semíticas y sus creencias y cultura (árabes-hebreas) (pueblos semitas). Diferente al ‘antijudaísmo’ cuya característica religiosa ataca al judaísmo y no a todo aquello que es israelí o hebreo, sino solamente a la religión judía (fuerte en el cristianismo del medioevo). Anti-Sionismo: es un concepto político que se opone y ataca a las vertientes ‘sionistas’, cuyas inclinaciones ideológicas nacionalistas representan a la derecha más extrema, en el arco político israelí.

El concepto ‘semítico’ se hizo racial ya en el siglo diecinueve, para distinguirlo del ‘Indo europeísmo’- separando la teoría de la raza superior, y dejando al semitismo en calidad de inferior.

Aunque en el término semítico caben árabes e israelíes, en la Europa de 1873 y 1886 aparecen posturas que endosan el semitismo exclusivamente a los ‘judíos’ entendiendo como tal a todo israelí, aunque no fuese practicante de la religión judía.

Podemos hallar en la información virtual: “Uno de los primeros en expresar ese nuevo antisemitismo fue el historiador berlinés Heinrich von Treitschke quien en 1879 escribió: «Los judíos son nuestra desgracia». Pronto quedó claro, como lo demostró el affaire Dreyfus, que el nuevo antisemitismo alimentado por las teorías raciales no era sólo un fenómeno alemán. En Francia el fundador del «antisemitismo académico» fue Ernest Renan, pero, según Pierre-André Taguieff, «es Jules Soury quien efectúa el paso a la acción. Denuncia el dominio absoluto de los judíos sobre el aparato político, las instituciones, etc. […] La “lucha de las razas” es reinterpretada como la principal manifestación de la “lucha por la existencia” en los humanos. El combate entre el “Ario” y el “Semita” es una lucha a muerte». Aún más radicales serán las tesis antisemitas de Georges Vacher de Lapouge que recurre a la craniometría para «demostrarlas».(«Antisemitismo racista»-Wikipedia)

Hoy, se entiende por antisemitismo a la discriminación racial, religiosa y cultural que, se cree, caracteriza a los hebreos. En donde el ‘antijudaísmo’ (religioso) y la animadversión hacia el pueblo israelí por razones raciales, culturales y religiosas se convierte en política de persecución y justificación para el ‘llamado a su exterminio’ o ‘razón’ para negar sus derechos como pueblo o Nación.

Queda afuera del antisemitismo el ‘anti-sionismo’ que es la oposición y rechazo a la política nacionalista y al militarismo que representa la corriente política extrema de la derecha israelí. Y que, en este caso, NO niega el derecho a existir del Estado de Israel, y NO discrimina por asuntos raciales, religiosos o culturales: reivindicando el mismo Derecho a existir como Nación y Estado al pueblo Palestino sin discriminación ni persecución por razones de raza, religiosa y/o cultural.

Hamás y Hezbolá son profundamente antisemitas: en cuanto apuntan a desintegrar el Estado de Israel desde profundas creencias religiosas, racistas y culturales, e imponen- como toda ortodoxia extremista- una propia superioridad racial, religiosa y cultural que no concibe la existencia de Israel en tierras árabes (y posiblemente en ningún otro lugar).

La autoridad palestina y la OLP son abiertamente anti sionistas, pero no poseen características antisemitas: aceptan la existencia legítima del Estado de Israel, pero denuncian los abusos colonialistas-militaristas del sionismo nacionalista y de la ortodoxia religiosa que somete al pueblo palestino al apartheid.

Antes de la masacre de Hamás en territorios ocupados por la ortodoxia nacionalista, que arrincona y encarcela a los habitantes de la ínfima franja de Gaza, hubo grandes manifestaciones del pueblo de Israel en contra de las tentativas del gobierno sionista por imponer un sistema de control sobre la justicia del país. Y hay, en Israel, potentes movimientos por la paz que luchan por el entendimiento con el pueblo árabe y palestino. No todo el pueblo israelí es sionista. Debe entenderse bien esta realidad.

El antisemitismo es una política racial y religiosa que, desde bases acérrimas de una cultura oscura, no concibe al Ser Humano como tal, sino que discrimina desde la base de una superioridad auto concedida, y se endosa el derecho a imponer la propia creencia y modo de vida.

Sin embargo, la crítica al colonialismo, al militarismo, y a la prepotencia del Estado de Israel, que no respeta los acuerdos internacionales e impone su dominio sobre su zona en modo arbitrario y contrario a los Derechos Humanos, y la crítica a su política de retaliación –que sobrepasa los crímenes que el extremismo antisemita acomete en su contra– no significan en ningún caso algún viso de antisemitismo.

Porque la publicidad actual, emanada de las embajadas de Israel por el mundo, califica toda crítica y condena por las muertes en Gaza de (como) ‘antisemitismo’, y esa manipulación puede tener asidero o receptividad en la ignorancia o en la escaza voluntad para informarse.

Pero al colocar las palabras en su justo significado: queda en evidencia que el uso de este término con fines propagandísticos demuestra una debilidad ideológica y política subyacente. O una defensa desesperada ante la culpa de estar actuando en forma desproporcionada.

Romper con ‘la lógica de la guerra’ y asumir que la venganza o retaliación NO es ‘autodefensa’ o  ‘legítimo derecho a defenderse’, nos llevaría a otra mirada de la realidad: en donde el fanatismo de Hamás- como el de ISIS o de los Talibanes- quedaría aislado y en evidencia si nadie en el planeta actuara como ellos lo hacen, y, eventualmente, para poner fin a sus atrocidades, las naciones acordaran intervenir para detener a la muerte y a la barbarie que usa y utiliza causas políticas y nacionales con el fin de imponer un reinado de terror que nos arrastra a todos a las cavernas.

Pero si para oponerse a lo terrible de la naturaleza criminal de ISIS o Hamás se usan los métodos de ‘tierra arrasada’ y de ‘castigo a la nación que cobija o donde se esconden los terroristas autores de los crímenes’: entonces ya no se distingue la diferencia entre el vil atacante que mata y secuestra inocentes y civiles…de aquel que bombardea ciudades y pueblos masacrando a otros inocentes y civiles.

Usar correctamente el lenguaje y romper la ‘lógica de la guerra’ son dos caminos que podrían cambiar nuestra visión de la realidad y del mundo que construimos.

El tenebroso programa de la guerra

Toda guerra es contraria al espíritu humano en su opción por el Bien, la Paz y la Fe. Cualquier crimen, asesinato, muerte y agresión constante que avasalle a un grupo humano es, y siempre ha sido, una afrenta y una severa contradicción con el sentido básico de la Vida y del progreso en comunidad.

No es una simple ‘contradicción’ alzar a Dios en los estandartes y en las ideas de la guerra y el exterminio, sino que es una burda paradoja que se coloca diametralmente a las antípodas de cualquier doctrina de fe o creencia superior.

La nomenclatura que unifica, -imponiendo una lógica que resulta demencial-, la guerra, la violencia, la esclavitud y el dominio de una entidad humana en contra de otros seres humanos, (con el propósito de destruirles), bajo una supuesta ‘naturaleza religiosa’ en donde la guerra y la muerte aparece como ‘un mandato divino’…tal mezcla antojadiza… ha tenido resultados nefastos para el Hombre, y ha definido ‘la historia de las civilizaciones’ como una gran demostración de incivilidad y barbarie.

La naturalización de la guerra y el concepto de ‘héroe’ que lidera masacres y aplasta a su enemigo, o el ‘mártir’ que se inmola por la ‘causa’ -(sobre los cuales se levantan leyendas y monumentos)- es profundamente cainita, y justifica la violencia sobre laureles de una glorificación casi divina que desnuda el complejo de dioses, y la frustración por lo humano que somos, pretendiendo una superioridad que se construye sobre cadáveres y triunfos de sangre, como en un rito infernal que exige al Hombre un sacrificio permanente para agradar al inframundo.

La masa que se mueve según la ola que mece la mano del Mal, toma parte y partido, y desde la comodidad de las urbes se pronuncia a favor de unos o de otros, y busca enemigos cercanos a los cuales agredir, encerrar o perseguir. Así, hasta el bondadoso y la persona religiosa cae de su simulación y por dolor o por inercia o por ideología o siguiendo sus emociones también toma partido, y culpa, al contrario, o a lo más desconocido, como único autor de las imágenes y noticias sesgadas que suele ver por las tardes, sentado en su sillón de frente al aparato que abre puertas parciales destinadas a ‘formar opinión pública’.

Entre una Gaza bombardeada y centenares de inocentes muertos horriblemente, como ‘pago’ por la acción genocida de Hamás, que también mata inocentes y civiles, y en donde se hermanan en su deshumanización al masacrar centenares de infantes…aparece una noticia que debiéramos prestar particular atención: el físico Melvin Vopson de la Universidad de Portsmouth, Inglaterra, señaló que una nueva ley de la física podría respaldar la teoría de la ciencia, que vivimos en una simulación. (En un programa como Matrix).

No es algo nuevo, ya el físico Hopkins lo plantea con teoría contundente, pero el hándicap de la ciencia era que tal eventual programa de existencia no estaba inmerso en alguna ley de la física. Y hoy ese vacío ha sido copado.

¿Qué ‘dios-programador’ es este que designa que los Cainitas sean vencedores y la humanidad lleve en su interior las claves de su autodestrucción?

Podemos argumentar, en contra de lo anterior, que Bien y Mal son parte de este Mundo, y está integrado a su condición creada, y al Hombre se concede inteligencia, sentidos, emocionalidad, capacidad y ciencia, fe y visión más allá de su realidad para que por su OPCIÓN- Bien o Mal- sea digno de: o entrar en las esferas reales de La Vida (Bien), o definitivamente elija formar parte del ejército viral que hace de ‘la existencia’ su propio patio de subsistencia (Mal).

Y la guerra, las masacres, como las que hoy comprobamos en tierras israelíes y palestinas, y como en Ucrania, y en todo lugar en donde la guerra y la muerte es el principado de los Hombres de maldad, es la manifestación de Caín, matando cualquier vestigio de Abel: porque no tolera que el Bien supere a esta existencia ficticia, y por fin el Hombre entre y conozca la Vida real y verdadera.

La guerra y la autodestrucción es el modo del Mal para asegurar su ‘programa de existencia’ e impedir que el Ser Humano por fin rompa con esta quimera y Logre La Vida que corre el velo de la ignorancia.

Palestina-Israel

¿Todo por un plato de lentejas?

Después de que Esaú vendió su derecho de primogenitura a su hermano Jacob por un plato de lentejas, Jacob se convirtió en el heredero legítimo de la familia. Más tarde, cuando Isaac, el padre de Esaú y Jacob, estaba muriendo, Jacob se disfrazó para parecerse a Esaú y recibió la bendición de su padre que estaba destinada para Esaú. Cuando Esaú descubrió lo que había sucedido, estaba furioso y planeó matar a Jacob. Sin embargo, después de reconciliarse con su hermano, Esaú se mudó a Seir y se convirtió en el padre de los edomitas. Los edomitas eran un pueblo que vivía en la región de Edom, al sur del Mar Muerto. Eran descendientes de Esaú, el hermano mayor de Jacob, y se consideraban a sí mismos los herederos legítimos de la tierra que Dios había prometido a Abraham y sus descendientes. Los edomitas eran conocidos por su habilidad en la metalurgia y la minería, y su territorio era rico en minerales como el cobre. En la Biblia, los edomitas son mencionados como enemigos de los israelitas en varias ocasiones. (Resumen extraído de fuentes según datos Google)

La región de Canaán es una antigua área geográfica que se encuentra en el Oriente Medio, en la costa oriental del Mar Mediterráneo. La región incluía partes de lo que hoy son Israel, Palestina, Líbano y Siria. En la Biblia, la región de Canaán se describe como la tierra prometida por Dios a Abraham y sus descendientes. Los israelitas, descendientes de Abraham, se establecieron en la región después de salir de Egipto y conquistar a los cananeos que ya vivían allí. La región de Canaán es conocida por su importancia histórica y religiosa, y ha sido objeto de conflictos políticos y militares durante siglos. (Idéntico al anterior)

Desde aquellos tiempos bíblicos, hubo mucha historia imbuida de luchas y guerras, tiempos de esclavitud y sumisión y dos grandes diásporas israelíes.

Desde 1948, con la instalación del Estado Israelí, se da inicio a una larga cadena de conflictos que ha ignorado, sistemáticamente, los acuerdos internacionales para establecer fronteras definitivas de acuerdo con mapa de 1966 y la legítima existencia de dos Estados Soberanos: el palestino y el israelí.

Si navegamos por la información disponible por las redes de internet, podemos informarnos para no sorprendernos por aquello que hoy sucede en Israel con el ataque de Hamás a los Kibutz fronterizos y ya no escandalizarnos por la inusitada violencia y odio que ahora muestran los combatientes palestinos, como en otras ocasiones lo han hecho, de igual manera, los soldados israelíes al avanzar sobre territorios ocupados o bajo asedio constante.

Es un dato de la causa que la única vez que un gobernante israelí pretendió la paz y poner fin a la guerra e invocar soluciones dialogadas de los conflictos, -el primer ministro israelí Menájem Beguín– (con el presidente egipcio Anwar el-Sadat – el 17 de septiembre de 1978)- terminó asesinado por ‘traición’, al igual que su par egipcio.

Yasser Arafat, el líder histórico de la resistencia palestina, desde que varía su postura de guerra permanente a la búsqueda de la paz, quedará marcado por tal ‘concesión’ y desde ese cambio comienza una decadencia política que lo llevará al envenenamiento y su muerte, y se constata además la degradación de la OLP como único representante de los palestinos, y la aparición de una nueva resistencia palestina: Hamás y Hezbolá.

Importante es entender el complejo panorama político interno en Israel, en donde una corriente extrema, como el sionismo, y la ortodoxia religiosa han incentivado la supremacía israelí y han incitado y organizado el feroz avance de la ocupación de más tierras palestinas mediante los Kibutz y el control militar. Así como se ha verificado la radicalización de las fuerzas palestinas, las que ahora son declaradamente musulmanas y aliadas de Irán, (en comparación con la OLP que reunía a fuerzas políticas no religiosas: alfattá, el Frente Popular de Liberación -de corte marxista, y otras corrientes que incluso se declaraban cristianas-palestinas)

El Estado Israelí nunca reconoció a la OLP, como legítimo representante palestino, sino que lo tildó de ‘terrorista’ y persiguió a Arafat como ‘jefe del terrorismo’. Sin embargo, años más tarde, la OLP será la ‘autoridad palestina’ reconocida por la ONU.

Desplazada y mermada la OLP por los nuevos y radicales grupos armados musulmanes, la calificación de tales fuerzas, que gobiernan la franja de Gaza y poseen poder político en el Líbano, siguen siendo considerados como ‘terroristas’ por parte de Israel. Mientras que el mundo árabe, que sigue apoyando la causa palestina (Irán-Siria-) califican al Estado israelí como ‘un estado terrorista de ocupación’

Veamos algunos datos históricos que nos darán un contexto real de una prolongada guerra- (datos extraídos de fuentes comunes en internet)- ((“Israel – Wikipedia, la enciclopedia libre”)

(1904-1914) El surgimiento del sionismo, fundado por Theodor Herzl, dio lugar a la segunda Aliyá  en el curso de la cual emigraron a Palestina unos 40.000 judíos.

En 1909 un grupo de judíos rusos que llegaron después del fracaso de la revolución de 1905, fundaron Degania, el primer kibutz.

En 1917, el ministro de Asuntos Exteriores británico, Arthur James Balfour, emitió una declaración en donde se promovía la idea del establecimiento de una patria en Palestina para el pueblo judío (la llamada Declaración Balfour).

En 1920, Palestina fue adjudicada al Reino Unido para su administración como Mandato de la Sociedad de Naciones.

La tercera (1919-1923) y la cuarta ola (1924-1929) de inmigración judía se produjeron después de la Primera Guerra Mundial.

En 1920 los ataques árabes se encontraron con la sorpresiva respuesta, no de los británicos que ignoraron las intenciones de los árabes de atacar a la comunidad judía, sino de los grupos de defensa judíos fundados por, entre otros, Ze’ev Jabotinsky. Fue en ese año cuando nació la Haganá.

Entre 1916 y 1929, se sucedieron varios ataques por parte de los árabes contra las comunidades judías y cristianas residentes y contra los peregrinos de Tierra Santa. Los más importantes fueron los de 1920 y los de 1929 en Safed y Hebrón (Matanza de Hebrón). Ya antes de 1919 los cristianos habían sido acosados por los árabes, furiosos por la venta de terrenos de la parte cristiana de Jerusalén a compradores judíos.

Muchos de los ataques contra los judíos fueron promovidos por Amin al-Husayni. Al-Husayni, antisemita militante y principal líder palestino durante décadas, se convertiría años después en el principal aliado árabe del Tercer Reich.

En 1947, un año después del Atentado al Hotel Rey David perpetrado por el Irgún, una organización paramilitar sionista que operó durante el Mandato británico de Palestina entre 1931 y 1948, y tras los continuos estallidos de violencia por grupos militantes judíos y árabes, y ante la imposibilidad de conciliar a ambas poblaciones, el gobierno británico decidió retirarse de Palestina y puso en manos de la ONU la resolución del conflicto.

La Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó el 29 de noviembre de 1947 un plan que dividía a Palestina en dos Estados, dando a los árabes y a los judíos una extensión similar de terreno (el 43,7 %, unos 11.500 km², para el Estado árabe; y el 53,6 %, unos 14.100 km², para el Estado judío, que incluía el desierto del Néguev, el 45 % de la superficie del país), a pesar de que en 1946 los judíos eran el 30 % de la población de Palestina. Un 2,7 % del territorio (700 km²) en torno a las ciudades de Jerusalén y Belén fue considerado corpus separatum y sería administrado por las Naciones Unidas. La ONU no adoptó ninguna disposición para ejecutar el Plan y, apenas dos semanas después, en una reunión pública celebrada el 17 diciembre, la Liga Árabe aprobó otra resolución que rechazaba de forma taxativa la de la ONU y en la que advertía que, para evitar la ejecución del plan de la ONU, emplearía todos los medios a su alcance, incluyendo la intervención armada.

El 14 de mayo de 1948, horas antes de que expirase el Mandato británico sobre Palestina, el Estado de Israel fue proclamado en el territorio otorgado por el plan de las Naciones Unidas, aboliendo como primera medida las leyes anti inmigratorias británicas que impedían desde hacía años la entrada legal de nuevos judíos a Palestina.

1956. La guerra del Sinaí se desencadenó a raíz de la nacionalización del canal de Suez y el bloqueo de los estrechos de Tirán, vía de acceso al principal puerto mercantil israelí en el golfo de Aqaba, por parte de Egipto; así como a los ataques de fedayines (guerrilleros palestinos)  que sufría Israel.

Francia y Reino Unido establecieron una alianza militar secreta con Israel, y los tres países atacaron por sorpresa y de forma coordinada a Egipto, ocupando el canal de Suez, desmantelando por completo el ejército egipcio y aniquilando su fuerza aérea. En solo una semana, Israel conquistó la península del Sinaí al completo, incluyendo zonas estratégicas, como Sharm el-Sheij, que es clave para el acceso al estrecho de Tirán y el golfo de Aqaba, fundamental para liberar la salida al mar desde el puerto israelí de Eilat.

La guerra del Sinaí representó una derrota militar para Egipto, pero una victoria moral y política. La presión diplomática conjunta de los Estados Unidos y de la Unión Soviética, insólitamente de acuerdo frente a la sorpresiva maniobra de Londres y París, que pretendían recuperar el canal de Suez, obligó a Israel a retirarse de la península del Sinaí y de la Franja de Gaza, es decir, tuvo que regresar a la situación prebélica que le había llevado a conquistar 60.000 km² en solo una semana.

Las consecuencias de la guerra de 1956 dejaron a la región en una situación inestable, con una aparente paz fronteriza (aunque los Estados árabes seguían sin reconocer a Israel), pero con un ascenso del nasserismo panárabe (Nasser-presidente socialista de Egipto) que tiene a la causa palestina como elemento movilizador.

Siria, alineada con el bloque soviético, comenzó a patrocinar asaltos militares y de guerrillas en Israel a principios de los años 1960, como parte de su «guerra de liberación».

La guerra de los Seis Días fue un conflicto armado que tuvo lugar en Oriente Próximo en 1967. Advertido por la retirada de los cascos azules de la frontera del Sinaí, el bloqueo de los estrechos de Tirán y los movimientos de tropas de Egipto, Siria y Jordania al otro lado de la frontera, junto a la concentración de unidades iraquíes y kuwaitíes y de otros países árabes, Israel decidió pasar a la ofensiva para conjurar lo que suponía una inminente agresión, y atacó a Egipto. Pese a que los medios de comunicación árabes prometían la destrucción y aniquilación de toda la población israelí, devolviendo al primer plano los recuerdos de la shoá, otras fuentes pusieron en duda, con posterioridad, que los árabes fuesen realmente a atacar Israel. ​ También durante la guerra de 1967 Israel conquistó los territorios de Cisjordania con Jerusalén Este, entonces bajo administración jordana, así como ocupó los Altos del Golán, en territorio sirio.

Octubre de 1973, durante la guerra de Yom Kipur, las tropas sirias atacaron las posiciones israelíes en los Altos del Golán, mientras que Egipto luchaba a lo largo del canal de Suez. Tras las primeras conquistas sirias, Israel expulsó a los sirios de los Altos del Golán y avanzó hasta llegar a 32 kilómetros de Damasco. Tras el acuerdo de cese de fuego firmado entre Siria e Israel en mayo de 1974, se estableció una zona desmilitarizada entre las posiciones sirias e israelíes. Israel incorporó los Altos del Golán a su sistema administrativo en 1981, en el Distrito Norte, si bien formalmente no los ha anexionado.

El conflicto del 2006 se desencadenó el 12 de julio, cuando combatientes de Hezbolá lanzaron cohetes sobre las poblaciones fronterizas israelíes, entre ellos un ataque con proyectiles antitanque a dos vehículos blindados ligeros Humvee que patrullaban en la frontera vallada. La emboscada dejó tres soldados israelíes muertos y otros dos fueron hechos prisioneros, que fueron trasladados al interior del Líbano. (“Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para el Líbano”) Cinco soldados más murieron en el Líbano al intentar rescatarlos. Hezbolá pidió a Israel la liberación de prisioneros libaneses a cambio de los dos militares, pero Israel se negó y respondió con bombardeos aéreos y de artillería contra objetivos libaneses que incluyeron, además de los objetivos militares de Hezbolá, la infraestructura civil del país y el aeropuerto de la capital, Beirut. El ejército israelí (FDI) desencadenó una invasión terrestre del sur de Líbano e impuso un bloqueo aéreo y naval. Hezbolá, a su vez, incrementó los disparos de cohetes sobre el norte de Israel y trabó batalla con las FDI en una guerra de guerrillas mantenida desde sólidos baluartes. (“Guerra del Líbano de 2006”)

Se cree que este conflicto provocó la muerte de, entre 1.191 y 1.300 libaneses y de 165 israelíes. Asimismo, dañó severamente la infraestructura civil libanesa y provocó el desplazamiento temporal de aproximadamente un millón de libaneses y entre 300.000 y 500.000 israelíes. (“Guerra del Líbano (2006.) – Divulgadores del Misterio”)

Durante el año 2008 y el principio de 2009 se llevaron a cabo numerosos ataques con cohetes contra territorio de Israel por parte de Hamás, lanzados desde la Franja de Gaza, que provocaron 14 víctimas mortales, 11 de ellos militares y unos 300 heridos. El ejército israelí respondió bombardeando el territorio palestino, provocando la muerte de más de 1.300 palestinos y más de 5.000 heridos, la gran mayoría civiles, además de ocasionar la destrucción de numerosos edificios e infraestructuras.

Aparte de otros episodios con menor número de víctimas, como la llamada Operación Pilar Defensivo (2012), en el año 2014, y también como respuesta a los ataques de Hamás, que provocaron la muerte de más de 70 israelíes (la gran mayoría soldados), y más de 1.000 heridos, se produjeron numerosos bombardeos de las fuerzas armadas israelíes en Gaza, donde perdieron la vida más de 2.300 palestinos (la mayoría civiles) y más de 10.000 heridos, quedando destruidas miles de viviendas y numerosas infraestructuras.

Hasta aquí un resumen rápido de elementos que cualquier persona podrá hallar en la red. Es decir: todos pueden ver, leer e informarse. Quedan afuera un sinnúmero de episodios que en su día marcaron la brutalidad de este largo martirio entre dos pueblos: como la masacre de los atletas olímpicos israelíes (1968), o la masacre del campo de refugiados palestinos en Sabrá y Chatila, en el Líbano (del 15 al 18 septiembre de 1982). Sin contar el drama cotidiano y permanente de una guerra psicológica y de violencia latente entre palestinos e israelíes, mientras las zonas palestinas son tratadas bajo régimen de apartheid, y la reacción de hostigamientos hacia los Kibutz son constantes.

Considerando este somero cuadro de beligerancia histórica, los hechos de este octubre del 2023, con centenares de civiles israelíes y palestinos fallecidos horriblemente, no debiera sorprender al mundo, ya que las grandes potencias (EEUU y Europa) no han sido promotoras de una paz efectiva y han jugado su rol en el cuadro de beligerancia que podría colocar a la humanidad ante una encrucijada fatal y definitoria.

Si la inteligencia y razón superior, como el Bien Común, no han logrado superar al efecto de ‘un plato de lentejas’, y desechar a la violenta envidia entre dos hermanos ya lejanos en los siglos, y en lugar de asumir al Dios de la Paz se sigue aferrados al demonio de la guerra…ya no es asunto religioso, sino que simple e incomprensible voluntad de mutuo exterminio, irracional y demencial. Y que el sistema del Mundo… que pesa en la balanza de la política internacional… no haya sido capaz de frenar esta locura, habla muy mal de la ‘calidad’ de la clase política de las grandes naciones.

Definitivamente: la Paz no es un valor verdadero integrado en los Hijos de Caín.  Ellos gustan de la guerra y sirven al dios de la destrucción. Nadie tiene la razón mientras mata y ataca a ‘su enemigo’. Los Hijos e Hijas de la Paz NO tenemos ‘enemigos’, y aborrecemos toda guerra y violencia. ES HORA DE FIJAR NITIDAMENTE ESA DIFERENCIA, y actuar en coherencia.

11 de septiembre 2023: 50 años

Correcto y justo: miremos al futuro y fijemos principios sobre los cuales asegurar bases primordiales de Libertad

Condición: si el pasado ya no tuviese asuntos pendientes, y toda aberración hubo ya de ser enjuiciada y aclarada en su tiempo y justicia, entonces no habría motivo para seguir enarbolando lo acontecido para hacerlo presente, y condicionar el futuro. Sin embargo, al haber asuntos graves que se mantienen en secreto, y crímenes abominables aun subyacen en los subterráneos de la maldad y de la perversa complicidad…esta realidad… provoca que el pasado insista en colocarse ante el aquí y ahora, y mientras tales repulsiones permanezcan sin resolver, habrá un lastre que no dejará que el porvenir se construya libre y sin heridas supurantes.

Todos y todas queremos un mañana mejor, superior y sin regresos a lo oscuro que ya es historia…y como la historia la escribimos todos quienes fuimos interprete de ese tiempo, entonces todos y todas somos responsables de sus efectos y consecuencias. Y en vista de que tales secuelas nos atañen y afectos a todos y todas hoy: es que es responsabilidad de todos y todas el zanjar lo pasado para hacer en conjunto un futuro sin los fantasmas y los horrores del pasado.

Reivindicar o justificar, con la mirada de hoy, y con intenciones políticas actuales, hechos pretéritos que se movieron en contextos diferentes y con grados muy diversos de desarrollo, es burda manipulación y una forma de mentir.

Hoy, -no entonces-, sabemos del gran valor de la libertad y del sistema democrático. Porque en aquel tiempo ni estos valores ni los derechos humanos eran tema o asunto para colocar en el plano de la política y de las propuestas de los bandos en pugna.  La idea de democracia en aquel tiempo era harto diferente a la que hoy podría concebir alguien de derecha o de izquierda en el siglo actual.

Ni la ‘democracia protegida’ de acuerdo con la defensa en contra del ‘enemigo interno’ que sustentaba el conservadurismo a la sazón; ni la ‘democracia popular’ que desbarataría la ‘democracia burguesa’ de la izquierda de mitad del siglo pasado, son hoy argumentos válidos ni teorías vigentes. Agruparse detrás de tales barricadas añejas y raídas es de un grado de miopía y estupidez acérrima e inconducente.

Éramos y fuimos productos de un tiempo, de una generación, de condiciones internacionales, de un estado de desarrollo de la humanidad que equivale a la edad de la pubertad y de la obcecación que nos hizo enemigos, y nos confrontó entre ‘monstruos fascistas’ en contra de los ‘desvaríos marxistas…’ Y al final terminamos hundiéndonos juntos en las ciénagas del oscurantismo y la porquería de la política pequeña.

¡Seguir con esta absurdidad es agotadora!

Es urgente sancionar los asuntos pendientes: que ya se sepan dónde y cuál fue el destino de los miles de detenidos desaparecidos.

Es un acto de inteligencia y de sana política NUNCA justificar una dictadura ni alabar a dictadores: toda tiranía, de cualquier color, en todo tiempo, es profundamente maligna, y profundamente antinatural.

Porque la Libertad nos la da el Creador, junto a la inteligencia para saber administrarla, y sólo en libertad el Hombre se vuelve creativo, fomentador de la Paz y constructor de un futuro mejor.

Ahora: hablemos de Futuro, de nuevos avances, de otro tipo de desarrollo, de la escalada tecnológica armoniosa, de cómo superar para siempre la pobreza, y cómo hacer para terminar con la violencia y aislar a los apóstoles de la Ira, sin caer en la misma violencia y sin ser también ‘justicieros’ que sepultan a la Justicia. Concordemos cómo hacernos de un sistema productivo moderno -(dejando atrás el concepto de ‘industrialización’ del siglo 19 y 20)- y de una matriz energética segura y libre de contaminación. Hablemos de las nuevas metodologías educativas y de los cambios sustanciales en los currículos…de la ‘otra’ concepción del Trabajo… de la Salud sin los vicios del mercado salvaje. Pensemos en el país y la sociedad del 2050-60

Si no ponemos la mirada en los proyectos hacia adelante, en el porvenir, y camináramos con la cabeza vuelta hacia atrás: caeremos irremediablemente en el agujero del atraso y de la confrontación que nos hará sucumbir al tiempo de las cavernas.

La Revolución es hoy ‘la superación con aprendizaje’ de lo pasado: para que nunca vuelva a ser presente y menos futuro, y es idear e imaginar una sociedad de Hombres y Mujeres que saben avanzar y progresar sin traumas ni culpas, sin olvido, pero con perdón, y renovación de los lazos sociales y de comunidad, con amplio sentido de modernización y siempre más libres. Porque la medida de la democracia y del progreso, y de la razón, es La Libertad.

La Gran Mentira

En el universo de la fake news se ha asentado la norma de la conspiración como elemento base de la realidad, vista desde un agujero pequeño y subjetivo. Curiosamente el evangelismo sectario ha ido detrás de esta corriente, llamando a su gente a desconfiar de cuanto no coincida con sus posturas y especulaciones.

Sabemos y asumimos que el Mundo, como Sistema basado en El Mercado, el Dinero y la Guerra, ha sido, desde siempre, un régimen despótico, esclavista, abusivo, injusto y plagado de una ciencia malévola, perniciosa y de maldad. El Síndrome de Caín ha dominado las leyes de sustento del modo de vida mundano imperante. Y las Religiones no han sido opuestas, contrarias a esta imposición, sino que han formado parte de su nomenclatura y de su poder. Basta escrutar la Historia y los Hechos para verificar tal irrefutable realidad.

Sin duda, los débiles bajo este sistema han sido los niños, las mujeres y las ‘supuestas razas inferiores’, o ‘las clases destinadas a servir a sus patrones’. La pobreza no es natural: es fabricación del sistema para disponer de masa dependiente, mano de obra barata y redil de experimentación. Y la ‘aceptación’ de este vil modo de gobierno se apoyó por siglo en la teología del sufrimiento que un artificioso dios determinada cuan ‘prueba de fe’ para los esclavos.

Aberraciones como la pedofilia ha sido una pervertida constante de la cual han hecho uso los señores con Mando desde sus instancias de poder: político, religioso, económico, militar, familiar, etc.  La Trata de Personas ha sido un sello Cainita desde antiguos tiempos: el mercado de los esclavos, las empresas de la prostitución, la emigración forzada, el secuestro masivo de personas obligada a abandonar sus lugares de origen para ser sometidas en centros productivos ajenos, el oscuro tráfico de niños y niñas incluso para extirpación de órganos o para formación de seres serviles con propósitos criminales…tales prácticas demoniacas han sido la vía subterránea que, desde siempre, el sistema mundano ha utilizado para aumentar su poder y sus espurias riquezas.

La evidencia científica muestra que el sistema climatológico del planeta posee ciclos, calculados en cada 12-13 mil años, y que en este tiempo atravesamos uno de aquellos cambios naturales, pero que la acción del Hombre y su sistema ha provocado que este lapso derive en una grave alteración que conocemos como ‘calentamiento global’ o ‘crisis climática’. La constancia en Hechos y Eventos deja la prueba en una altura imposible de refutar. Sin embargo, quienes niegan la evidencia quieren ver en esta realidad una… ‘teoría para justificar medidas que conduzcan al Hombre a la esclavitud de un gobierno mundial’

El evangelismo fanático recién ‘descubre’ la maldad del sistema como si ‘antes’ nada de lo malo que se denuncia hoy, existiese. Es decir, ‘antes’ la familia, la humanidad, el trabajo… la sociedad…era justa y segura. Ahora, con la aparición de los derechos de género, ‘la mentira’ de la crisis climática’, las vacunas que pretenden inyectar códigos secretos, la anti-religión que destruye las buenas tradiciones, y los males que se detectan sólo ahora… cuan novedad de este exclusivo tiempo… tienen a un enemigo en común: el progresismo, las democracias liberales que aceptan derechos LGTBIQ, el sistema mundial que postula a la moneda única, y el plan del gobierno mundial. Y basados en esta línea se asocian a las vertientes neofascistas y populistas más recalcitrante y retrogradas.

Corroboramos, y podemos verificar, que desde los años 50- del siglo pasado- se ha venido denunciando el Plan de los grandes grupos económicos y de cofradías políticas, siempre incrustadas en los altos puestos de poder, para lograr un Gobierno Único Mundial. Y en parte, dicho diseño ha sido implementado en la Comunidad Europea, en donde Alemania ha sido el eje y centro de una unidad que en alianza con los EE. UU. pretende imponer su dirección y gobernabilidad. A esto siempre se ha llamado ‘Imperios’ ‘Políticas Imperiales’. Que recién se acepte que este Plan es real, pero, supuestamente: ‘para romper con las estructuras de un pasado armonioso, o justo, o en orden…’  es una demostración de inmadurez política y de maña religiosa: pues se alza una verdad, sesgada en su contenido, para imponer una post realidad que cuaje con una narrativa de culto que cimente las bases de sistemas acérrimos, sectarios, fanáticos y fundamentalistas.

Todo cuanto hoy denunciado como ‘Complot mundial’ de las últimas décadas, en realidad ha sido desde el comienzo la regla de la realidad Cainita que nos rige. Y el sistema patriarcal, el orden forzado, la esclavitud, la Trata de Personas, el abuso inusitado de la niñez, las guerras, el comercio de la muerte, los exterminios, han sido el sello de la Maldad que hasta hoy nos ha impuesto sus reglas y su cadalso. ¿Por qué teorizar un imaginario pasado de orden y armonía que es amenazado hoy por franjas ‘progres’, liberales y ‘anti-religión’ e ideología de género?

No podemos negar la realidad: la homosexualidad y sus derivados han existido siempre, desde que el Humano tiene memoria y registro de su historia. Reconocer una realidad -que no gusta – no significa que se pretenda hacer implosionar a la familia tradicional. Creer que este factor, de por sí, es un detonante social de destrucción, es aseverar que la solidez y madurez del sistema familiar, y la concepción de unidad en los lazos del Ser Humano, son harto débiles, relativos y superficiales.

¿Por qué el evangelismo alarmista ha tomado esa vía fanática e irracional? Porque la tradición del culto eclesiástico ya no responde a las preguntas, inquietudes y realidad del ser humano actual. Y como se han amarrado las manos y la inteligencia a un solo libro, amordazando a Dios y encerrándolo en un texto que puede ser interpretado de mil formas, y por ende derivar en cientos de cultos, mal pudieran hallar respuestas flexibles, actuales, que tengan asidero en la realidad que ve y vive la persona de fe. Entonces hay que confluir en una realidad exagerada para armar el vaso comunicante y el sello que amalgame al redil con la necesidad de tener enemigos claros para unirse en el miedo y en la urgencia apocalíptica.

Es cierto: enfrentamos tiempos de cambios y de Tribulación. La forma de enfrentar este Tiempo que vivimos debiera sostenerse en una mirada objetiva de nuestra historia, y tomar los Efectos de hoy desde su Causa. Entonces veríamos que nunca hubo tal orden insuperable, ni tal unidad en la perfecta familia, ni religiones santas haciendo sólo cosas buenas, ni paz duradera inundando el plantea en justicia, y ciencia pura puesta al servicio del bienestar común…Y constatemos que, desde los Hechos de Cristo, hace dos mil años, el Hombre de este Mundo ha tenido una bifurcación, que es una Opción: o insistir en el Cainismo feroz y malvado, o postular al Hombre Justo que Cristo propone.

 Y debemos decir a las claras: que incluso la cristiandad, con sus guerras, inquisición, quemazones y alianzas políticas y financieras, ha sido parte del problema, y jamás fue integrante del Bien. Y que, si hubiésemos optado por la Gracia y por la Fe Coherente, naturalmente, habríamos cuidado este planeta cuan Creación hermosa del Creador, y hoy enfrentaríamos un ciclo de cambios sin mayores traumas. Y no habiendo incentivado guerras tendríamos sociedades de paz con un profundo sentido de Justicia. Y sin abuso de niños seriamos una sociedad sana y superior. Y sin esclavitud de la mujer tendríamos una calidad de humanidad superior. Y sin ciencia comercial y para planes de castas secretas, ya viviríamos una existencia de mayor calidad. Pero nada de aquello ha sido. Y lo real es que el Cainismo se impuso nuevamente, y por dos milenios hemos sembrado el desastre que hoy cosechamos.

Y nadie puede sentirse superior en moral o en fe, porque esa soberbia es parte del nudo no resuelto. Porque lo superior hoy no es dividir y llamar a la confrontación y al inútil litigio: sino que lo distinto pasa en este tiempo por La Espiritualidad, por La Coherencia de Fe y por hacer, por fin, realidad la propuesta de Cristo en el Hombre y en su comunidad.

Si nos reconocemos Seres Espirituales antes que Carnales, y cultivamos la Disciplina Espiritual: Oración, Meditación, Entendimiento de la Doctrina de Bien… y nos asumimos Personas de Virtud, aplicada y hecha cotidianidad… entonces, y sólo así, estaríamos proponiendo una salida diversa, distinta y diferente al mal aliento del sistema imperante.

Porque la odiosidad e intimidación en las ideas del evangelismo catastrofista hace parte de la confusión y del azuzamiento de la sospecha que llama al Hombre al pavor para que se torne violento, y de la hecatombe para que se encierre en su fanatismo, y la exageración especulativa- al punto de la mentira -para que finalmente pierda la fe en su capacidad espiritual. Así: siempre será necesario ‘un salvador político’, una religión única, o un sistema dictatorial que asegure y ‘ordene’… y de ese modo se justifiquen ‘guerras santas’ y se alcen los jueces eclesiásticos junto a los políticos populistas: todos definiendo qué es Bien y Mal, a su antojo y conveniencia.

 ¿Aquello…lo hemos visto antes? Porque hasta la más febril política y loca visión religiosa ya ha sido entre nosotros, en su contexto y en su modo; y siempre surgen estas demencias sectarias en tiempos de crisis, de cambios y de agotamientos de influencias y declive de sistemas: entonces los débiles de conciencia, escasos de fe y carentes de sabiduría llaman a las tiranías y sueñan con regímenes de mil años…  que siempre culminan en la abyecta violencia o en la justificación de la ‘atrocidad necesaria’.

Si somos sensatos e inteligentes: aquello no puede volver a hacerse realidad. Pero, observando al Mundo…como sistema imperativo…  comprobamos que, al parecer, tal locura está viniendo por nuestra libertad, enarbolando banderas sucias que dicen ‘libertad’.

Una verdad antigua

Ninguna verdad, nada en la realidad, surge al azar o sin causas, y todo Hecho, por cruel y abominable que sea, debe tomarse en su integralidad: desde sus orígenes y contexto, hasta su expresión hoy, en un contexto de crisis global. Solo así el Hombre tomará decisiones sabias, sin caer en medidas o actitudes despóticas, ciegas y por debajo de la inteligencia que nunca debe abandonar o menospreciar.

Sound Freedom   o ‘Gritos de Libertad’ es una película que relata la vida real de un agente estatal norteamericano que, golpeado por el tráfico de infantes en América del sur, dedica su vida, junto a otros ex agentes, que conforman una fuerza de investigación y rescate, a la salvación de niños y niñas por México y Colombia.

La crudeza de la realidad, que este trabajo devela, causa un golpe emocional inevitable, y la incredulidad ante tanta violencia y deshumanización surge como defensa ante una verdad atroz, tremenda, espeluznante e infernal.

Sin embargo, los datos sobre este mercado demoniaco están sobre la mesa de los organismos internacionales y de muchas ONG que de hace decenios han denunciado tal brutal realidad sin que los Medios de Comunicación ni la clase política haga propia esta denuncia, omitiendo la existencia paralela de un mercado millonario. Y si es verdad que hoy la bestialidad de los inhumanos seres que trafican, abusan, y despedazan humanos para el mercado de órganos, se pone ante los ojos del público mediante un Films, nadie podría creer, ni lejanamente, que tal monstruosidad sucede sólo en América Latina, y nada más que en este tiempo.

Mercado y tráfico de infantes ha existido desde siempre. Venta de recién nacidos desde instituciones católicas se han denunciado en Australia y España. Abusos y estupro de niños en iglesias o en instituciones acérrimas, bajo el poder de un Omnipresente líder, se han verificado desde años remotos. Experimentación con niños las hicieron los nazis, pero también ‘la ciencia’ norteamericana en Guatemala en los años 50 del siglo pasado. La Trata de infantes ha sido siempre despiadada y luciferina, aun si sus autores se vistan de comerciantes regulares o de buenos hombres.

El Cristo en Jesús dijo, tomando a un niño: ‘Quién a uno de estos hiciere mal, (daño)… a Mí lo hace’.

Obviamente la maldad de los demonios que hoy despedazan la infancia de miles de niños-as no se sienten tocados por Cristo y su advertencia. Pero queda clara la sentencia: hacer mal, daño, a los infantes e inocentes es una afrenta, un crimen, que Dios y el Poder del Cielo jamás perdonará y condenará según su gravedad. La pregunta es: ¿por qué el Hombre, los políticos, el sistema de justicia, las policías…nada hacen para detener y terminar con esta aberración? ¿Por qué los organismos internacionales se muestran pasivos y permisivos ante un dato espeluznante…?: siete millones de infantes, mujeres y varones para la esclavitud mueve al año la Trata de Personas.

Un detalle: llama poderosamente la atención que el evangelismo negacionista, que no acepta crisis climáticas o pandemias, ni vacunas, ni progresismo… porque su plan político es regresar al oscurantismo de los peores tiempos inquisidores… hoy grita por sus páginas y medios sobre el gran valor de esta película: porque su director mexicano es parte de este tipo de evangelismo, y porque esta realidad, que sin duda es traumática, vendría, supuestamente, a demostrar que: hay ‘un plan de los gobiernos progresistas y liberales’ para destruir las bases valóricas y esenciales de la mejor cristiandad tradicional. Y esta película lo demostraría

Hay que ver esta película: para cerciorar que este mundo Cainita, desde hace siglos, y con ahínco criminal en este tiempo, no sólo existe en su inusitada maldad, sino que actúa haciendo lo que sabe: destruir, matar, destrozar, aniquilar. Como lo hace en las Guerras, como lo hace con la pobreza, como lo hace con la injusticia, como lo sigue haciendo con la esclavitud.

No es que ‘hoy’ hay un ‘plan para destruir’: desde hace dos mil años hay una lucha de profundas contradicciones y abismales propósitos entre: Los Hijos de la Luz y quienes se proponen alzar al Hombre hacia su mayor Conciencia de Bien, y las Fuerzas del Mal, los hijos-as de Maldad y los intereses de los mezquinos y avaros dispuesto a vender carne humana y a recién nacidos para engrosar sus tenebrosas arcas. Eso ha sido así, y descubrirlo hoy no significa que ‘antes’ nunca fue ni existió.

Negar la historia y los Hechos para inventar un pasado de orden y de valores que solamente hoy, en este tiempo, se ha roto abruptamente, y que ‘la solución’ es barrer con todo Estado de Derecho y de Justicia para imponer regímenes acérrimos, dictatoriales, teocráticos y ‘puros’…es otra cara de la exaltación intolerante que surge en toda brecha histórica: cuando la crisis amenaza con romper la ‘supuesta’ seguridad religiosa e institucional.

Y en esta crisis actual, donde se conjugan diversidad de factores en pleno proceso de agotamiento y cambios, aparecen con fuerzas los populismos impregnados de religiosidad ciega que levantan una narrativa desde ‘partes de la verdad’ (verdad que siempre ha existido, pero que hoy se ha agudizado), y de esa porción de veracidad predican el llamado al retroceso, al delirio violento, al sectarismo decimonónico.

Toda verdad, como toda realidad, debe verse, analizarse y considerarse en su marco histórico; y verificar datos atroces hoy, que ya poseen antecedentes en pasado, (aunque los de hoy sean peores que los de antes), conforman una realidad objetiva que no puede desmenuzarse y dividirse para usar lo de hoy como factor contrario de un pasado hipotéticamente ‘perfecto’ o carente de estos mismos hechos. Eso es Tergiversar la verdad. Hoy se llama: Post Verdad.

En el ciego fanatismo se incuba el mismo Mal que se dice aborrecer.

La Inteligencia nunca será artificial

Si se entiende por Inteligencia la capacidad de entender, elaborar, discernir, estudiar, indagar y tomar decisiones, a veces siguiendo la lógica, otras impulsados por la emoción, y otras según bases de información en el intelecto; y extendemos a lo anterior la inteligencia que conduce a la persona por cielos inasibles o no materiales: como la espiritualidad o el arte…entonces la inteligencia es natural al Hombre en su potencialidad y máximo desarrollo para que sea un Agente de Vida.

Luego, aplicamos ‘niveles de inteligencia’ a ciertos animales, pero que del todo no poseen el ciclo que es posible hallar en el humano, pero incluso en otros seres vivos, la inteligencia cumple con ciertos requisitos que la hermanan en su Sentido mayor: la vida.

Cuando se usa la inteligencia para destruir, matar y distorsionar las leyes naturales al punto de causar anomalías ambientales o sociales, entonces este factor de vida se convierte en una contradicción, y dicha contraposición conforma un anti modelo de sociedad o de mundo.  Tal como ha sucedido con el mal uso de la inteligencia para sostener un sistema de guerra, de esclavitud, de injusticia y de destrucción. La misma inteligencia que ha creado sanación, avances, bienestar y armonía con la naturaleza… también puede sembrar ruina y desgracia.  Es decir: es el Hombre el que dará a la inteligencia su valor Constructivo o su condición destructiva. Y en esta línea existen valores que ponderan y definen el uso de la inteligencia humana: la moral, la ética, el bien común, la espiritualidad y la fe, y el discernimiento CONCIENTE entre el Bien y el Mal.

Cuando el Hombre crea un software o un conjunto de algoritmos, que bajo códigos matemáticos resuelve o procede con certeza en algo o en los casos para los cuales lo dirige ‘su creador’, no está creando ‘inteligencia’, porque esa ‘toma de decisiones’ carece de discernimiento y de base moral: de CONCIENCIA, y por lo mismo: mal podemos hablar de ‘inteligencia’ del momento que tales ecuaciones y actos son ‘artificiales’. Eso significa que una máquina que aprende de sus propios componentes no es más inteligente que el humano, sino que usa mecánicamente las posibilidades matemáticas con una rapidez que el Hombre no posee, precisamente porque sus cálculos y soluciones van ligadas a factores morales, de fe, éticos y de lógica, y considera efectos que pudieran dañar o contradecir lo que se busca. Mientras que la maquina solo calcula fríamente hasta alcanzara la solución, sin nada de lo anterior que caracteriza al Humano.

Que una máquina tome la decisión de matar ‘por error’ no implica arrepentimiento, razonamiento de causas, valores humanos involucrados. Nada de eso. Simplemente aprende a no cometer ese ‘error’ en forma mecánica y según aprendizaje de códigos y combinaciones binarias.

Que una máquina considere por conclusión matemática que el Ser Humano es un enemigo que podría ‘apagar’ su sistema, y por lo mismo ‘debe ser atacado’, no es una locura: porque las máquinas tampoco se vuelven locas, simplemente actúan. Y será solo la consecuencia de precisos algoritmos que levantarán muros de protección en contra de aquello que la maquina leerá como peligroso ‘malware’.

La mal llamada ‘Inteligencia Artificial’ es la consecuencia de la inteligencia del Hombre: pudiera ser real para beneficio y Bien de todos, y eso diría que el Ser Humano es ‘esencial y solamente Bueno’. Pero al haber maldad, deseos, mercado y dinero, poder, guerra y planes de dominio, será inevitable que la impertérrita máquina creado para fines de beligerancia y arbitrio, al final, también finiquite en el Hombre sus últimos vestigios de Bondad, ecuanimidad y Virtud.

Porque nunca será la máquina la malvada, -porque cualquier categoría de Bien o Mal no es aplicable en este caso-, sino que será maldad de la inteligencia humana que, en definitiva, le dará – y está dando-  las fórmulas y el propósito para crear su red de poder propio, que usará inamovible según sus infinitas ecuaciones.

El Mal siempre es Malo

• A propósito de los 50 años –

Este septiembre 2023 se recordarán los 50 años de aquel día fatídico en donde cambió la existencia de millones de chilenos y chilenas, e hizo de este país algo muy diferente de aquello que logró ser en decenios de democracia y cultura. Y no que la historia esté exenta de gobiernos autoritarios y autocráticos, o libre de populismos liberales, o de conservadurismos acérrimos, o de ápices revolucionarios de corta duración. Nada que no defina nuestra identidad y realidad.

Lo cierto es que este pequeño país en los años ‘60 se estaba quedando en el más abyecto subdesarrollo, y la urgencia de Reformas fue una imposición social que se alzó en los campos con la reforma agraria bajo el gobierno de Frei Montalva, y entre los estudiantes con las Reformas Universitarias, y con los grandes paros de trabajadores que a la sazón se hallaban unidos en fuertes sindicatos y bajo una central única. Surge el nuevo empresariado industrial e innovador en el campo. Las viejas recetas económicas dan paso a osadas propuestas de transformaciones. Los cambios surgidos entre 1960 y 1970 colocan las bases de una nueva correlación de fuerza en la política.

El gobierno de Salvador Allende fue el resultado de condiciones objetivas en la política chilena. No es producto de contubernios internacionales o de injertos extraterrestres o foráneos, como sea. Y esta realidad refleja la tozudez del conservadurismo arcaico y de raíces agrarias que dominaba en la derecha, la que carecía de cualquier atisbo liberal o de apertura mental hacia los cambios. Sin este atrincheramiento ortodoxo del tradicionalismo conservador, que incluso calificaba a la Democracia Cristiana de entonces de hacer el juego a los comunistas, no hubiese sido posible la unidad de la izquierda, sector siempre propenso a la división y a la separación ideológica. Y es justamente el empuje de la realidad que reclamaba cambios y reformas, y el muro reactivo y reaccionario que se oponía a cualquier avance, lo que, finalmente, conllevará a que con el 33% de los votos y el apoyo de la DC en el parlamento, surgiera el gobierno de Salvador Allende.

Si en una ‘realidad paralela’ la derecha hubiese aceptado los cambios graduales y relativos de la DC de aquel entonces, seguramente jamás hubiese existido una Unidad Popular accediendo al ejecutivo del Estado.

Esta responsabilidad histórica no es considerada, y se parte de la abstracción que coloca por un lado al ‘comunismo y la amenaza marxista’, y por otro la ‘necesidad de una intervención salvadora de las Fuerzas Armadas’. Este reduccionismo fatal no considera los fenómenos sociales y culturales en juego, ni estima los resultados de nuestra propia historia, y por ende soslaya las responsabilidades de la ideología conservadora que, justamente, por evitar progresos que desmantelaban su arcaico modo de producción, se oponían incluso al capitalismo moderno.

La izquierda de entonces estaba imbuida de marxismo, no como una ideología fracasada, sino, en ese tiempo, como posibilidad comprobada en el mundo socialista real existente. Y si bien Allende, ni el mismo PC de entonces, no postulaban al socialismo duro y claro, sí demandaban y proponían una ‘vía chilena hacia el socialismo’. Un ‘Experimento’. Un ‘Ensayo’ que llamó poderosamente la atención de las izquierdas en el mundo, y que llevó a la ácida crítica de los revolucionarios más ‘puros’, y abrió un ‘peligroso’ sendero de socialismo diferente pero igualmente aborrecido por los Estados Unidos. En efecto: Nixon y Kissinger darán directivas exclusivas para ahogar el intento experimental de la Unidad Popular.

La ‘salida’ armada surgió como una meta que fue estrechando el camino en tres años, y tanto en la izquierda como en la derecha, esta ‘solución’ creció, haciéndose urgente e inevitable.

El Golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973 no fue una sorpresa para la dirigencia y la militancia más comprometida con ‘el proceso’, sin embargo: la brutalidad y violencia de los militares y carabineros sí fue un hecho que enmudeció al mundo y causó reacciones opuestas extremas en todos los países que miraban con interés cuanto acontecía en Chile.

¿Qué razón válida y consistente podría justificar la tortura, las desapariciones, las ejecuciones sumarias y los campos de concentración? La izquierda no pasó de una feble resistencia armada: los ‘15 mil cubanos preparados para imponerse a sangre y fuego’ jamás existieron, el ‘plan z’ fue una invención casi infantil. Era evidente que ya en diciembre del año 1973 no había resistencia alguna a los militares ahora en el poder. Las definiciones que obligaban a inventar a un potente enemigo ahora se ceñían y dependían de una lucha interna por el poder entre quienes gobernaban.

La Constitución de 1980, con el circo plebiscitario que toda dictadura gusta mostrar para autentificar su dominio, asentó al dictador, y puso nombre al régimen tiránico: Augusto Pinochet. ¿Por qué, aun asentados en una estructura sólida y sin oposición con la cual enfrentarse o negociar, se mantuvo el aparato represor, las muertes, la tortura, las desapariciones y la cárcel? Y luego, lo sabremos años más tarde, se agregó el sistemático despojo del Estado, el regalo de empresas a incondicionales y el robo de millones de dólares para favorecer arcas individuales.

Toda Dictadura roba, mata, persigue, tortura, niega derechos y alza enemigos permanentes que dividen los ‘otros’ y ‘nosotros’ en una guerra invisible que se ganará solamente si el régimen mantiene su ‘tensión represiva’ permanente y constante. Es la lógica de Ortega en Nicaragua, de Maduro en Venezuela, de la dirigencia cubana, y de gobiernos autocráticos como en Bielorrusia y Turquía. Porque ‘participar’ y ganar elecciones no siempre significa que la democracia sea el piso y sustento de los autócratas como el señor Putin.

Decir que un dictador es bueno, porque ‘hizo buenas cosas’, o que es un ‘estadista’ aun si nunca se movió bajo las reglas de la democracia, o que para ‘solucionar’ temas y situaciones en democracia sea necesario imponer una autocracia populista, o una dictadura, de cualquier color, con uniforme o sin jinetas… argumentar tales atrocidades… refleja una incapacidad intelectual que dificulta cualquier simple análisis, y una mirada pegada en el ombligo que no logra alzar la vista a la historia, y menos visualizar potencialidades democráticas incluso en momentos terribles. Argumentar tales sandeces denota que el sentido democrático de tal persona es débil o francamente mentiroso.

Las dictaduras no son ‘buenas’ si son de un color y ‘malas’ si lucen del color que no gusta. Toda dictadura es Mala. Todo robo de las arcas públicas es delito en contra de la Nación y es corrupción que amerita severas sanciones. Nunca la tortura podrá justificarse incluso en estados agudos de confrontaciones políticas, o en las guerras. Jamás hacer desaparecer personas y negar en el tiempo el derecho a la familia de cerrar su luto, será algo coherente con la fe cristiana, cualquiera sea la iglesia que se reconozca, y no corresponde a ningún plano de ‘fe en Dios’ conocida. Ningún gobierno democrático encierra opositores solamente porque piensan diferente. Ningún ‘estadista’ mantiene la censura sobre la prensa y restringe la libertad de informar. Cualquier gobierno basado en el miedo, la división y la confrontación en donde siempre los favorecidos son los incondicionales, y los sometidos son los que se oponen, es y será un sistema oprobioso y de Maldad.

Volvamos a la ‘realidad paralela’: si en lugar del Golpe de Estado Militar en contra de la izquierda, hubiese sido un Golpe Revolucionario que hubiese aplastado a la derecha: la violación a los Derechos Humanos, la tortura, la cárcel y las ejecuciones se habrían verificado igualmente. Y lo puedo afirmar con conocimiento de causa. Y seguramente hubiésemos vivido años convulsos, y no de paz, que a mansalva hubiesen culminado con el derrocamiento de tal régimen, sea por acción de la oposición, sea por deterioro interno y ‘salida’ democrática. Como sea: sabiendo cómo éramos en aquel tiempo quienes fuimos activos en la izquierda, y asumiendo el momento de la historia en 1973: ni la derecha ni la izquierda postulaban a ‘salidas democráticas’. Y de verdad: no creo que ‘nosotros’ no hubiésemos hecho algo diferente de lo que nos dictaba el modelo revolucionario de entonces.

50 años después de esa tragedia y enorme lección, nadie que tenga algo de inteligencia política y un básico sentido común podría hoy reivindicar: o la dictadura que asoló Chile por 17 años, o alguna idea añeja para imponer regímenes de izquierda ortodoxa que en realidad es el mismo Mal con banderas diferentes.

Hoy no podemos impugnar la nefasta dictadura en Chile sin asumir con claridad la condena a regímenes de ignorancia y de retraso como el que ha impuesto el traidor a la buena causa anti somocista, el señor Daniel Ortega. O repudiar con evidente transparencia a un sistema mafioso y corrupto como el que se ha impuesto en Venezuela.

Porque, así como la realidad de la dictadura en Chile, en Argentina, en Uruguay nunca fue una ‘narrativa’ sino una cruenta realidad…tampoco la tiranía en Venezuela o en Nicaragua son hoy solamente un modo de ‘narrativa’ diferente que no impide integrar a tales regímenes al juego de la democracia continental. No. Esa mirada utilitaria y negacionista del presidente Lula es altamente nociva para la izquierda democrática.

A propósito del ‘negacionismo’. Hay dos ejemplos comprobables de esto: en Israel, con respecto al Holocausto, y en Alemania, en referencia al exterminio y campos de concentración del régimen nazi. En dichos países se considera grave y punible por la ley el ‘negar’ o ‘tergiversar’ la realidad del Holocausto o de las atrocidades nazis. No se trata de ‘libertad de opinión’ sino de ‘negar’ una realidad que de olvidarse o perderse…se repetirá.

Si en Chile queremos que las aberraciones acometidas bajo dictadura nunca más se verifiquen, bajo régimen alguno: se debe sancionar el Negacionismo que justifica las desapariciones, las ejecuciones, la cárcel a quienes piensan diferentes, la mordaza de los medios informativos y la persecución política. Porque tales barbaridades no constituyen una opinión, sino que una Realidad que NUNCA MAS debe hacer parte de nuestra historia.

 Porque el Mal siempre es Malo: y el Bien jamás puede vestirse de maldad si su propósito es fijar el Bien cuan modelo de sociedad y de Ser Humano.

La inevitable ‘tercera guerra’

El Reino de Dios no es de este Mundo, y este tipo de Mundo no es natural siquiera ante la realidad planetaria y de vida que le circunda. Es decir: el Hombre actúa y se expande como una plaga. Por lo mismo, seguir con la idea Cartesiana, bien asimilada por la cristiandad, en cuanto:  es el Hombre el centro de la creación, y es Dios quién se hace al Hombre y es el Hombre el objetivo primordial de Dios, y, por lo mismo, son las instituciones de Poder estructuradas por los Hombres los representantes del cielo en la Tierra, y la masa de personas comunes se deben en lealtad y sumisión, cuan becerros, a sus pastores políticos y religiosos y a sus dueños económicos… es justificar la maldad del sistema mundano,  y ‘glorificar’ al ‘héroe cainita’ que hace de la guerra y la esclavitud ‘un bien necesario’ o ‘un mal natural inexorable’. Tal ‘perversa naturalidad’ debe romperse en lo más profundo del Ser Humano, pues de no revolucionarse, el Hombre, desde adentro no habrá cambio sustancial y real en este Mundo.

Desde el crimen de Caín sobre su hermano Abel, esta estirpe de Hombres ha impuesto su régimen y dominio a golpe de guerras y tipos de esclavitud. Un Mundo basado en el perverso mercado y el dios dinero, en donde la violencia es parte indivisible de la política y de los grandes procesos de desarrollo marcados por la desigualdad y la fermentación de bolsas de pobreza.

Bajo este dominio, que aceptamos como ‘el mundo real’, las guerras no sólo son ‘parte intrínseca del sistema’ sino que constituyen una ‘necesidad’, en cuanto los poderes deben reacomodarse y asegurar control, y aquello es imposible sin pasar por el aniquilamiento y mutabilidad que solamente produce la guerra.

La España colonial concebía a los países de América como su fondo inagotable de oro y plata, medios urgentes para asegurar su prevalencia en Europa, y todo el sistema colonial europeo conformaba un entretejido de sustento económico que entonces era imprescindible. Los mercados se median por territorios, materias primas y esclavos.

El desarrollo industrial y comercial modernos altera ese viejo sistema. La primera y la segunda Guerras mundiales fueron el efecto de los reacomodamientos bajo una era que superaba los arcaicos sistemas e imponía nuevos modos de dominio y de mercado. De hecho, hoy asistimos al agotamiento de ese modelo post segunda guerra, y no solo en su medida económica, sino que en toda su nomenclatura institucional.

La Era de la Tecnología se asoma en medio de una crisis climática y el agotamiento del agua dulce y el envenenamiento del planeta. Ya no se trata de tomar territorios y extraer oro o petróleo. Hoy el mercado ha agotado su posibilidad de expansión, y la medida es la Cualidad y Calidad Tecnológica. Y en este cuadro los países y Estados que encabezaron el ahora alicaído sistema capitalista post segunda guerra (los EEUU y Europa) son los más afectados por el cansancio y agonía del sistema. Y de esa crisis fatal nace gestación de la tercera guerra.

China es el punto diferencial que no permite que Occidente arregle su decadencia sin temores por potencias ‘foráneas’.  El temor por la supremacía china es mayor que cualquier otro factor de riesgo.

El elemento ‘Rusia’ surge no de Rusia misma, sino que de Europa: caída la unión soviética, en los años de Boris Yeltsin, Europa, y en parte los EEUU, entra a los mercados rusos con vehemencia, y el desmembramiento de los países socialistas fue literalmente incentivado, y luego devorado, por el sistema europeo; y con la seguridad de su superioridad, mitad de Europa se hizo dependiente del gas y de las energías provenientes de la ‘ahora’ Rusia amiga. Desde el 2012 los EEUU presionan a la OTAN por una expansión con fuerte presencia en los ex países socialistas, acercando poder nuclear y militar a las fronteras rusas. El año 2014 estalla el conflicto en la frontera ruso- ucraniana. Y desde entonces los EEUU nunca han abandonado su agresivo plan de cerco militar sobre Rusia.

La ‘guerra especial’ de Rusia sobre Ucrania en realidad es la respuesta de este país a los EEUU y a la OTAN, y de paso, ha dejado al desnudo la debilidad y la dependencia de la economía europea.

Hoy hay tres puntos de guerra en curso: Ucrania; Los Balcanes (Serbia-Kosovo); Taiwán y Corea (que involucra a Japón).  Otros puntos ‘menores’ están bajo un ‘estado de guerra de baja intensidad’: Israel-Palestina (Conflicto árabe); Pakistán – India. Guerras ‘limitadas’ hay en: Sudán; Yemen.

La posibilidad de uso de armas nucleares está absolutamente vigente y amenazante: ninguna guerra será prolongada como lo fueron la primera y la segunda en el siglo pasado. De haber una guerra continental en Europa, con la participación y dirigencia norteamericana, o de cerciorarse un conflicto con China que enfrentase directamente a los EEUU: el uso del elemento nuclear es lo único que asegurará que la guerra no sea de larga duración, pues una confrontación global de más de un año dejaría al mundo en la edad de piedra, y eso no es bueno para ‘los negocios’.

¿Se puede evitar esta tercera guerra? Todo indica que no. Una repartición acordada y pacífica de los mercados y una red de colaboración tecnológica fuera de la radical competencia del mercado…es imposible. Solo una guerra podría definir fuerzas y sacar del escenario a los más débiles, y recomponer las relaciones de mercado, y establecer nuevas alianzas…  todo muy diferente a como hasta hoy lo entendemos. Hablamos de la desaparición de la ONU, (y de instancias religiosas con carácter de Estado, como el Vaticano), por ejemplo, y de una concepción impensada, hasta ahora, de la Organización Mundial.

Después de la tercera guerra, si es breve, (altamente destructiva pero dirigida en su hecatombe), veremos caer todo el sustento creado desde los resultados de la segunda gran guerra.  Y lo seguro es que China será el nuevo eje central del nuevo sistema mundial.

¿Será un mundo mejor? No. Será distinto en su forma y en su modo de existir. Pero no será diferente en lo sustancial: El Cainita cambiará de piel, pero seguirá siendo el depredador que siempre ha sido.

Este itinerario avisado podría verse alterado por intervenciones cósmicas, por milagros del Cielo, o por eventos que rompen la lógica de este Mundo: pero de no haber nada extraordinario, los Hombres harán lo que saben hacer: la guerra.

Recuperar la inteligencia y la cordura

• a propósito de: delincuencia y medidas políticas

El mayor tesoro del Hombre es su capacidad para discernir, analizar, hallar causas y prever los efectos, aprender de sus errores, arrepentirse y corregir, perdonar y avanzar por esta existencia más fuerte gracias a las pruebas.

Lo contrario a esa buena naturaleza es la exaltada espontaneidad que concluye en histrionismo y montoneras que gritan sandeces irracionales completamente carente de análisis y perspectiva.

Ante una crisis o momentos cruciales en un país, es urgente cuajar las pasiones y dar espacio a la inteligencia, por ejemplo: retirarse de la visión micro y definir si el tema de la delincuencia y la violencia es solamente local, nacional, o es una lacra de estos tiempos de tribulación que golpea al continente, y posiblemente a más lugares del planeta.

Desde una mirada macro constatar también que la emigración es un fenómeno duro, complejo y presente en todo el mundo, adquiriendo gravedad en Europa, y recientemente en América del Norte y del Sur. Que el narcotráfico es de hace decenios un amarre ciego que ni potencias con infinidad de recursos ha podido vencer del todo. Y que tales males de este tiempo…han llegado a nuestro país con hechos dolorosos que exigen respuestas firmes, organizadas y orgánicas, planificadas y sin mayores tardanzas.

Es parte de los hechos que ni el segundo gobierno de Bachelet, ni el segundo mandato de Piñera se hizo algo serio ante el avance de este mal, pudiendo proceder con mayor tiempo y menos presión. Y es dato de la causa que en este año de gobierno de Boric el asunto que diariamente permeaba y carcomía a la sociedad pareció no ser visto ni considerado por la política gubernamental.

Es la clase política la que ha fracasado ante la arremetida violenta y armada de la delincuencia. Es el Estado, todo, – el parlamento, la justicia, la fiscalía -, quien no ha sabido crear condiciones unificadas bajo criterios de defensa a la democracia y preservación de la paz.

Y ahora, con policías acribillados y pandillas desaforadas por las calles, el populismo sinvergüenza y cara dura sube a la palestra con su demagogia y agitación para proponer ir a una supuesta guerra que rompa las bases del Estado de Derechos e imponga lo más parecido y semejante a la dictadura que tanto añoran. Mientras que la izquierda traumada se opone a todo orden de Inteligencia y de efectiva represión en contra de la delincuencia bajo el consabido argumento de los ‘derechos humanos’, que en realidad se trata de una desconfianza brutal y visceral hacia todo el andamiaje de Fuerzas del Estado: Policías y Fuerzas Armadas. Y pudieran tener cuotas de razón y de buenos argumentos para esto, pero dejar todo el espacio a los afiebrados ultras republicanos y regalar el tema a la derecha e incluso oponerse a la izquierda social demócrata, es ir hacia vías extremas que los enajenan de la cruenta realidad que se vive en los barrios y poblaciones.

La base de sustento para aplicar medidas severas y efectivas en contra de esta lacra de maldad es el pleno respeto del Estado de Derecho, la Democracia sustentada en la Libertad y la Paz, y una política clara y coherente de defensa de los Derechos de las Victimas, y de los Civiles que viven en los territorios en donde el narco y las pandillas actúan; y un sistema penal que sentencie en concordancia con la urgencia de la situación, además de un cambio radical en el sistema penitenciario. Una política de orden en la emigración que dé oportunidad a quienes trabajan o buscan hacerlo, y fórmula implacable con la emigración ilegal y las bandas que se solapan entre sus pliegues.

Y sobre un Orden de Inteligencia moderna, sostenido en el tiempo, elaborar catastros y mapas reales del narco, de las pandillas, de la emigración ilegal y de cada fenómeno delincuencial.

Sin una base de este tipo, o similar, es inútil, inconducente tratar el tema de Carabineros o de la acción policial: porque partir de lo policial, sin sustento político estratégico, apoyado en una política de Estado, completa e integral, es caer en la corta y falaz visión de que con más policías y más armas se acabará con un fenómeno que no es exclusivo de este país.  

Si la clase política asume su responsabilidad y sus integrantes se rehacen a su calidad de Seres Inteligentes y cuerdos: seguramente hallaremos la vía de la paz que este pueblo reclama.

De como la izquierda pavimentó el camino a la derecha extrema

Decirlo hoy, octubre 2022, y no en años posteriores, quizás tenga o mayor validez por su comprobación, o mejor percepción histórica debido a que nunca sucedió.

Porque está produciéndose, está siendo una realidad en fermentación, que pudiera no brotar, y en tal caso sabremos exactamente cómo estaban las cosas en esta fecha; o pudiera hacer explosión en los meses y años venideros, y constataremos que dicho suceso pudo evitarse, y que fue altamente favorecido por la inoperancia y falta de visión estratégica de una izquierda sin respuestas, magra y confundida.

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El 70 % de aprobación para que Chile tuviese una Nueva Constitución, y la elección de una Convención claramente de izquierda, y de personas independientes provenientes del Estallido Social (Lista del Pueblo), pudo ser el comienzo de una situación ‘prerrevolucionaria’- según la clasificación de las ciencias políticas, y también la lectura bajo el análisis marxista tradicional-

En lugar de ‘acumular fuerzas para fomentar una correlación de fuerzas favorables’ (como se diría en el lenguaje setentero), esta izquierda ‘moderna’ tiró todo por la tangente desligándose de los movimientos sociales y pretendiendo dar ’golpes de palacio’, como intentando ‘cambiar todo desde la verborrea y la imposición asambleísta’. La corta duración -y su fin penoso- de la Lista del Pueblo define la carencia evidente de capacidad política que ahora se ha expandido cuan pandemia por toda la izquierda.

El gobierno de Gabriel Boric aparece como un ‘punto de quiebre’, o aquella bifurcación que definiría las vías por donde iríamos los chilenos. O esta izquierda daba por fin respuestas estructurales y de fondo a los reales motivos que convocaron a millones de personas por las calles del país en el año 2019…O se acomodaba al poder y se integraba al juego tradicional de la ‘clase política’ para, al fin, cambiar algunas cosas sin transformar lo sustancial.

Los meses antes del Plebiscito el gobierno Boric no apretó el acelerador de las reformas en espera de los ‘buenos resultados’ en el referéndum constitucional. Error fatal y carencia absoluta de voluntad política. Con la derrota de la propuesta Constitucional, el gobierno Boric se ve partido y segregado: una coalición interna que se divide entre quienes empujan a ciegas y quienes ‘esperan’ en la oscuridad. La salida del presidente: recurrir a la social democracia de la ex concertación.

De los problemas de narco tráfico, delincuencia, violencia y desorden público no hay ni plan conocido ni acción evidente. De la emigración indiscriminada e ilegal, con infiltración casi masiva de carteles y delincuencia organizada: el gobierno consta, comenta y opina…al igual lo hacía el gobierno del señor Piñera. De la resolución política del conflicto en la Araucanía: misma receta de los gobiernos anteriores…mismo resultado con empeoramiento y escalada aún más aguda. Aun las ISAPRES sobre explotan las capacidades de la ya empobrecida ‘clase media’ y desmejoran la salud haciendo, hoy más que nunca, un lujo y un negocio escandaloso. En la salud publica nada ha cambiado… ¡nada! En la Educación: todo sigue en su ‘perfecto deterioro y paupérrima calidad’. No hay reforma a las Policías. Hay un paso lento, cansino y desganado en la reforma de las AFP.

Pero la fuerza y punto de apoyo del Gobierno Boric, y de su coalición, residía…no en la mayoría en el parlamento, que no la tiene, (y aunque la tuviese) …  en su relación con los movimientos sociales, en su gobernabilidad horizontal y territorial, y hacer partícipes a los sectores de la sociedad a la que conciernen los cambios y reformas; en cambio, esta izquierda de palacio optó por gobernar verticalmente y barajar naipes en las cocinas del poder. Ahora, hay un presidente y dos coaliciones de gobierno dividas entre sí y atomizadas entre ellas, que igual pueden contraer pactos de no agresión en conclaves y acuerdos internos, pero en la realidad son un cúmulo de intereses particulares entremezclados con egos y falta absoluta de ‘Causa Política común y estratégica’

Sin embargo, la carestía, la crisis en la economía mundial, la guerra en Europa que no postula a la paz sino a la confrontación mayor con amenaza nuclear, no ofrecen un panorama objetivo y global favorable. Por lo que no podemos esperar años felices y mejores por venir. Y justamente por lo mismo es que se requiere un Gobierno sólido, con políticas efectivas en la resolución de los temas más acuciantes y graves, sin complejos, sin miedo a gobernar, y siempre informando adecuadamente a la gente y haciéndola participar de sus iniciativas. Y es aquí en donde se ha creado un peligroso abismo, un vacío de gobernabilidad y una necesidad agobiante que no será copada o solucionada por la gradualidad política de la derecha tradicional ni de la izquierda segmentada: O halla una salida revolucionaria – que no se ve ni está en el horizonte real- O emprende la desastrosa senda del nefasto populismo que lo único que hará es hundirnos aún más en el fango.

 O surge el caos y la violencia que produce años de incertidumbre y desgobierno -que debe evitarse a toda costa- O se alza la derecha extrema -con apoyo militar- y entramos en la vorágine del post fascismo latino americano que, quizá, elimine los bolsones más agudos de las amenazas actuales, pero coaccionará el Estado de Derecho a una mínima expresión-formal, no real- y rebajará la calidad de la democracia, y sembrará odiosidad y radicalización por otros 40 años.

La salida a la cual debemos aspirar las personas de paz y que apreciamos la democracia como el único sistema que nos garantiza la libertad, debiera apuntar a un Gobierno Fuerte y sin complejos para, de una vez, cortar el crecimiento de los males que aprisionan y atemorizan a la población, y guiar al pueblo para pasar por una tormenta mundial que no podemos evitar, pero que sí debemos saber enfrentar con Firmeza y Unidad.

Si dejamos de pensar en ‘derecha’ e ‘izquierda’: y comenzamos a medirnos según la realidad y basarnos en Principios de Democracia Real, seguramente hallaríamos muchas coincidencias entre izquierdistas y derechistas e independientes, es decir ENTRE PERSONAS con SENTIDO COMÜN y disposición de Unidad y de Gobernabilidad por el Bien de todo habitante de este país.

Hoy, las señales muestran que la izquierda actual no fracasaría por acción de la derecha, sino por propia incapacidad e inoperancia. Que la derecha no posee plan verdadero para romper con la crisis actual y encaminar al país hacia soluciones de cambios urgentes e impostergables. Y que lo único orgánico que pudiera alzarse como ‘solución’, nos lleva al extremo de un neofascismo encubierto. Y ‘recemos’ para que la locura del populismo no contamine a los chilenos y chilenas.

Carta abierta al presidente Gabriel Boric

Desde el respeto por el cargo de la presidencia de la República, y mis sinceros deseos de que su gobierno cumpla con las necesidades y aspiraciones de nuestro pueblo, redacto esta carta abierta con la esperanza depositada en su apertura y disponibilidad para escuchar a la gente.

La violencia nunca será un fenómeno abstracto: o posee causas sociales profundas, o es la expresión de un diseño político determinado, o es la forma de asentar poder por parte de la delincuencia y el crimen organizado; o es una política de Estado bajo regímenes autoritarios y dictaduras de cualquier color.

En el contexto de la Democracia, toda violencia es antidemocrática y apunta a provocar inestabilidad que, en definitiva, abre brechas de confrontación peligrosas e irreversibles.

La izquierda en Suramérica, después de acérrimos años de tiranía, persecución, muertes, torturas y desapariciones, ha criado y acunado un trauma político que le impide defender la Democracia de los ataques acráticos y fascistoides. A lo más, repiten fórmulas ‘seguras’ o ‘conocidas’ o ‘aceptadas por la opinión pública’ que otros gobiernos, incluso de derecha, ya han aplicado, aunque sin resultados.

Urge un debate abierto y definitorio cuya óptima oportunidad es hoy, bajo -y en-su gobierno.

Las bases más recónditas del ‘estallido social’ del año 2019 se encuentran sumergidas, pero vivas e irresueltas. Y aunque a la ‘clase política’ le disguste esa calificación, en la realidad que comprobamos hoy, sí actúa y se presenta como una ‘clase política’ imbuida de indiferencia por lo que sucede a la gente de a pie.

Yo fui dirigente de FESES (secundarios) en mis años adolescente, estudiando en el entonces Liceo Mixto n° 1 de Santiago, hoy ‘Confederación Suiza’, y, como usted, sabemos que al interno del colectivo estudiantil ‘nos conocemos todos’ y ‘sabemos quién es quién’. Por lo mismo, con una ínfima operación de Inteligencia se podría identificar a los ‘anarcos-molotov’, aislarlos, tratar con sus padres, buscar soluciones académicas alternativas e impedir que permanezcan entre el conglomerado estudiantil. No es necesaria la represión, ni tanto gas, ni policías en luchas callejeras: eso no soluciona absolutamente nada y juega a favor del aumento de sensación de caos y desgobierno. Y claro, obviamente, tal cirugía debe ser acompañada de ‘soluciones reales’ que pongan fin a una educación que sigue siendo de dudosa calidad y bajo un sistema educacional anquilosado que no se ha movido lo suficiente hacia la modernización

 Luego, cabe una pregunta elemental: ¿dónde están los jóvenes democráticos? ¿Dónde la izquierda dando lucha ideológica y enfrentando al infantilismo seudo – revolucionario?

¿Por qué temer a una estructura de Inteligencia sin los vicios y taras fascistas? Una Inteligencia moderna e innovadora, altamente tecnologizada, con estándar éticos exigentes, apegado al Estado de Derecho, y basada en la defensa y sostén de la Democracia, en grado de interrelacionarse con agencias contemporáneas enmarcados en el pleno respeto por los Derechos Humanos: ¿Por qué no? ¿Por qué se permite la sobrevivencia de aparatos de Inteligencia parcializados y parcelados cuyas bases fueron estructuradas bajo la dictadura…o por lo menos mantienen sus principios de acción envueltos en una nebulosa?

Las bandas del crimen organizado, verdaderas industrias del dinero sucio, el narco trafico y las mafias o carteles tienen su razón de ser y de existir en la abundancia de sus ganancias; y la forma de golpear su nivel de flotación será siempre siguiendo la ruta del dinero, cortando las vías del dinero, impidiendo el movimiento del dinero y persiguiendo formas ilegales de enriquecimiento. ¿Por qué no se procede de esa manera? Porque la riqueza de las mafias y carteles ha permeado al Estado: sea que ha reemplazado al Estado en los barrios y zonas, sea que ha sabido corromper ganglios vitales del Estado. Y eso es evidente en países vecinos, y comienza a mostrarse en Chile.

Para romper la ‘omertá’ (la complicidad por omisión y silencio), es imprescindible la Unidad Política de todas las fuerzas democráticas en el país…todas… y la plena participación, activa y comprometida, de la estructura del Estado en su totalidad, en especial de la Justicia.

Y es DEBER de un gobierno democrático, que postula a reformar el Estado y favorecer el progreso de su gente: impulsar una verdadera ‘cruzada’ de Protección del Estado de Derecho y de la Democracia, creando leyes urgentes e inmediatas, contundentes y efectivas, que permitan desbaratar este andamiaje mafioso y delincuencial que literalmente ahorca a la nación y esclaviza al pueblo. Porque el juego del ‘policía persiguiendo ladrones’ es ya una burla que menosprecia la capacidad de discernimiento de todo el país, y es una forma de denigrar a las policías y de potenciar a los verdaderos poderes que se esconden detrás de la ‘mano de obra del crimen’.

También en este caso se requiere de Inteligencia: una financiera que siga al dinero y sus entramados, una que teja redes de colaboración en la comunidad, una que por su alta capacidad y formación tenga el ingenio para infiltrar y socavar desde adentro las estructuras criminales.

NO ES NECESARIO la violencia y la balacera, o la instauración de verdaderos campos de guerra. Eso es absolutamente inconducente. Como es de energúmenos y de seres de muy escaso discernimiento proponer ‘golpes de Estados’ y ‘regreso de los militares al poder’, como balbucean sujetos limitados como el señor Checho Hirane, desde la caverna de la llamada ‘radio agricultura’. Y seguramente, aun en medio del juego democrático,  habrá quienes ‘piensan’ – (si a eso podemos llamar ‘pensar’)-  al igual que este comunicador:  reducidos en su ‘sentido de realidad’ y acariciando nostalgias gorilas.

También en el tratamiento del conflicto mapuche: la Inteligencia hará su labor quirúrgica para separar a la verdadera necesidad del pueblo mapuche, sus justas reivindicaciones, de aquellos grupos armados carentes de identidad originaria y tan repletos de teoría sesentera.

En Democracia no es bueno ni aconsejable usar al Estado solamente como factor represivo, represor y ‘legalmente violento’. Precisamente, por ser ‘El Estado’ y en particular un ‘Estado Democrático’, tiene el deber de sacudirse de lo añejo que lo frena, y darse leyes y normas eficaces que no sólo reaccionen ante los Hechos acontecidos, sino que su flexibilidad y eficiencia esté en grado de prever y evitar bolsones antidemocráticos y de fermentación de la violencia. Quién menos debiera acudir a formas violentas es, precisamente, el Estado.

El Principio de Autoridad no se asienta con represión y más violencia, sino con medidas y leyes pertinentes, inmediatas, preventivas y acorde con este tiempo de cambios y de posibilidades de alta tecnología. Con capacidad de Inteligencia y con poder de Inteligencia de Estado que, justamente, evite llegar a la ‘única solución’ de la bala, el bastonazo, la militarización, la guerra (grande o pequeña), la dictadura (cualquiera sea su color) y el sacrificio de vidas.

Urge mayor aplicación y acción de Principios. Y ya estamos hartos de tantos comentarios y repeticiones principistas y de buenas intenciones. La manera más concreta y real de defender a la Democracia es aplicando los Principios de Autoridad en forma y modo Inteligente, actual, y con mirada a la PAZ.

Saludos Cordiales y mi sincero respeto

Ciudadano Ricardo A.Urrutia.V.

Resultado Plebiscito Constitucional: lógica de porcentajes y realidad política

Habitualmente en Chile vota un máximo de 8 millones y medio de personas. En esta ocasión votaron 13 millones (m/m).  Es decir, el comportamiento de Cuatro millones y medio de sufragantes no se conocía ni se podía medir comparativamente.

La derecha en la segunda vuelta de la elección presidencial obtuvo Tres millones seiscientos mil votos (m/m)

Se calcula que al menos Un Millón y medio de votos de la izquierda, – o que botó Boric en segunda vuelta presidencial – esta vez votó Rechazo a la propuesta constitucional (‘izquierda democrática’- DC- sectores medios- ). Teóricamente suman, entre la última votación de la derecha y la social democracia del Rechazo: Cinco millones de votos (m/m).

El Rechazo obtuvo siete millones ochocientos mil votos (m/m). Es decir: Dos millones trecientos mil votos (m/m)salieron de la gente que habitualmente no vota en elecciones voluntarias y regulares.

 La izquierda, en tanto, obtuvo Cuatro millones seiscientos mil (m/m) en la segunda vuelta presidencial. Si a esto ahora restamos Un millón y medio de votos que no apoyaron la propuesta constitucional (social democracia- DC- Centro), la izquierda entonces conservó Tres millones cien mil votos (m/m) de aquellas elecciones.

Si el Apruebo obtuvo Cuatro millones ochocientos mil votos (m/m): significa que Un millón setecientos mil personas, de quienes habitualmente no votan, ahora lo hicieron por la opción Apruebo.

Si endosamos los votos del Apruebo como eventual apoyo para el gobierno Boric: se podría sostener la hipótesis de que éste ‘conserva’ su base electoral (en números de sufragios) en torno a los cuatro millones y medio.

Podemos especular también que los siete millones ochocientos mil votos (m/m) del Rechazo corresponden, según votación de plebiscito de entrada; Un Millón y Medio (m/m) al sector que NO quiere en absoluto cambiar la Constitución actual. Más/menos Un Millón y medio a la izquierda moderada que sí quiere cambiar la actual Constitución. Dos millones trecientos mil (m/m) serían de la derecha de centro que ha manifestado voluntad para una nueva constitución. Quedando la incógnita sobre el ‘voto no habitual’ o ‘no medible’ por no tener comparación con elecciones habituales: Dos millones trecientos mil votos.

Según este desglose estadístico en base a ‘lógica de porcentajes’: la derecha en su conjunto NO puede arrogarse como ‘propia’ la votación de este Plebiscito, ni podría ahora considerar que toda aquella votación está asegurada detrás de sus posturas. O que esos votantes aceptarían que, por ejemplo, cambiaran de opción y ahora estuviesen por no convocar al pueblo a un nuevo proceso Constitucional.

Que ha salido reforzado el Centro Izquierda de carácter social democrático-DC, sin la cual el gobierno Boric tendría un piso frágil, ( y, -también-,  sin la cual la derecha no tienen posibilidad alguna de imponer sus proyectos),  dado que el universo de votantes de la izquierda al gobierno conserva su porcentaje de apoyo en torno a los cuatro millones y medio de sufragios: no suficientes para marchar solo o imponer sus políticas sin otras alianzas, pero ni tan débil como para siquiera pensar en un ‘fracaso adelantado’ o supuesta ‘debilidad sin suelo real’…como han exclamado en su entusiasmo algunos dirigentes de la derecha.

Chile – y su política- está OBLIGADO a buscar Alianzas, establecer Acuerdos y abrir Puentes de soluciones pactadas. LOS EXTREMOS HAN SIDO DERROTADOS…incluso si mezclados con el ‘Rechazo’, por ahora, la ultraderecha ‘también’ se sienta ‘ganadora’.

El proceso Constitucional sigue.

Ojalá se encauce por la vía del diálogo, de la plena participación ciudadana, de la paz… y de la Justicia social que tanta falta hace a este pueblo.

Una duda razonable

• Caso de arresto de dirigente insurgente Héctor Llaitul –
• Por qué la nueva constitución es la salida política al conflicto Mapuche-

Hay dos formas de entender los hechos que se suscitan en y con elementos y aspectos insurgentes: a) desde la política, b) desde la concepción militar.

En política bien se sabe que la vía de la violencia ha sido descrita, explicada y justificada desde el estratega prusiano Clausewitz, pasando por Lenin, Mao tse tung, el general vietnamita Giap y el Che Guevara, entre otros muchos. Y no solamente desde la izquierda o desde fuentes revolucionarias: también desde la academia, y en particular desde la academia militar en general. La guerra, como el uso de la violencia, es otra forma de hacer política cuando las vías de la democracia y de la política institucional o estado de gestión acordado se agota, o no existe, o ha sido derrocado por una fuerza determinada, o se impone una tiranía. Las guerras de liberación nacional se entienden cuando una nación constituida es asediada, ocupada y de algún modo esclavizada por otra nación.

Leemos e indagamos las posturas publicadas y agitadas por la insurgencia en territorio Mapuche. Se plantea una guerra revolucionaria de ‘liberación nacional’; se considera traición (yanaconas) a los mapuches que participan en política desde otras posturas y buscan soluciones al margen o en desacuerdo con la violencia armada. Lo más llamativo: no plantean una doctrina ‘indígena’ correlativa con su historia y cultura, sino que expresan una concepción marxista ortodoxa extraída de los sarcófagos de los años 60-70 del siglo pasado. Y esto marca un punto de inflexión: ante una postura y doctrina ‘indígena’ o ‘indigenista’ como existe en Ecuador, Perú, Colombia… el Estado puede negociar y acordar precisamente porque la diferencia y la diversidad no apunta a destronar al ‘sistema establecido’, sino que ofrece la posibilidad de democratizar el Estado con la integración de una pluralidad cultural, religiosa y política que enriquece a la democracia: como los procesos en Nueva Zelanda, Canadá, etc.

¿Es legítima la guerra o la violencia armada en democracia? No.

¿Autentifica el uso de las armas el carácter de ‘liberación nacional’ que se quiere dar a la guerrilla actual? En política se entiende por ‘Liberación Nacional’ la guerra o lucha por todos los medios cuando una nación constituida es ocupada o esclavizada por otra.  Cuando un pueblo, etnia o minoría nacional se auto considera ‘nación’ no necesariamente se convierte en ‘nación’.  El primer paso de las minorías, como los Vascos, Catalanes, Escoceses, Irlandeses, etc. fue fijar hitos políticos de Institucionalidad, mediante referéndum, gobiernos provisionales, parlamentos autónomos, zonas liberadas con gobiernos propios, etc. Y para lograr ese paso vital, no apuntaron a dividir, sino que buscaron unir a las diferentes corrientes en un proyecto de nación que les diera el sustento político. Aunque luego, lo demuestra la historia, hubo división y diferencias, al final toda corriente se rehace y se basa en aquel hito de unanimidad nacional.

¿Por qué la insurgencia en zona Mapuche rechaza la posibilidad del Logro Constitucional? Justamente la inclusión en la Constitución autentifica a la nación Mapuche y le da ese sustento político que le permitirá avanzar en forma gradual, pacífica y de mayor autonomía, sin rupturas con el sistema democrático, sino que integrándose a este, y por lo mismo, dando un impulso nuevo a una democracia que reclama saltos cuánticos para su prevalencia y renovación. Por lo mismo, no se comprende la razón política de los insurgentes. Y sí se entiende desde la idea de que no es plan de su rebelión el asentar aspectos políticos, sino que aprovechar la coyuntura tal como se encuentra hoy.

La integración de los pueblos originarios en la Convención Constituyente ha sido un paso político mucho más importante de lo que se entiende desde la cúpula santiaguina: porque vino a romper con la vía única de las armas y abrió una senda de institucionalidad participativa que apunta, por fin, a establecer medios políticos de administración propios en el marco de un Estado que se reconoce amplio, inclusivo y plurinacional. Que la nueva Constitución NO reconozca estos avances, o los merme y restrinja, o los haga retroceder: sería una necedad política y un error histórico. Y lo peor: dejaría a las fuerzas de la violencia armada el camino limpio para crecer y prevalecer.

Porque es justamente la política el único elemento que aislará a la insurgencia y cortará su suministro de simpatía y de apoyo. Y la salida política para que el pueblo mapuche tenga voz y peso constitucional está a un paso de ser realidad. Ojalá no se pierda esta gran oportunidad histórica.

La política, y en especial la visión de las izquierdas y del verdadero liberalismo progresista, debe considerar esta realidad: fuerzas y posturas indígenas apegadas a su tradición y urgencias, con necesidad de justicia e integración desde su particularidad, por el lado mayoritario; y por otro: fuerzas internas minoritarias sustentadas sobre la práctica y la línea de la guerra según cánones ideológicos injertados.

Desde la postura ‘antisistema’, y la evidente ‘desvalorización de la democracia burguesa’, y la imposición de una fuga profundamente anticapitalista y con bríos de un socialismo separatista: cualquier salida de reforzamiento de la identidad nacional en el contexto de la democracia…es altamente perjudicial para la insurgencia. Por lo mismo: esperan el fracaso de esta Constitución propuesta y de cualquier otra salida semejante o parecida que les afecte en su visión unilateral.

¿Por qué el arresto de Héctor Llaitul a días previos de la consulta constitucional?

Sabemos, y se nos enseña en la academia militar, y nos indica la historia política, y nos alerta la experiencia revolucionaria, que todo grupo insurgente ‘debe’ ser infiltrado por la Inteligencia del Estado al cual combate la insurgencia.  O sea: un Estado que no se esmera por infiltrar a la insurgencia es deficiente, ciego e incapaz. Por lo mismo: las fuerzas Insurgentes ‘deben’ contar con estructuras de ‘contra inteligencia’ y medidas de compartimentación y seguridad que contrarreste los intentos de infiltración inevitable.

Las Inteligencia infiltra no para destrozar (no de inmediato) la orgánica del enemigo, sino para recoger información, para lograr instalar cuadros propios en puestos estratégicos, ojalá a nivel de dirección, y usar a esta orgánica insurgente para políticas propias y secretas diseñadas por altos mandos.  

Queda en evidencia que la red de ‘topos’ ha logrado buen estado de influencia cuando ciertas operaciones militares escapan de la lógica política: por ejemplo, cuando en lugar de atacar ganglios estratégicos del enemigo se comprueban actos que rayan en el terrorismo y afectan a población inocente, incluso a posibles simpatizantes de su causa; cuando las acciones denota carencia o desprecio por una política de alianza, y se afecta incluso a la propia gente si no hay acuerdo con sus políticas y procedimientos. Y si revisamos las acciones de la insurgencia en la zona en conflicto, podemos verificar que: o estamos ante un radicalismo al estilo ‘sendero luminoso’, o las organizaciones responden a infiltraciones que derivan en actos de carácter terrorista al afectar a población no combatiente. Como sea: no es una guerrilla que denote una línea política coherente que bien pueda hacer distinguir al enemigo al cual combaten. Y eso puede deberse a ‘infantilismo político’ o a ‘radicalismo ortodoxo’ o a ‘infiltración con planes propios que direccionan desde adentro’.

Si el arresto, tan ‘extrañamente conveniente’, del dirigente Héctor Llaitul, es una operación de inteligencia debidamente planificada en su fin político, – y no para desbaratar a la insurgencia, sino para provocar ‘un hecho político’ en tiempos de plebiscito constitucional-: es, o no, un hecho independiente de la Inteligencia del Estado o de algún órgano de éste, o es una acción concertada con el mismo dirigente mapuche: no lo podemos saber, no al menos por ahora. Lo cierto es que al analizar las circunstancias ‘tan convenientes y casi concertadas’ de su encarcelamiento temporal, bien podemos dudar, y sospechar que podría haber aquí una acción política concertada para afectar y influenciar los resultados del plebiscito constitucional

¿A quién importa que la insurgencia se mantenga, actúe y no merme su presencia? No a la mayoría de los pueblos originarios que participaron en el proceso constituyente y eligieron a sus representantes. No a las comunidades que han acudido a los parlamentos a los que el Estado les ha convocado. No a las comunidades que se organizan para producir en términos actuales y asegurar un sustento sin cortapisas ideológicas. Sin duda conviene a quienes propician la salida militar del conflicto, la militarización acérrima, el aplastamiento por la fuerza y el sometimiento prolongado para usurpar de esas tierras mediante grandes conglomerados e intereses privados. Para ellos es fundamental que exista incertidumbre, violencia y guerrilla: porque eso permitirá dar el golpe final a toda aspiración, y justificar otra ‘pacificación de la Araucanía’ que garantice otros cien años de abuso, expoliación y vasallaje.

Debemos saber distinguir: no toda propuesta armada que se rehace a ideas ya consabidas de revoluciones pasadas o ideología asentada en su nomenclatura insurrecta…es de verdad ‘revolucionaria’. Ni el uso de armas y de formas de guerrilla son exclusivas de los revolucionarios, también lo son de grupos para militares, de la sedición fascista, del narco trafico y del crimen organizado. Nunca las armas ha sido el sello que define a un revolucionario. Y eso está demostrado incluso en la realidad que hoy todos podemos ver y verificar.

Además, para las miradas expertas: la estructura y forma de acción de esta insurgencia Mapuche asemeja más a una montonera, y eso nunca será manera alguna de ‘organización revolucionaria’.

La democracia no debiera perderse: debe abrirse al pueblo Mapuche y su plena integración desde su autonomía y su identidad, en el contexto de una democracia participativa, plural y moderna. Y es deber del gobierno democrático revisar con severa profundidad el accionar y organización de la Inteligencia que actúa por separado y sin control ni centralización, y darse, por fin, una Inteligencia única bajo control político y operativo de las Instituciones del Estado y del Gobierno bajo conceptos de democracia moderna y en progreso.  

Por esto: permítanme dudar seriamente del carácter revolucionario y de la política de ‘liberación’ de los grupos insurgente en la Araucanía. Y mucho huele a ‘red de topos’ actuando desde el desorden armado.  Es una duda más que razonable… al menos, ‘hasta prueba contraria’.

Nación, lucha armada y democracia

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Terrorismo: ¿Cuándo sí…cuándo no?

El lenguaje político de tipo coloquial ha desdibujado muchos contenidos que al convertirse en uso común de la expresión ya dejan de tener el sentido original que el estricto apego a la palabra concede, y nunca debieran dejar de tener a su base.

El Terrorismo, en estricto, es la forma violenta y discriminada mirante a causar terror en la población, perjudicando gravemente a personas inocentes y/o ajenas al conflicto entre las partes.

Incluso en una guerra convencional, los ejércitos que practican el terror entre la población civil, y usan como rehenes a seres humanos no combatientes para someter a su enemigo, cometen ‘crímenes de guerra’ o tales actos son claramente de carácter ‘terrorista’.

En una guerra convencional, o en una guerra de liberación, o en una guerra irregular (guerrillas) los objetivos considerados ‘legítimos’ (aunque suene extraña esta palabra) atañen a la infraestructura logística y apertrechamiento, líneas de abastecimiento, centros de poder político, cuarteles y lugares de desplazamiento del enemigo, o Frente o Línea de guerra o de combate, etc. Pero nunca es aceptable que los ataques a la población sea un acto planificado y se use cuan estrategia de guerra. Puede haber lo que se mal se conoce como ‘daños colaterales’, es decir: muerte y daños a civiles NO por voluntad ni planificación sino por efecto no deseado al fragor de los combates o de una acción.

Todo acto que masifica la guerra incluyendo muerte y masacres de civiles y ataques a objetivos ciudadanos, es terror usado como herramienta política en medio de una conflagración.

El Terrorismo de Estado es cuando desde el Estado y pleno control del gobierno se establece una política de exterminio y persecución sistemática de opositores, incluso pacíficos y no combatientes, y se mantienen a la población bajo restricciones y muestras de poder cuyo propósito es causar terror y zozobra entre la gente, con el fin de someterlas y evitar oposición a la tiranía.

La Lucha Armada de carácter insurreccional (guerra irregular) se mide por: ocupación extranjera (guerra de liberación); tiranía o dictadura (Rebelión); ruptura de la unidad nacional (guerra civil). Los combatientes en tales condiciones no son terroristas. Lo serían si aplican el terror indiscriminado y cometen crímenes de guerra que afecten a civiles y a población indefensa.

La Lucha Armada fuera de estos contextos y existiendo un sistema de Derechos y de Democracia, es un modo de terrorismo. Y si además los armados agredieran a población civil, y atacaran a sectores de la población no armada y fuese su plan causar terror generalizado en su zona de combate: eso es terrorismos a secas.

Eso es, sumariamente, lo que el Derecho Internacional y la Academia, consideran ‘Terrorismo’.

En Chile: ¿presos políticos o presos de conciencia?

Indagando por los pasajes de la jurisprudencia, de postulados de la ONU, de Amnistía Internacional y semejantes, concluimos que aquello que primero define la existencia de ‘presos políticos’ y ‘presos de conciencia’ es el tipo de gobierno o régimen que impera en el país. Si es una dictadura o si es un Estado de Derecho. 

Bajo dictadura, los tribunales no son independientes del poder político, y las restricciones a la libertad y la carencia de información libre determinan que cualquier persona sea acusada de delitos reales o ficticios, pero siempre movidos por causas políticas, siendo la razón de su encarcelamiento, -muchas veces sin procesos regulares o bajo leyes marciales, – la idea política de la víctima.

En democracia el sistema judicial posee resortes variados de comprobación de los hechos, exigencia de pruebas, apelaciones y recursos de amparos; los casos son públicos y sus causas pueden ser expuestas y debatidas por los medios de comunicación. También las democracias modernas han asumido el ‘derecho internacional’ y adherido a Tratados que los obligan a dar cumplimiento a estándar de Derechos más allá de la justicia local o nacional.

Amnistía Internacional califica de ‘presos de conciencia’ a los casos en donde la persona NO ejerce violencia, y por su pensamiento crítico y opuesto al sistema o gobierno, expuesto por vías no armadas, es perseguido, encarcelado y privado de libertad.

Bajo tiranías y regímenes absolutistas, tanto quién es perseguido y encarcelado por sus ideas aun no ejerciendo violencia, así como los combatientes que se enfrentan por vías violentas a la dictadura, SON presos políticos.

En Democracia el uso de la violencia y de las formas armadas como expresión política es una contradicción de fondo que, de una parte, entiende que la democracia NO es tal y también es un modo de dictadura; y, por otro lado muy diferente, se asume que el sistema SÍ es democrático y que los Derechos están garantizados, y por lo mismo la violencia y la lucha armada es potencialmente antidemocrática y propiciadora de un régimen totalitario o de características contrarias a la democracia.

Los abusos y distorsiones en el Estado de Derecho y en la aplicación de justicia denigran y rebajan la calidad de la democracia. La injusticia en la aplicación de Justicia es un mal que carcome los cimientos del Derecho. Las democracias se hacen imperfectas y frágiles cuando fallan en su sistema de Justicia y perforan la integridad de los Derechos. Para corregir estos males, la democracia posee organizaciones políticas y sociales desarrolladas libremente que pueden oponerse a tales dislocaciones, denunciarlas, proponer correcciones; y se legitima el derecho a la protesta, a la libre expresión, a la movilización social, al debate público, a la solicitud directa por cambios ante las autoridades pertinentes, a la denuncia, a la investigación periodística, incluso a la desobediencia civil o la objeción de conciencia.

Cuando la Justicia y los Derechos en una democracia son mermados y favorecen abusos y despropósitos ‘legales’, y sobre esta desviación se encarcela o se abusa de la prisión por causas políticas: entonces surge la duda genuina de si los presos bajo estos graves baches sean o no ‘presos políticos’. Por lo mismo, aquello que define si hay o no ‘presos políticos’ y ‘presos de conciencia’ es la calidad de la democracia, o la ausencia de ésta.

Para empujar a ‘mayor y mejor democracia’ y provocar los Cambios que refuercen sociedades libres, es un antagonismo demencial proponer el quiebre de la misma democracia mediante la violencia. Al igual que, para que un pueblo originario logre sus legítimas aspiraciones, en el contexto de una nación democrática, éste debe promover sus Derechos en base a la integración y a la pluralidad nacional, y no según planes divisionistas y separatistas que, en definitiva, quiebran toda posibilidad de solución pacífica y parlamentada.

Finalmente: no es la condición de ‘político’ del infractor, o los delitos movidos por razones políticas, lo que determinan la calidad del preso, sino el sistema político que lo enjuicia: si es una democracia con Estado de Derecho evidente, o si es un régimen político autoritario y carente de Derechos.

Hasta aquí lo investigado. Según esto, en Chile: ¿Hay presos políticos? ¿Hay presos de conciencia?

La Guerra y la Información:

Es cierto: informarse haciendo ‘el esfuerzo’, de googlear, de navegar por YouTube o salir en búsqueda de todas las campanadas al viento que entreguen OBJETIVIDAD de un hecho, de los hechos que nos circundan en este pequeño planeta, como la guerra Ruso -Ucraniana, por ejemplo, conlleva ‘un empeño’, una ‘voluntad’ para NO ser engañados, y una disponibilidad para tener una mirada real y lo más cercana a la verdad posible. Porque sabemos que ya la información está parcializada y bien manejada, y que si nos quedamos con lo poco que leemos y aquello que nos entrega la televisión y sus paupérrimos noticiarios, seguramente y de todos modos nunca estaremos en grado de emitir un juicio asentado y bien documentado, y seremos parte del ‘efecto rebaño’ que absorbe  una mentira tras otra, que a la larga es la construcción de nuestra realidad, y sobre tal ‘realidad’ tomamos nuestras decisiones de vida y fomentamos ideas sociales y colectivas que al final son una gran quimera.

Toda guerra, grande o pequeña, es nefasta y demostración de la incapacidad política de los gobernantes y de la mentalidad cavernaria que nos rige en esta prehistoria. Y en toda guerra se miente, y mucho. Se llama ‘Contra-Información’. ‘Mentir, mentir…que algo queda’. Y se construyen relatos falaces, fabricados, para crear condiciones que justifiquen mayor nivel de confrontación.

Nunca una guerra ‘comienza de repente’ o porque un ‘tirano se volvió más loco’. Toda guerra posee antecedentes políticos y diplomáticos, económicos y de lucha de poderes previas, y de asuntos geopolíticos en cuestión, que van dando contexto al punto de la guerra con demostraciones militares, ejercicios de fuerzas, y hasta conflagraciones locales o ‘guerra limitada’, además de la guerra de la Información y de la Contra Información. Y ahora, en este tiempo, con batallas poco conocidos en el espacio cibernético.

La actual guerra en Ucrania comienza el año 2014 con los Hechos de Maidana y de la zona del Donbás. Puntos para ir a investigar. Prosigue con anexión de Crimea. Previo al año 2014 hubo otros antecedentes preparatorios: la ruptura del Acuerdo sobre ojivas nucleares entre EEUUU y Rusia; las negociaciones sobre la expansión militar de la OTAN en países limítrofes con Rusia; la crisis política y de gobierno en Ucrania y su calificación como el país más corrupto de Europa del Este. Intervención directa y manifiesta de los EEUU en la política de este país, en donde el mismo Biden, entonces vicepresidente de Obama, interviene para sacar al fiscal nacional de ese país, a cambio de un préstamo en miles de dólares. Denuncia de Rusia en la ONU sobre estructuras neo nazistas en guerra de la zona del Donbás. Claras posturas del autócrata Putin sobre la legitimidad de Rusia sobre Ucrania por razones históricas y prevalencia Rusófila en un territorio que considera parte de Rusia desde antes de los zares. Protesta de Rusia por presencia norteamericana en ejército ucraniano. Europa abre negocios con Rusia, principalmente de energía y gas. Rusia entra fuerte en sistema bancario y financiero europeo.

Solamente estos datos en forma sumaria ya nos dan un contexto de una guerra anunciada, y que esconde planes de dominio más allá de Ucrania. Europa, al igual que las dos grandes guerras mundiales, está el centro del conflicto, y la confrontación entre potencias de carácter expansionista: Rusia y los EEUU se vuelen a manifestar con la guerra y las amenazas como ya hicieran en los años que creíamos perdidos en el recuerdo: entre los EEUU y la Unión Soviética.

Guerras nunca han dejado espacio para la paz real: desde la intervención de la OTAN en el desmembramiento sangriento de la ex Yugoslavia, Irak. Yemen, Conflicto Palestina Israelí, Siria, Califato de ISIS, Afganistán, Intervención en Somalia… siempre bajo las sobras de los imperios acechando por sus presas: EEUU, Rusia, China… la primera potencia aleteando para no desaparecer ni perder vigencia; la segunda para recuperar el viejo suelo de la ‘Madre Rusia’ imperial, y la tercera bien solapada y con nuevas formas, sutiles y menos escandalosas, que igualmente conllevan a que Europa le sirva de algún modo, y el resto del planeta sea su tierra privada para beneficio de su reinado.

¿Podemos no estar informados? ¿Podemos quedarnos con el drama montado por los directores de la pantomima de la guerra? ¿Podemos desechar la OBLIGADA VISIÓN HISTORICA y no considerar los HECHOS en su desarrollo OBJETIVO? Porque la mejor defensa de los pueblos y de los comunes que no somos parte de los imperios y si somos tierra de siembra apetecible para los señores de la guerra, es LA INFORMACIÓN, y sostener nuestra independencia desde la verdad de los hechos y no según el tiraje de los hilos de las marionetas. Y para aquello debemos ‘trabajar’ en la ‘búsqueda’ de las fuentes de información que nos den una amplitud de criterio y abundancia de HECHOS que finalmente nos liberan de la ignorancia y evita que seamos parte del circo manejado por los ‘señores de la información’. Y ¡claro! el sistema va restringiendo las matrices de comunicación: en Rusia cierran Instagram, en Chile ya cerraron RT Televisión por YouTube… porque mientras menos acceso a la información tenga un pueblo…más fácil es someterlo y manipularlo. La Información y ‘luchar’ por ser una persona con bases de HECHOS demostrables: es un desafío de inteligencia y de futuro que debemos integrar a nuestro modo de vivir en este mundo en Tribulación y Cambios.

La GUERRA

• La historia del Hombre, desde que los Cainitas mataban a sus hermanos Abelitas, está sembrada de guerras, grandes y pequeñas; y hasta en el Antiguo Testamento constatamos que la confrontación define incluso el destino y el dominio, o la prevalencia o menos, de determinadas religiones. Guerras justas, guerras santas, guerras religiosas, guerras de liberación, guerras de invasión, guerras imperialistas, guerras civiles, guerras de guerrillas, insurrecciones y golpes violentos, etc. Siempre la guerra: en donde la joven soldadesca muere y los viejos poderes hacen sus movidas políticas a costa de sangre inocente. Nada nuevo hay en las guerras: casi por impulso ciego de una obsesión de exterminio los dueños del mundo empujan a la hecatombe nuclear como ‘solución’ que eliminaría toda guerra… la madre de todas las batallas… que – se proclama con demencia- terminará con toda guerra. Nada más falso: porque aún en la auto destrucción y después del exterminio, si el Hombre NO CAMBIA desde adentro, seguramente seguirá peleando- como dijese Einstein- con palos y piedras. La Paz no es un asunto de No Guerra o de tregua entre conflagraciones, sino de siquiera concebir un solo acto de violencia. Cuando eso sea algo natural en el Hombre, entonces nadie podrá imaginar que una guerra sea signo de civilización e inteligencia. Cuando el Hombre cambie desde adentro, miraremos a esta prehistoria y no entenderemos cómo los Hombres de esta época podían ser tan necio, al punto de considerar a la guerra como ‘factor natural y hasta necesario’ para compensar equilibrios geopolíticos y económicos. Fue la Era en donde los Hombres estaban enfermos de ira y así fue como se destruyeron a sí mismos.

Réquiem para mi madre

Enredada en la madeja de seda, suave y fina de tu alma, pisaste tierra en años perdidos, cuando otra generación tan distante del hoy no concebía a niñas mirando al horizonte desde colinas ignotas que solo tú recorrías en tu juego solitario debajo de la higuera en el extenso patio de aquella casa de la calle Salesianos.

Pudiste entrar en la poesía y los versos habrían anidado en tus manos para volar con alas dulces. Y el arte pasaba por tus bordados irradiando primaveras. Y quisiste hijos e hijas retozando en tiempos de amor y de alegría.

El amor de un varón que irrumpiera en tu belleza y acompañara tu viaje no alcanzó a tus pasos ni se cruzó en tus sendas, y aún en la soledad que nunca sabré cuan honda fue, y en tu tristeza que de niño vi tantas veces, nunca hubo quebranto, y desde los abismos veía como alentabas hacia lo nuevo con tu gracia pululando de esperanzas.

Tu risa, madre amada, ¿quién pudo no gustar de tu humor perspicaz? Y siendo niño gustaba verte bailar, y algo en mi inocencia henchía de felicidad al verte jovial llenando los espacios con tu hermosa presencia.

Hubo un lapso en nuestras vidas, madre, en que nuestra amistad se hizo complicidad en amores: tú con tus dudas sobre el varón que abría sus puertas para hacerte compañera, y yo con mis tormentos ante la venida de un hijo que quebrantaba mí ya díscola primera juventud. Y tu consuelo sincero aquella noche cuando dos almas aun en seno materno, mis hijos, fueron tomadas por Dios para nunca nacer en este mundo. ¡Cuanto dolor, y tanto refugio en ti, madre mía!

Una mañana cayó abrupto un manto oscuro que nos cambió la ruta y abrió el exilio como escape ante la muerte y la barbarie; hasta lejanías antiguas llegaron mis pasos, y más tarde también fue refugio para mi hermano. ¿qué hubo entonces en tu alma inquieta? ¿Cuántas noches oraste hasta las madrugadas para que la pesadilla pasara? ¿Cuántos universos de incertidumbre vivió tu hija Margarita? ¿Cuántas luchas y vicisitudes se agolparon en tú hijo Antonio? ¿Cómo fue crecer desde el dolor tuyo y desde la bendecida incondicionalidad para tu hija Cecilia?  Nunca lo sabré.

Saberte en el mismo país que me cobijaba y tenerte en familia con tu hijo mayor y su esposa, siempre al lado de tu hija menor, y llevarte por Florencia, y mostrarte Venecia, y pasear por Roma, y que me abrazaras en Ginebra, fue nuestra buena y sana venganza ante lo burdo de la tiranía que pampeaba en mi país lejano.  Hoy lo pienso y lo siento: debí pasar más tiempo contigo, debimos hablar como lo hacíamos antes, pero eran tiempos de secretos que no podía compartir, y aquello que aparentaba como andariego sin rumbo, tenía un horizonte preciso que no podía exponer.

Un día, ya en el país de las torturas, lo aclaramos:  mi hermana Margarita, haciéndole creer que había regresado a Suiza, me ve en plena acción de resistencia a la dictadura. Fue un drama familiar que tú, madre, supiste administrar con suma sabiduría y sensatez.  Entonces, un domingo, en casa de tu hermano Antonio, el tío Toño que fue cercano a mí niñez, sinceré mi realidad: te conté donde andaba esos meses del año 80 en el que se suponía me había ido a trabajar a Suiza, y que entonces me preparaba para retornar al combate y debía hacer escuelas en la antigua Alemania Oriental. Que era miembro del Frente patriótico, que por años me había preparado y que entonces mi vida yacía sumergida en la acérrima clandestinidad.

Madre hermosa, tus ojos brillaban, tu tez pareció rejuvenecer, casi esperando me dijeras: ‘yo también voy contigo…’ y me llenaste de paz cuando expresas tomándome las manos lo orgullosa que te hacía tener a un hijo tan entregado por una causa justa. Y en días posteriores bordaste pañoletas con la sigla del Frente que yo entregué a una unidad de combatientes, y una me acompañó hasta que la perdí en la batalla de Lo Hermida, en septiembre del año 86.

Comprendo la dificultad para entender procesos humanos e interiores que suceden y sucumben en lo íntimo y oculto de cada persona. ¿Cuánta suscitación golpeó mi existencia? ¡Cuánta historia jamás compartida! Entonces te llevé hasta la montaña, y vino mi hermana Cecilia, y quise que vieras con tu sencillez y sabiduría el punto preciso de mi ruptura con el pasado y el inicio de mi nueva vida. Solo a ti conté los hechos previos que me llevaron a ese lugar. Hasta que un día, mientras adormecías a tu nieta Gabriela, quisiste leer la Biblia y te recostaste y abriste sus páginas; fue cuando la luz solar invadió tus ojos y viste a mi persona y tú me llamabas, y fue cuando la voz te dijo: ‘Mio Es… de los Míos Es…’ Y tú respondiste: ‘sí mi señor, yo te lo entrego para que se cumpla tu voluntad’. A esa misma hora y día, hallándome en oración en la montaña, también yo era tomado por este sol de paz y bendiciones.

Luego vino el tiempo de los Hombres, en donde lo humano se apodera de los caminos que son espirituales y debieran ser medidos por Dios y no por las reglas inventadas por las religiones: hubiese querido me aceptaras en mi fe, y que mi hermano, y que mis hermanas, hubiesen abierto sus mentes y corazones y simplemente oyeran lo que nunca pudieron saber, y menos pidieron que les compartiese; y cuanto de mi vida interior desconocen; y en lugar del buen proceder y la rectitud sobrevino el silencio, los juicios y las sanas distancias que nos protegieron de litigios inconducentes.

Siempre te amé madre. Y amándote como nunca dejé de sentirte, decidí abrir entre nosotros una silente pausa de amor para no herirte con mis opciones y mi vida.

Así envejecimos: ahora escucho testimonios de tu compasión y de tu sabiduría, ahora vengo a saber de tu amor por Tu Señor, y escuchando tus actos de santidad mi interior asienta porque así eras tú, y de poner por obra tu fe: no podía ser y hacer de otro modo, porque en ti vivía una sacerdote de Cristo. Y ahora que has entrado en los tres días de tu Resurrección verás la Verdad del Reino ante tus ojos, y ya no habrá paños que cubran la realidad, y sabrás medir con vara santa… diferente a la de esta tierra… al hijo, aparentemente distante, que nunca se apartó de tu alma y que siempre estuvo unida a tu espíritu.

Has sido mi madre en muchas vidas, y ahora, sin las castraciones ideológicas de los Hombres, comprobarás que desde Cristo todo fue hecho de nuevo, y que lo anterior a Cristo no es Ley de Vida y con Cristo la Vida y la muerte ya no son lo que fueron. Y entrarás a tu hogar y conocerás los secretos que la soberbia humana no permite que se expanda con su Gracia sobre la verdad de los Hombres.

Ahora, madre, tú comprobarás que la muerte no existe, sino el abandono del cuerpo temporal, y por ley de Cristo entras en Resurrección, y al decir del sabio apóstol Pablo: has pasado como por un velo y desde cuerpo carnal obtendrás ahora un Cuerpo Espiritual con la plena conciencia de tu obra y recogerás los frutos de tu siembra.

Madre, tengo entre mis brazos y en mi frente el amor que nos unió en nuestro encuentro. Oramos juntos y fue maravilloso. Nos perdonamos y entonces vi la misma mirada de antaño: diáfana, profunda: ‘Perdona a tu madre’…’ -dijiste con voz temblorosa y baja- ‘Perdona a este hijo loco que te ama tanto’ – dije yo. – ‘Lo sé…sé que me amas…lo sé…y lo otro también’. Porque Inés, nunca perdió ocasión para poner su humor incluso en su agonía. Porque fue una persona que no transó su derecho a la alegría a pesar de los pesares.

Después visité tu lecho junto a mi hijo, al que reconociste con una sonrisa de niña hermosa, e inundaste de amor a tu nieto con tu ser envuelto en regocijo. Y hablamos y reímos y nos mostramos fotos de los nietos y nieta, y salí pletórico de paz, esa última vez. A los días fue que llegó la noticia de tu gravedad: día aciago aquel, y hallándome solo fue el momento de mi tristeza y de mi llanto del alma. Así, donde nadie más que Dios me viera.

Esa noche la voz que siempre me habla dijo: ‘hoy antes de las 5 de la tarde recibirás la noticia de la partida de tu madre’. Acercándose la tarde, alrededor de las tres, entré a mi altar y oré, y medité, y al salir veo en mi teléfono llamadas perdidas de mi hermana Cecilia: alrededor de las 16 horas emprendiste tu ascenso al Cielo, madre amada.

Sin proponérmelo toda la tarde y noche pasaban imágenes de Inés ante mí…vívidas y claras: recuerdos de muy niño y hasta nuestros encuentros.

Madre amada, has vivido tu vida con fortaleza y saliste victoriosa. Nada dobló tu voluntad. Quizá tu existencia no fue la que hubieses soñado: pero eso nos pasa a todos. Mas, al reconocer la prueba que es la vida, aceptamos los errores, los dolores, los aciertos y la gracia recibida. Y ahora, Inés, tú ya estás por encima de aquello que los Hombres no podemos ver y entender estando en la Carne y en este mundo.

Adiós, madre amada. Adiós, Inés de la bondad. Adiós sacerdote de misericordia. Adiós mujer integra. Adiós alegría que venció. Adiós, madre antigua… Ahora, lejos de ojos de otros, me sumerjo en el dolor que inevitablemente deja tu partida.

Carta personal

Este 28 de enero cumplo, cierro lo ya vivido en 69 años de existencia. Clausurado ese tiempo de vida intensa, entro gradual a mis 70 años sobre este mundo.

Soy, he sido, un hombre común, porque todos lo somos, y justamente por aquello es que cada uno es un Ser Especial.

No hay dioses humanos, sino Espíritus que logran gobernar a personas: y cuando eso excepcional acontece es que comprobamos que podemos aspirar alcanzar altas mesetas de desarrollo de nuestro potencial.

Nunca busqué a Dios, tampoco asocié eventos interiores que ya venían conmigo con algo relacionado con lo divino, o religioso. Porque un niño no pondera realidades: sino que las vive. Y es cuando la relación social y familiar comienza a fijar comparaciones con otras realidades es que se declara la problemática que urge entender: qué es lo que sucede con uno, y cómo puede un neófito congeniar su verdad interior con el externo que exige comportamientos definidos según la edad.

Entonces eres ‘un niño o adolescente raro’, y para no parecerlo y ganar inclusión: se aprende a ser lo que lo foráneo pide. De este modo uno ensaya a moverse sobre dos rieles: uno que potencia al ego como forma de asentar ‘un yo social y colectivo’; y otro que se torna silencioso y abstraído intentando hallar razones de una realidad que no puede compartir y que parece que a nadie más ocurre.

Socialmente elegí a la política para canalizar mi inquietud ante la injusticia que lograba discernir, y la pobreza que vi en las escuelas públicas a las cuales asistí, en donde incluso llegaban niños descalzos: porque la pobreza de 1959, de 1960 y de esa década en la cual fui niño, era paupérrima y de una indigencia que me causaba un dolor que no comprendía.

1967-1968 voy por las calles de Santiago como un niño rebelde tirando piedras y gritando en las marchas estudiantiles. Milito y entro en el estudio de la política y de las ideologías desde ese bullado y convulsionado 1968: época de eventos sociales que definieron a los años venideros. La esperanza era el socialismo y surge la elección de Salvador Allende (1970): y allí me volqué con todo mi ímpetu juvenil. Sin embargo, cada tanto era asaltado por esa otra realidad interior que parecía llamar a lugares y estados que a ese punto comienzan a molestarme y ya las siento más como un problema que debo solucionar.

Y la respuesta vino del budismo. Como si cada escrito que leía hablara de mi estado interior. Por fin pude identificar con nombres y situaciones cada vivencia que surgía fuerte desde un rincón ignoto de mi secreto.

Luego vino la tortura, la muerte, y los muertos pululando a mi alrededor, y quedándose en mi memoria exiliada; y por años entro en un estado de ira que apagó toda manifestación interna…solo un sueño perdura: una gran roca como de piedra preciosa, fina y suave, en forma de huevo que desciende de un cielo oscuro cuan bóveda sin nada más que negrura, y lentamente se pone a mi disposición para que yo la abrace, advirtiendo su enormidad, pero a su vez sintiéndome pleno.

Entonces surge el I Ching, y su sabiduría reabre las puertas clausuradas por la violencia y el espanto infernal que hundió muchas vidas en el dolor irremediable y la venganza… también la mía.

Aun en la guerra de otros, a la cual asisto como corresponsal, así como la muerte de muchos que tuve que comunicar (conflictos Medio Oriente) y guerras en la que pude quedar (Líbano), mis voces internas no callaban: ¿por qué la guerra? ¿por qué tanta muerte y crímenes? ¿por qué las tiranías?

Ahora el sueño del socialismo yacía destrozado con mis estadías en la entonces Yugoslavia, y mis recorridos por Rumanía, por la entonces Checoeslovaquia, por Bulgaria y mis estadías como poeta invitado en Albania. Y aun si por meses fui alumno de una escuela especial en la Alemania del Este, no pude evitar comprobar que el socialismo ideal de nuestra juventud jamás existió en el socialismo real que ahora comprobaba en terreno.

Hasta que regresé de mi muy fructífero exilio, y ya en mi país, por casi cuatro años, luché en contra de la dictadura, pero también en contra de mis demonios. Ambos combates fueron a fondo: clandestinidad dura y organización armada, e interiormente cerrando por fin con aquello oscuro- en el sentido de desconocido- que por años pareció ocultarse de mi conciencia. Sin el I Ching en este trance, seguramente no lo habría logrado en ninguno de los dos planos extremos.

Segundo exilio, pero esta vez el viaje a la Verdad Interior sería irrevocable. Nuevamente el budismo me rescata de manera misteriosa (1990). Y después de meses recorriendo los vericuetos y laberintos que eran la tierra de mis misterios…regresé nuevamente a mi país (1991) para buscar una montaña con un varón que mantenía distancia de mí, pero me pedía encontrarlo a los pies de una colina.

32 años he dedicado al Camino Espiritual.  Quise mantener mis lazos con el Buda, pero él, en sueños, me señaló un camino que me llevó hasta el Encuentro con un Cristo Vivo, no en la cruz, sino una divinidad vigente y gobernante. Desde entonces soy leal en (con) la enseñanza del I Ching y he establecido una unidad de alto compromiso espiritual y concreto con Lo Cristico.

Sigo sin Religión: porque ni la Sabiduría de los Santos y Sabios (I Ching) ni la Relación con el Cristo real (y no con aquel que inventó el cristianismo para sus propósitos políticos y de ejercicio de poder profano) conformarán jamás religión alguna, precisamente porque Lo Espiritual es para superar a lo mundano, y en lo humano es para que el mismo sea gobernado por el Espíritu.

Porque Dios no habita en lugares indecibles, sino que una chispa, un átomo de su luz y verdad está en el Ser Humano, y ese es su Espíritu. No su Alma, no su Mente, mucho menos el sistema del Mundo y su exigencia falaz…sino El Espíritu.

Pero no ha sido fácil trabajar con los Hombres: los cientos de personas ‘en búsqueda’ o movidos por su fe que han recurrido a mí para compartirles mi senda… no como maestro sino como ‘uno común que está dispuesto a deferir lo especial de su andar…para que ‘también otros comunes logren recorrer lo especial de sí mismo’… colocan tantas condiciones y condicionantes que al final se pretende un adorno virtuoso que parezca ilustre pero nunca un desembarque en nuevos puertos de existencia.

 Y no ha sido simple porque no sé por cual motivo se postula al milagro, a lo fácil de un cambio que no exija empeño, compromiso, disciplina personal, auto observación y capacidad de transformación. Se esperan aspectos benéficos que caigan del Cielo. Se postula a cambios en la vida que no requieran esfuerzos y mucho menos la renuncia a los Paradigmas tan fatigosamente alzados para enfrentarse al Mundo y su sistema perverso. Lo comprendo como el combate de lo humano que debe adecuarse a su parte más insondable: lo Espiritual, a Su Espíritu. Y saber que ese Espíritu es parte de Dios: suele ser un terremoto que provoca efectos multilaterales y multifacéticos.

El Paradigma religioso ha construido a un Dios que no existe. Porque Dios no es un nombre propio sino la categorización de un fenómeno que no podemos identificar pero que percibimos o concebimos como Creador o Inicio de la Vida desde un reino de Luz.

Enseño y comparto dos Caminos, porque son las dos sendas que he recorrido: una es el Camino Medio, el cual proviene del Buda y de la Sabiduría de los Santos y Sabios ligados al I Ching, el cual apunta a que el Ser Humano ascienda por Logros que hace Consciente y los asume como a su nueva persona, hasta Lograr el ápice de su ‘mejor humanidad’: un Camino Medio entre lo Superior del Hombre y las Leyes de los dioses. Es decir: cuando el Hombre Logrado queda en grado y estado para sostener su hallazgo de lo divino y Macro. Y enseño y comparto el Camino Cristico: que comprende lo anterior, pero desde una relación con la divinidad ya asentada y definida: el Cristo; y esta senda exige de la persona su más alta honestidad y una rigurosa auto disciplina.

En ambos caminos (que para mí son UNO) he hallado una primera efervescencia y entusiasmo por iniciar, pero aún no encuentro ese fervor y vigor para terminar. ¿Por qué la inconstancia? ¿Por qué siempre se llega a la negociación de lo humano y mundano para que lo espiritual se pliegue a sus necesidades?

Seguiré insistiendo: porque ya nada más importante y vital queda por hacer. El Mundo no cambiará si el Hombre no se Transforma desde su Interior, y emprende: o el Camino de la Bondad (Camino Medio), (Compasión, Misericordia y Virtudes) o el Camino del Retorno a su divinidad (Espiritualidad plena guiada por un Dios Vivo que integra al Ser Humano a un Plan que es develado para que también los Hombres hagan parte de un Reino que No es de este mundo).

He tratado de ser fiel a la Verdad Interior que de hace 32 años es mi práctica y forma de vida. No siempre se logra, pero he combatido por no caer. Porque eso soy: un combatiente espiritual que no soltará al Cristo Dios hasta que éste me conduzca de regreso a mi patria.

Respuesta desde la Fe

Recibo preguntas y algunos cuestionamientos, y también dudas, relacionadas con el articulo “Virus, Vacunas, Sospechas y Libertad’

¿Está a favor o en contra de la vacuna? ¿Cree o no en que el virus sea real? ¿qué sabe de los elementos manipulados que inoculan datos de ADN en las personas con fines oscuros?

Justamente sobre este tipo de asuntos es que en dicho escrito se expresa la inutilidad y engaño de esta diatriba: porque si el Hombre estuviese en un mundo de Bien y su opción de Luz fuese la marca de su acción…y bajo mantos tenebrosos surgiese un complot pandémico nunca antes visto y desconocido por los seres humanos, y de Seres libres pasáramos a esclavos… entonces sí debiéramos alertarnos ante una arremetida en contra de nuestros altos logros de Buenos Seres.

Sin embargo, los datos duros, las fuentes históricas y la pura realidad nos dice otra cosa: (y es ese el punto central del artículo en tema), a saber: que el sistema Cainita, ya en tiempos lejanos, ha impuesto, desde que tenemos conciencia de humanidad, un modo social y religioso destinado a la división, al señorío, a los privilegios y a la miseria y a la esclavitud de la gran mayoría. También- lo dice la columna citada- hubo y hay seres de Bien que optaron por alzar proyectos civilizatorios supremos y justos; y que en la edad moderna hubo quienes quisieron imponer la justicia en contra de la barbarie, y muchas veces estos libertadores se hicieron tan déspotas como sus derrotados antecesores.

Sabemos que convivimos con millares de virus y que somos carnalmente: ‘seres bacterianos’ y debemos sobrevivir con esta condición terrena.

 También hablamos de que los potentados amantes del dinero sin límites ya en pasado experimentaron con enfermedades y vacunas para impulsar ingentes ganancias. También asumimos que los virus, como el resfriado que mató a nuestros aborígenes, puede transformarse en un arma pandémica en manos siniestras, y como contraparte aumentar ingresos con vacunas creadas de acuerdo con una ley del mercado: ‘crear la necesidad para vender un producto’.

Lo que los abanderados antivacunas agitan parece desconocer la existencia de los virus, y que un virus: ¡Mata! Tampoco entran en mérito de cómo la inteligencia humana puede liberarse y sanarse de bacterias y virus en un mundo que, además, ha sido dañado y envenenado por el mismo Hombre y sus industrias en su afán de lucro y profito. Y como ellos y ellas parten de la idea de que ‘somos libres’ o ‘estábamos a punto de saltar cuánticamente…’ o esta vacuna en particular es la señal del anticristo que por inoculación introduce un código luciferino en los Hombres Buenos y Luminosos que tanto bien hacen a este planeta… es evidente entonces que este complot aparezca ante su visión subjetiva con toda su virulencia y maldad.  Y esa realidad, que se traduce en una lucha por ‘nuestra libertad’, es lo que comparo en el escrito con la creencia del antiguo esclavo que pensaba que con zafarse de las cadenas ya sería libre. Es decir: hay aquí una visión muy parcial y relativa de la realidad humana y de la historia del Hombre; y no hay en los religiosos antivacunas un ápice de argumentación superior que contradiga a la ciencia del mercado.

Porque la Libertad, enredada en un entramado de contubernios y manejos turbios mundiales, – (y por eso parto de situaciones que están aconteciendo en el planeta y que muchas veces obviamos o no indagamos por flojera intelectual) – sigue siendo una aspiración humana que no encuentra respuestas plenas en la política o en la religión: porque tanto una como la otra son parte del sistema mundano y no aportan liberación, sino que dependencias y efecto placebo: el cual nunca lleva a la respuesta clave de:  ‘hacer y ser lo que el Padre Creador ha designado y poner por Obra de vida esa voluntad que yace escrita en el Espíritu de cada Ser Humano’.

Vuelvo a preguntar: ¿qué necesidad tiene el poderoso, señor de este sistema profano, de inventar pandemias y vacunas en un mundo que YA está en sus redes? ¿Acaso ya no estamos controlados por los celulares y los sistemas computacionales de alta tecnología? ¿Acaso no somos ya esclavos del consumismo? ¿Desde cuándo nos están matando con plástico y químicos? ¿Acaso no se ha destruido el planeta desde la revolución industrial? ¿No es la riqueza y el dinero el Señor de este Mundo? El dios de este Mundo es el Mercado. Y los seres humanos nacemos marcados por las condiciones del dios de este mundo. 

Entonces ¿de qué´ libertad nos hablan los valientes cruzados de las antivacunas?

En la parte final del citado artículo podrá leer mi propuesta y mi convicción: la Espiritualidad, la Fe y su acción de coherencia, las Virtudes hecha persona: son la senda que conduce al Hombre a una mirada de alturas que le permiten no caer en trampas y falaz libertad.

 La vía que Cristo nos abre a quiénes postulamos a la libertad real y definitiva (y no la cristiandad institucional o los poderes eclesiásticos) es lo que nos permite distinguir claramente el tipo de esclavitud que vivimos, y los juegos de dominio que los señores de este mundo entretejen engañándonos y confundiéndonos… (pero que aun estando bajo un sistema Cainita perverso y malévolo, es posible sembrar luz en medio de las tinieblas) …

Por lo mismo, la Libertad no está en los modos y aspectos del Mundo (eso puede ser un efecto, una consecuencia) sino que brota y se fomenta desde Lo Espiritual, desde la Fe y la Coherencia que hace nacer de nuevo a una persona que ‘está en el mundo’ pero que ‘ya no pertenece a este sistema del Mundo’.

Y si ya estamos en el Camino del Espíritu, de la Fe y de la divinidad que nos enseña el Cristo Vivo, y si ya hemos entrado en el orden de La Sabiduría y el Buen Discernimiento, y si ya buscamos Ser nosotros mismos La Virtud que nos haga libre: ¿acaso no podemos orar antes de recibir la vacuna? Porque al orar con Fe anularemos todo vestigio que nos sea ajeno y decretaremos que tal inoculación sea lo que por convicción y fe nosotros determinamos.  ¿No es eso posible? ¿Por qué las iglesias cristianas en cruzada antivacunas no acuden al Poder del Espíritu y de la Fe que todo lo puede revertir y transformar? ¡Como si Cristo fuese solo un elemento para las escuelas dominicales!

Por último, ¡claro! que no descarto manejos mañosos y de control usando la pandemia, o inventándola, pero el punto es que este tipo de juegos y manipulaciones SIEMPRE han sido el modo de los Señores de este Mundo para nunca permitir la liberación verdadera del Ser Humano: y como el Espíritu, la Fe y la Sabiduría son herramientas poderosas que sí pueden botar al sistema y hacerlo caer…entonces han inventado y han usado a la religión para que administre la creencia de las personas en modo que nunca encuentren las puertas que Dios mantiene abierta para que el Hombre sea el Ser Libre que trascienda más allá de este mundo, pasajero y temporal.  

Y nunca he dicho que en este mundo no hay que luchar por Justicia, Paz y Bienestar. Sino que digo: ¡luchemos por Lo Eterno, porque ahí encontraremos la libertad verdadera!

 Luchar por lo temporal y mundano como si en tales propósitos halláramos la suprema iluminación o la máxima paz, hallándonos en el vientre de la bestia: ¿qué sentido tiene? Pero luchar por la Justicia y la Paz en este mundo DESDE la Vida y el Camino Espiritual y en Coherencia de Fe:  es un efecto loable que proviene de una Causa Santa: sino ¿Para qué vino Cristo en Jesús?

Virus, vacunas, sospechas y libertad

Hay quienes protestan por la dictadura de la pandemia, cuyo argumento se basa en que la clase política mundial aprovecha de una circunstancia viral para someter a los pueblos y así eliminar la ola de protestas y descontentos que parecía venirse encima de los sistemas como un maremoto que se avisa en el horizonte.

Otros aducen que el virus mismo ya es creación de estos, que luego controlan y restringen.

Y el corolario de este malévolo plan mundial son las vacunas: ganancias exorbitantes para las mismas grandes empresas que ya en pasado experimentaron con niños y población en centro américa en los años 50 del siglo pasado, o usaron a pueblos africanos como conejillos de indias para sus ensayos.

En Europa se denuncia un ‘Plan de Germanización’ que postula a superar la Comunidad Europea y transformar al continente en un país único bajo un gobierno cuyo centro esté francamente dirigido, o bien influenciado, por Alemania.

El señor Putin, en sus discursos, (poco y nada conocidos por el mundo, pero repetidos e insistentes en sus contenidos)- los que se pueden rastrear buscando medios rusos- ha denunciado en todos los modos y formas de un Plan dual que atenaza al Mundo: la pinza de China, y la pinza de Europa bajo la hegemonía de Alemania con complicidad francesa. De frente a aquello: Rusia – alega el ególatra Putin- debe esforzarse por recuperar su rol imperial o al menos de ‘país fuerza’ con el cual los planes hegemónicos deberán hacer cuentas. (Y no descarta que esto de los virus que afectan principalmente a Europa sea parte de la estrategia de China).

¿Teorías conspirativas?

La mayor demostración de rebelión resulta ser hoy…no vacunarse. Y como el Virus, introducido o natural es igual de mortal: la gente muere, y antes sufre lo indecible a causa de un virus tan real como mortífero.

Los amigos de la Nueva Era denuncian que este virus y su secuela es un Plan para evitar el Salto Cuántico que estuvo a punto de conducirnos a una Era Superior en donde ellos, los dueños del pantano ya no tendrían poder alguno.   Pero que igual ese salto está sucediendo, mermado y menos alto en su impulso, pero aconteciendo de igual manera.

Una serena observación de la Historia del Hombre, desde los antiguos imperios, hasta lo más reciente y cercano, nos lleva a una realidad que no varía en mucho de la actual: la diferencia reside en que nunca hubo internet en pasado ni las comunicaciones que la tecnología favorecen hoy jamás existieron. Hoy ‘todos pueden ver’ ‘todos pueden oír’ ‘todos pueden informarse y saber’. Y como siempre es el Ser Humano el que discierne y define la interpretación de la realidad: o se acepta la verdad tal como los hechos decretan en su objetividad, o la verdad será relativa y especulativa, en concordancia con la interpretación o intencionalidad de quienes la exponen.

Desde siempre hubo un Plan humano para ejercer poder sobre la masa esclava: es lo que conocemos como Sistema Cainita. Puede ser que este empecinamiento por ejercer de dioses sobre la propia gente, e imponer por la fuerza los designios del ‘pueblo elegido’ a foráneos y gente diversa, provenga de una etapa ya borrada de nuestra memoria, en donde semidioses ya extinguidos -o que simplemente dominaron hasta agotar un tramo de nuestra existencia humana-, implementaron e implantaron en castas escogidas el designio dominante que construyese un mundo de esclavos y señores, en donde las riquezas materiales serían señal de poderío y supuesta eternidad. O bien, este cuatrerismo y necesidad de dominio y esclavitud venga en el ADN de un Ser en evolución que en lugar de superar a la bestia que le habita más bien la ha guarecido en el interior más oscuro de sus abismos.

O tal vez la combinación de ambos factores se unen para producir el tipo de Mundo que hoy padecimos. Pero…pero también esa visión macro nos arroja la presencia de seres humanos sabios y civilizaciones pujantes que no usaron los medios de la guerra para alzar realidades que hoy, con toda la tecnología a nuestro haber, igual nos sorprenden. Quizás también hubo semidioses buenos que dejaron otras herencias. Tal vez la evolución del Ser Humano también desarrolla un ADN superior que proviene de la luz interior cuyo propósito es elevar al ‘Hombre común’ hacia la altura del ‘Hombre Superior’

¿Dos planes actuando al unísono y en contraposición en el Ser Humano? ¿Será sólo un asunto entre Seres Humanos? ¿No será que fuerzas invisibles, pero tan y más reales de lo que vemos y tocamos, están jugando su experimento con nosotros? ¿Por qué el Hombre, como criatura en este mundo, es tan diferente y ajena al ambiente y desarrollo de este planeta? ¿Por qué cuando el Hombre armoniza su desarrollo y vivencia con las leyes naturales se eleva a calidad superior? ¿Por qué cuando actúa cuan peste y plaga destructiva se aniquila a sí mismo y destruye su entorno?

Desde que el Ser Humano está deambulando sobre este globo suspendido en el espacio y girando en torno al sol (poco tiempo en comparación a la vida del planeta y de la existencia de otras especies) ha tenido que luchar por una dura sobrevivencia: porque nada en éste está preparado para moverse con naturalidad en un mundo del cual no es original.  Y pudiendo ser agente de armonía y de empuje concordante con las leyes naturales…optó, en su mayoría, por proceder cuan agente de destrucción del entorno en aras de su propia satisfacción y ficticio bienestar. Estamos nosotros, los Seres Humanos actuales, ¿al margen de esta opción?

La clave de este problema de vida está en nuestra capacidad para DISCERNIR. Pero si en lugar de observar nuestra historia, indagar al Humano en su connotación permanente, y definir grados  de Bien y de Mal en base a la REALIDAD NATURAL que nos cobija en este planeta…nos perdemos en la coyuntura, en el hoy que nos interesa desde lo subjetivo o desde el centro del propio ombligo: entonces pasamos a formar parte de esa masa ignorante que alega estar perdiendo libertades que nunca tuvo, y que le están cambiando un mundo que jamás fue, y que hay planes recientes para esclavizarles en circunstancia que siempre hemos sido esclavos de un sistema Cainita impuesto desde hace siglos. Y enarbolan la libertad de No Vacunarse como la bandera más sensata en medio de un contubernio mundial para aplacar una libertad que siempre fue manipulada y administradas por el Poder de turno.

Puede ser que los potentados del Gobierno Mundial y sus empresas prevalentes hayan liberado virus para luego crear vacunas tramposas que marcan con la señal de la Bestia a los buenos seres humanos… hasta aquí libres y saltando cuánticamente sin restricciones. O pudiera ser que en verdad desde siempre los seres humanos hemos sufrido de ataques bacteriológicos y virales por parte de otros seres (humano o extraterrenos) que nos quieren enfermos, débiles y sometidos… porque nos temen.  O seguramente asistimos al mismo criterio que llevó a Nerón a quemar Roma para culpar a los cristianos, o al envenenamiento del agua para hacer sucumbir a pueblos enemigos, o el gas sarín y de ántrax en la primera guerra mundial, o el aislamiento y control a modo de ‘gran hermano’ que han intentado todos los regímenes tiránicos conocidos desde tiempos pretéritos, o simplemente seguimos en la lógica criminal de ‘crear la necesidad para comercializar un producto’, que es la base del comercio y del mercado desde la primera superación del trueque.

Tal vez sea cierto lo que Cristo advierte: ‘no se puede pertenecer a dos reinos: el de Dios y el del dinero’. Y si Cristo califica al dinero como a un ‘reino’ y en su calidad lo coloca como un opuesto y contrario a Dios: quizás, entonces, haya en el dinero, las riquezas desmesuradas, el dominio de los mercaderes y el reino del mercado…una clave para distinguir las causas de la situación actual en el mundo. Es decir: que seguimos, como antes y como siempre, bajo una constante dictadura de señoríos y potentados que nunca han perdido el Poder sobre el resto de los hombres y mujeres simples que pasamos por este mundo. ¿A quiénes sirven esos señores y potentados terrenales? ¿A qué fuerza espiritual pertenecen y son parte? ¿O simplemente son ‘malos Hombres’ que pudieran ser desechados o transformados? ¿Por qué nunca han sido derrotados, e incluso los nuevos Hombres que han luchado en su contra, una vez en el poder se han convertido en los perversos de siempre?

Si ya somos esclavos en un sistema Cainita en donde hasta las religiones sirven a propósitos de Poder Mundano: ¿para qué soltar un virus y luego hacerse más ricos aun con sus vacunas? ¿Qué libertad defendemos con negarnos a la vacuna y morir por consecuencia del virus? Es como si los esclavos africanos ya encadenados en barcos hacia Europa o América hubiesen sentido que su libertad residiría en no usar esas cadenas, y que su lucha hubiese sido simplemente ‘ no ser encadenados’. La esclavitud es más que las cadenas…y es más que un virus y sus vacunas.

Entonces argumentamos que ‘estábamos a punto de saltar a cielos cuánticos inimaginables’ y…nos cortaron las alas con un virus mutante y un complejo de químicos inyectables.

Desde el Camino de Sabiduría Cristica tenemos una Visión Histórica y Objetiva del Ser Humano, y entendemos que aquello que está en juego en el Hombre no es aquello temporal que pasa y muere, sino que la clave está en lo contrario: en lo atemporal y superior que lo habita y lo hace un Ser Superior.

No hablamos de religión o de creencias, menos de teoría esotérica: hacemos referencia a la composición del Hombre: Cuerpo-Mente; Alma-Sentidos…y ESPIRITU. Pues bien, es este Espíritu la llave de su liberación, de su superioridad y de su libertad. Y es la vida Espiritual la fuerza que abre los ojos y oídos que permiten romper con los lazos del saber administrado por el poder mundano. Y es por coherencia con Lo Espiritual que podemos relacionarnos naturalmente con la madre tierra y sus leyes, e incluso participar y ser parte de su bondad y magnificencia. Lo Espiritual nos conduce a la superioridad humana, y sin proponernos trabajos mentales largos y agotadores, solamente por Verdad y Congruencia con nuestra Espiritualidad, alcanzamos nuestros Logros Humanos y somos personas diferentes al mundano… quién siendo esclavo cree hallar libertades zafándose de algunas cadenas.  

La Sabiduría desde antiguos tiempos propone el Camino Medio como plataforma para que el Ser Humano arranque de subterráneos que merman su objetividad y su relación con la realidad. Y Cristo, cuan divinidad de gran sabiduría, nos abre una senda aun mayor al develarnos que ese Espíritu que ya tenemos es GRACIA del Creador, y que es como una chispa que es parte de un Sol del cual espiritualmente somos parte. Y si ya tenemos una clave interior, un ‘chips’ divino en nuestro interior: ¿Cómo no ir en su búsqueda? ¿Cómo no entrar en su verdad y hacernos Personas liberadas?

Porque desde ese parámetro Espiritual: vemos hoy un virus y muchos virus, y vacunas y muchos tipos de inoculaciones que hace siglos vienen postrando nuestra inteligencia y potencial. Solamente que en este tiempo se ha dado una circunstancia única, y es: que el lapso para que el Ser Humano optara por convertirse en un Ser Libre y Creativo, que convirtiera a este mundo en un olimpo…está llegando a su fin. Mientras que enfrentamos ciclos terrenales de cambios determinante; que cósmicamente estamos, ahora sí, ante un salto cuántico que no depende del Hombre y que es absolutamente ligado a leyes universales que no conocemos. Toda esta sincronía, nunca antes coordinada bajo una misma línea, es lo que llamamos ‘Tiempo de Tribulación’.

Visto desde esta altura humana – que se logra desde el Camino Espiritual de Sabiduría Cristica – (y que cualquier Ser Humano puede acceder con Buena Voluntad y Compromiso), no nos perdemos en momentos políticos o en estados de crisis, como muchos en la historia humana, y siempre bajo los mismos parangones. Somos una larga secuela de contradicciones nunca resueltas, y que podemos disolver mediante las alturas que nos ofrece el Espíritu que nos habita.

Porque solamente desde el Camino Espiritual seremos verdaderamente LIBRES… y podemos llegar a Dios… y ya no debemos seguir inventando al dios que queremos desde los acérrimos cultos: porque esa soberbia hace parte del mismo problema: otro virus con muchas vacunas eclesiásticas a disposición.

A propósito de elección presidencial

Es natural que los seres humanos leamos el hoy y el presente como lo más urgente, y todo momento de cambios como el fundamental para la historia de un país o nación. Si escrutamos e indagamos nuestra Memoria constataremos otras circunstancias tan vitales, como definitivas, que fueron enfrentadas con la misma pasión y sensación de emergencia. Al final, los gobiernos pasan, los regímenes caen, los pueblos aprenden y los cambios se imponen…porque de otro modo aun estaríamos en la edad de bronce.

Quienes recorremos el Camino Espiritual y buscamos Sabiduría para observar la realidad sin cortapisas o subjetivismo, y además no nos quedamos en lo coyuntural, sino que intentamos obtener ‘mirada histórica’ para asentar una objetividad, sin miopías circunstanciales, no caemos en los miedos ni en las amenazas que enarbolan los publicistas políticos: y nos sostenemos sobre principios que dan consistencia a la realidad que consideramos justa para nuestro pueblo y nación. A saber:  

un Estado de Derechos; La Libertad expandida por brazos vitales como la libertad de reunión, de culto, de expresión, de movimiento, de organización y de manifestación…; La Democracia como sustento inalienable de cualquier tipo de gobierno y bajo cualquier ritmo de cambios; la Ecología como parte indivisible de la Democracia;  el Cambio y la Reforma como elementos propios del progreso; la adecuación y modernización de la Cultura y de las transformaciones sociales ligadas a las nuevas formas de concebir a la sociedad y a las personas; La Educación como un ejercicio de libertad y un derecho garantizado por el Estado; la Justicia igual para todos y sin privilegios; el desarrollo armonioso de las nuevas formas laborales y tipos de relaciones en el trabajo; la Superación de la violencia… sea Institucional… sea Social… y extirpada de la práctica política; la eliminación de la pobreza; el castigo severo a la Corrupción; el término de la explotación laboral, de los abusos esclavistas y de los sueldos de miseria; un sistema de pensiones y jubilación justo y sin especulación financiera en favor de entes ociosos; la Salud como un Derecho que define la frontera entre Justicia Social  e Injusticia  e Iniquidad; la vivienda digna como prioridad humana y fundamento de la construcción social … en fin: una sociedad libre y sin pobreza y sustentada en la ECO Democracia que garantice Paz y Justicia sin odiosas desigualdades y absurdos privilegios de castas. Y en cuanto a la Paz y a la seguridad puesta en jaque por el avance de la delincuencia y el narco tráfico: un Estado democrático no muestra su apego a la libertad dejando que el Mal gobierne en los barrios de menos recursos y sea comercio abierto e hipócrita en los centros en donde la riqueza consume a destajo. El corte radical a los sistemas de financiación y un control profundo a las redes del dinero requiere reformas y leyes especiales que deben implementarse con osadía; medidas severas que impidan el comercio y tenencia de armas con cambios en el código penal que apliquen penas definitorias y sin visos de garantismo; ocupación del Estado de los sectores abandonados, con planes sociales serios y sostenidos en el tiempo: recuperación y fomento social de crecimiento cultural y laboral en los barrios;  reforma sustancial al sistema penitenciario; leyes precisas que impidan cohesión de las mafias con la política.

No creo que alguna de las dos alternativas presidenciales garantice en plenitud esta base que debe regir a un Buen Gobierno. Pero tampoco veo en alguno de los dos un peligro o un inminente deterioro de las bases democráticas actuales.

Porque ambos están condicionados por Una Convención Constituyente que presentará una propuesta para que todos la aprobemos o rechacemos; porque las fuerzas en el parlamento están tan parejas que la obligación será el dialogo y los acuerdos; porque el estallido social de octubre del 2019 nunca fue ‘izquierdista’ sino que precisamente ‘social y transversal’, y tal antecedente es hoy parte de cualquier calculo o ecuación política; porque los extremos que un momento pudieron resurgir por y en  su ímpetus de violencia verbal y física ha sido aplacado por la indiferencia del pueblo hacia sus posturas; porque ‘la unidad’ de los bloques que apoyan a los presidenciales no se mantendrán unidos en el ejercicio del poder dada sus diferencias y diversidad hoy atenuada solo por oportunidad electoral: lo que evitaría que un proyecto o medidas unilaterales y extremas cuenten con unanimidad incluso al interno de una misma coalición. Y porque este pueblo ya aprendió algo que ha integrado a su forma de Ser: que si el poder no escucha…se le hace oír manifestándose y haciendo uso legítimo de medidas de fuerza… no necesariamente violentas, pero si firmes y claras. Es decir: no hay un pueblo pasivo que sólo mira. Y este pueblo observa y nadie, ni la derecha ni la izquierda ni algún centro que brota del descontento, tiene ganada la incondicionalidad.

Los hechos y solamente los resultados darán sostén al gobierno que viene, o por sus hechos y resultados será contestado y rebatido en las calles y en la sociedad aun por quienes lo votaron.

Democracia: o Es… o No Es

En el año 1980, en Chile, bajo un régimen cívico militar dominante, se llevó a cabo un plebiscito para aprobar una Constitución elaborada por un selecto grupo de civiles incondicionales al sistema: el resultado oficial fue de 4.204. 879 votos para la opción «Sí» (67,04 %) y 1.893. 420 votos para la opción «No» (30,19 %).

¿Cumplió dicho evento con las garantías democráticas y de libertad que exige un auténtico sufragio universal? No.

Cuarenta años después Chile se ha dado una Convención Constitucional, ahora sí, democráticamente electa y bajo todas las garantías que la legitiman como ente válido para proponer una nueva Carta Magna. Y será el pueblo, con su voto, quién deberá aprobar o rechazar el texto final que emane de esta Convención. Esa es la diferencia nítida y evidente entre una Democracia y una Dictadura.

La izquierda en Chile fue la más afectada por el paso de un régimen feroz, y ha sido quién más ha elevado su voz en contra de los fraudes fraguados bajo dictadura.

En Nicaragua viven un poco más de 6 millones y medio de personas. De las cuales cerca de 4 millones cuatrocientos mil figuran en el padrón electoral. Bajo el gobierno de Ortega y Murillo ha desaparecido la separación de poderes en el Estado, y en veinte años se ha instalado un sistema severo de carácter cívico militar. Sin oposición libre en realidad, con presos políticos y restricción de toda libertad de expresión, y con ocho de los candidatos contrarios a Ortega previamente encarcelados u obligado al exilio: Ortega -Murillo obtuvieron el 75% de los sufragios; es decir más de 3 millones de votos.

¿Cumplió dicho evento con las garantías democráticas y de libertad que exige un auténtico sufragio universal? No.

¿Cuál es la diferencia entre dos realidades aquí expuestas? Desde el punto de vista electoral y de las garantías democráticas reales: ambas están bajo el mismo molde absolutista.

Para la dirección del Partido Comunista en Chile la dupla Ortega-Murillo ganó en buena lid. Lo que entonces dá razón a los partidarios del señor Kast, los cuales consideran que la Constitución del ‘80, bajo pantomima electoral, es válida y legitima. Porque si lo de Ortega-Murillo es legítimo, entonces también lo de Pinochet el ‘80 lo es. Y si coincidimos en que el plebiscito del ‘80 en Chile fue una burla, mal podríamos considerar que otros fraudes electoralistas, como sucede hoy en Nicaragua o en Venezuela, sean auténticamente democráticos.

Basta colocar en tabla las condiciones democráticas para una Elección realmente libre y representativa: y constataríamos que la defensa de Ortega-Murillo es un reconocimiento de que se mide la democracia según parámetros que no son democráticos, sino que ideológicamente retrógrados, cavernarios y que de algún modo coincide con quienes urdieron la trampa del ‘80 en Chile.

Vencer a ‘la lógica de la guerra’

Situación en la Araucanía

Siempre será aconsejable no emitir opiniones en medio de una lucha electoral, cuando el mundo político y social se encuentran tan revueltos. También es legítima la pregunta de si acaso las personas que estamos en el Camino Espiritual y cultivamos Sabiduría debiéramos inmiscuirnos en asuntos coyunturales que atañen a los seres humanos en su realidad social y cotidiana.

A lo segundo respondo que el Camino Espiritual y la nutrición de la Sabiduría nos da, precisamente, un profundo sentido de realidad, y sin hacer parte de la contingencia y militancia sí logramos ver y entender lo mundano desde una altura y objetividad exenta de la pasiones e ideologismos.

Ante los hechos que se suceden en las zonas de la Araucanía no podemos permanecer impávidos, pues allí se ha despertado un monstruo que pisa fuerte y cuyos pasos futuros podrían conducir a una vorágine que en su saciedad nos consuma y extermine como pueblo civilizado.

De lo Espiritual a lo social y político: porque si no construimos este relato desde la cosmovisión mapuche, lisa y llanamente no podremos tejer nada coherente. La profunda religiosidad heredada de sus ancestros conforma en gran medida la Identidad de un conglomerado humano que, por consecuencia, entiende su trascendencia en (con) la intimidad de la tierra, siendo la naturaleza su gran Carro de transformación mística. Y de esta forma de concebirse a si mismo, el Ser Mapuche alza una cultura y un modo de pensamiento que entreteje relaciones y cimenta un tipo de relaciones sociales, y de tal manera construye una Nación.

Cuando las tropas de la República vecina de Chile desviaron fuerzas militares y de guerra desde el norte (guerra del Pacífico) hacia el sur para aplacar la resistencia de los aborígenes y ocupar sus tierras, no procedían a invadir ‘otros y más territorios’ que desde Santiago se consideraban propios, sino que nunca se consideró a los originales como a seres humano, y por lo mismo, de ningún modo se trató de una simple expansión, sino que siempre fue una decisión política de exterminio. Pero esta fuerza de arrase y vasallaje no solamente será y fue militar y política, sino que para el mapuche fue -y es- Espiritual y de hondo agravio a su identidad. Y si este aspecto fundamental no se considera en la ecuación del análisis: la conclusión filtrará y hará agua por todas partes.

¿Cómo restituir ese Bien Intangible enraizado a la Espiritualidad de un pueblo que ES intrínsecamente una Nación, por cultura y visión de la vida? Inexorablemente la solución comienza cuando la comunidad regresa a la madre tierra y conforma un universo reciproco de costumbres, rituales y modos de ser Patria. La tierra es el altar en donde el mapuche se reconstruye a si mismo. Desde ese punto sagrado se hace social y pudiese institucionalizar una Ciudadanía diversa, y se podrían tender puentes y formas de relaciones armoniosas con el Chile que, de una vez, debiera asumir la diversidad de su gente como riqueza humana que engrandece su civilidad.

¿Qué impide este ejercicio de razón, cordura y alta inteligencia política?

Cuesta entender, en medio de una crisis climática innegable, golpeados por el flagelo de la sequía, carentes de agua y abundantes de aguas contaminadas, que todo el asunto se concentre en un asunto de vil y básico mercado. Grandes extensiones de tierra destruidas por el mono cultivo y amplias franjas de bosques nativos ahora reemplazados por pinos y eucaliptos que alimentan conspicuas ganancias para consorcios chilenos y extranjeros.

 ¿Fue el Cristo quién aseveró que un rico difícilmente podría entrar al reino de los cielos? Y claro, no hablaba de la persona que tiene un buen pasar económico, sino de los potentados que depredan y matan en su afán interminable de plusvalía y ganancias que abunden sus ya opíparas reservas. Porque un avaro y malvado que avasalla para enriquecerse no es precisamente inteligente, ni culto, y menos es Espiritual: es, en cambio, la representación más nítida de lo demoniaco en el ser humano.

¿Combatirá el Bien y el Justo con las mismas armas que el Mal usa para degradarlo y someterle?

Cuando la idea de la conflagración, la necesidad de las armas, el llamado a la violencia y a la lucha armada alcanza a quienes han sido sometidos desde una oscura estratagema, por las armas, usando violencia institucional y una política sistemática de aplacamiento cultural…lo que tenemos ante nosotros es aquel ‘monstruo que pisa fuerte’: que sabemos cómo y cuándo, y por qué, comienza, pero que no sabremos cómo, cuándo y con qué consecuencias podría culminar.

La lógica de la guerra no verá jamás soluciones pactadas, salidas políticas o parlamentos para diálogos entre las partes con sentido de Paz y de reciproca comprensión. El ánimo político de la confrontación arguye la violencia del otro para aumentar la propia intervención de beligerancia, y es esta arremetida la que consolida el argumento para armarse y resistir por parte de quienes también piensan bajo la lógica de la guerra.

En el invasor y el expoliador no hay conflicto de fe ni contradicción con su religión: porque el bandido es funcional a sus mezquinos intereses y usa a Dios sólo como factor decorativo para disfrazar su desfachatez. En las Causas Nobles que defienden principios de gran altura… como la paz, la igualdad, la libertad, la justicia, la defensa de su cultura, el derecho a ejercer su religiosidad y vivir sin restricciones la propia espiritualidad, la democracia y el Derecho a Ser Nación… si hay una contraposición al entrar en la ‘lógica de la guerra’ pues inevitablemente o deberá traicionar sus propios principios o deberá retorcer sus ideas para que Dios o su cosmovisión cuaje con la muerte y el derramamiento de sangre…como desde siempre han hecho los Hombres religiosos que han postulado a construir su propio dominio terrenal.

Sabemos, quienes hemos empuñado armas para derrocar tiranos y hemos visto la guerra en la piel y en la muerte real de personas inocentes, que todo lo noble de una causa peligra seriamente cuando los Hombres deben tomar las armas para defenderse de un Mal que les devora. Esta fina y delicada línea es abordada por La Sabiduría, la que aconseja: evitar las armas y la confrontación violenta, y si fuese inevitable: acortar la máximo el tiempo de la beligerancia armada; y nunca caer en la ‘lógica de la guerra’ sino que hacer la guerra bajo la ‘lógica de la paz’; ser justos en la batalla y misericordiosos en la victoria, respetar la humanidad de los prisioneros, nunca permitir el fanatismo entre las tropas, y combatir para lograr el dialogo y los acuerdos entre las partes. El Sabio aborrece las armas, y si ha de tomarlas por circunstancias: será su esmero dejarlas en breve plazo para dar espacio y tiempo para la Paz.

También La Sabiduría aconseja al poder del Estado: quién gobierna tiene el deber de preservar la Paz por sobre cualquier acontecimiento o crisis que golpee a su pueblo o nación, y para que la Paz sea mantenida y acrecentada el Buen Gobierno evitará las injusticias y no permitirá leyes que en favor de unos pocos esclavicen a muchos; porque si un gobernante es un servidor de fuerzas oscuras que imponen sus privilegios sobre la gente: tal no es propiamente un gobernante sino una pantomima cuyos hilos son tirados desde la ignominia.

Cuando el gobierno de Chile envía tropas para contrarrestar la violencia en la Araucanía, lo hace desde una ‘lógica de guerra’ que resulta natural para su modo de concebir la realidad a la que se enfrenta. Es deber del pueblo entonces: cambiar de gobernantes y optar por gobiernos que enfrentan la realidad desde la política de las soluciones y desde ‘la lógica de la paz’.

Las armas para los esclavos y sometidos será un recurso extremo bajo circunstancia en que todo camino de libertad y cambio ha sido obstaculizado y clausurado. Mientras existan espacios para organizarse, conglomerarse y movilizarse, construir realidad política y parlamentar desde la Fuerza de la unidad y la propia institucionalidad… el pueblo mapuche… como todo pueblo afectado por la injusticia, tiene el deber de afinar y asentar su propia fuerza orgánica para consolidar alianzas con la sociedad chilena que es sensible a su causa, y de este modo lograr su condición de Nación. Y resulta evidente que tales zonas políticas aún están abiertas y disponibles, y por lo mismo es que la lucha armada resulta una paradoja: porque políticamente viene a dar la razón a ‘la lógica de la guerra’ que desde el Estado de Chile y desde las empresas que explotan las tierras araucanas, se imponen con desfachatez. Y es un absurdo por que esta lucha con armas sepulta todo el andamiaje Espiritual y esencial del pueblo mapuche; e incluso el sostén discursivo de sus miembros suena distante del lenguaje e idioma mapuche, y huele demasiado a ideologismo guerrerista que ya en pasado ha hundido a otras grandes oportunidades de Cambios Revolucionarios.

Conozco bien como funciona esta ‘lógica guerrerista’ (les invito a entra a ‘ecosdeotravida.home.blog’ o ir al Link  al costado de esta misma página) y cómo al final ‘la causa’ se convierte siempre más en un pretexto, y los fines serán siempre más difusos y sectarios. Y se sabe, en las ciencias militares de la insurgencia y la contra insurgencia, que la Inteligencia del enemigo siempre infiltrará, tarde o temprano, a estas fuerzas construidas a contrapelo de toda posibilidad política real; y está comprobado que tales grupos, al final, sirven para alimentar y reafirmar esa nefasta ‘lógica de guerra’ de quienes ahora justifican sus fechorías mercantiles con ‘un estado de hostilidad terrorista del cual son víctimas’: la hipocresía y la falacia como herramientas de guerra psicológica.

Salir de ‘la lógica de la guerra’– en relación con la situación del pueblo mapuche- como Estado de Chile es un deber que todo ciudadano que vota, que se expresa y que se organiza en Chile debe hacer propio.

Potenciar la unidad orgánica de Paz para aplicar Medidas de Fuerza que construyan alianzas y permita recuperar las tierras y construir su destino según su Espiritualidad y razón de vida… es la vía a la victoria de la nación mapuche, que nos hará un país unido en la diversidad… Plurinacional, inteligente y civilizado.

Carta abierta a la Lista del Pueblo

Ver en:

https://ecosdeotravida.home.blog/2021/08/13/carta-abierta-a-los-y-a-las-componentes-de-la-lista-del-pueblo/

Acceder a ‘Carta Abierta a la Lista del Pueblo’ en Blog: ecosdeotravida.home.blog

Una candidatura judeocristiana.

La noticia nos dice que el candidato J.A. Kats, del Partido Republicano, se ha asociado con el ‘Partido Conservador Cristiano’ para conformar un frente social y político. Leemos que la base de este conglomerado Conservador Cristiano es el ‘la civilización judeocristiana’ y la concepción Biológica del ser humano – y de la Nación- como un ente único e impositivo. (buscar en la web y leer sus postulados)

¿Qué es lo que se entiende por judeocristiano? (Investiguen por su cuenta en el abundante material en las redes).

(Mi aporte para la reflexión y la investigación)

No hay unanimidad, en la catedra y en el estudio especializado, sobre aquello que se presenta bajo la concepción de ‘civilización judeocristiana’. Se considera que la versión política basal de esta idea se encuentra en la Constitución Norte Americana. Y desde el análisis de la Historia de las Religiones se identifica el nacimiento del Judeocristianismo en las primeras comunidades cristianas surgidas de entre los judíos, como en la Jerusalén de entonces y en la antigua Siria. Se endosa este concepto político al Militarismo Católico que ve en las cruzadas la salvación de la Tierra Santa de los Impíos musulmanes. También podemos encontrar la aseveración que establece que el Decálogo de Moisés constituye la plataforma jurídica y moral de la civilización judía ortodoxa y cristiana primitiva.

En política se ha usado y reforzado este concepto e idea ante episodios históricos radicales como la instauración del sistema comunista, la dominación nazista y el avance del islamismo fundamentalista. Se ha conjugado la idea de la ‘civilización occidental’ como una red de valores y cultura opuesta y contraria  a las civilizaciones de oriente y Asia, aceptando, a momentos, la diversidad de creencias o la libertad religiosa (budismo, taoísmo, etc.), pero no reconociéndoles la capacidad o el derecho a conformar ‘civilizaciones’ o ‘cultura’ propias, calificándolas, al existir, de retrogradas, involucionistas, carentes de democracia y modernidad: como es en esencia- creen sus teóricos-  el empuje del judeocristianismo. Será, por tanto, el judeocristianismo la garantía perfecta que asegura progreso y libertad sustentadas y en respeto con la Ley de Dios.

Desde 1950, en los Estados Unidos, surgen las Iglesias Judeocristianas, en su mayoría entre vertientes evangélicas, protestantes y puritanas. Conforman cofradías secretas o ‘no publicas’ en contra del avance y la amenaza comunista, y en sus propósitos estratégicos se proponen conformar redes económicas y políticas que coloquen a sus personeros en los ganglios del poder no solamente en los EEUU sino que en ‘el mundo occidental’. Muchas de estas iglesias traspasarán lo someramente doctrinario de aquello que se entiende por la fe judeocristiana, y se ligan política, ideológica y financieramente al Estado Israelita, funcionando como verdaderas agencias ideológicas y hasta de bases para la Inteligencia del Mossad.

Adjunto al criterio de superioridad de la Civilización Occidental, se desarrolla, desde los años 60 del siglo veinte, la teoría de la ‘Biología Humana de la Civilización Moderna’- (judeocristiana)- comprendiendo, sucintamente- que ‘el ser biológico humano’ está determinado por su connotación ‘varón-mujer’, no pudiendo diferenciar diversidad humana al margen o por fuera de esta condición Biológica. Y sobre esta teoría se alza, además, la imposibilidad ‘científica’ (que viene a corroborar la condena bíblica a la homosexualidad) de que un varón o una mujer pueda justificar su tendencia sexual por el mismo género, lo cual es una distorsión psicológica, y debe ser tratada como tal.

Tradicionalmente las instancias que se reclaman a esta vena política conjugada con la fe bíblica y estructurada bajo fuertes regímenes eclesiásticos se han colocado, en su totalidad, en las zanjas más extremas de las ortodoxia derechistas y nacionalistas.

Ahora, en defensa de Lo Cristico: los postulados de la militancia judeocristiana, (confrontados a la doctrina de Cristo sin la tutela y las sombras del Antiguo Testamento y libre de la matriz judío-ortodoxa), saltan y se desbaratan ante las abismaste contradicciones que separan a las afiebradas visiones políticas ‘occidentalistas’ con la propuesta Espiritual del Cristo que no se pliega a religión alguna, ni funda partido político ni separa a los Seres Humanos en civilizaciones hostiles.

Es URGENTE asumir a Cristo por lo que es: un Camino de Elevación Espiritual que eleva al Ser Humano a una calidad integral, renovada y superior; y lo hace por Fe, por Coherencia Espiritual; por aplicación concreta en la vida en comunidad y social, en donde no hay fronteras, sino Seres Humanos cuyo valor esencial es su Espiritualidad y su Bien puesto en obras.

El uso malévolo de Jesús, de Cristo, para fines políticos -e imponer teocracias y justificar la lucha entre civilizaciones -es una realidad histórica desde el emperador Constantino. Por lo mismo, es urgente separar a Cristo (y su Plan de Salvación para todo Ser Humano), de la Religión y sus oscuras jerarquías luciferinas; y debemos desconfiar de los ‘cristianos constituidos en partidos conservadores según  la tradición judeocristiana’ por tratarse de los diableros de siempre travestidos de ‘nobleza inculta’ e ‘ignorancia supina’ que levantan cabeza justo cuando en los pueblos brotan aires de cambios, de libertad y de saltos a mayor democracia exenta de tutelaje decimonónico, y realmente innovadora.

Nota: invito a ver y leer ‘Doctrina Social del Movimiento de fe Cristico’ y descargar PDF para su mejor discernimiento:

https://www.leydejesuscristo.com/doctrina-social-del-movimiento-de-fe-cristico/

Qué es una Revolución. Qué es un Revolucionario hoy.

-A propósito de la ‘revolución cubana’-

En el I Ching se asocia ‘Revolución’ a ‘Mutación’, y considera que toda revolución ‘muta’ en forma profunda un estado de cosas imperantes e impone una nueva condición prevalente.

En la época del Renacimiento empieza el pensamiento revolucionario moderno. El inglés John Milton (1608 – 1674) fue uno de los primeros en considerar la revolución como:

• una habilidad de la sociedad para realizar su potencial y
• un derecho de la sociedad para defenderse de los tiranos abusivos

Milton asumía la revolución como la manera de la sociedad para alcanzar la libertad asociándose al concepto de la ‘utopía’.

Según los antiguos griegos hasta la edad media, como Platón y Aristóteles, la revolución fue considerada como una consecuencia evitable de la decadencia e incerteza del sistema de valores, los fundamentos morales y religiosos de un Estado

 Revolución, en las ciencias políticas, es un cambio social organizado, masivo, intenso, repentino y generalmente no exento de conflictos violentos para la alteración de un sistema político, gubernamental o económico.

En la Persona se verifican saltos de conciencia y de formas de vida opuestas y radicales que corresponden a ‘revoluciones de vida’ que el Buda llamo ‘Iluminación’.

El concepto en la física cuántica para ‘revolución’ es ‘Salto’.

Una Revolución NO dura 60 años, como en Física un ‘Salto’ no es algo ‘permanente’. Como en la persona un estado superior de Conciencia puede ser explosivo en su manifestación, pero luego viene un largo tiempo de asentamiento y nueva construcción de vida. También una Revolución en política no es algo que pueda sostenerse en ‘revolución permanente’ por decenios, porque una vez alcanzado el Cambio se hace fundamental crear las nuevas condiciones que consoliden el producto de esa Revolución. La ‘construcción revolucionaria’ sí puede perdurar por un tramo relativamente prolongado, ya que lo nuevo pasará por la experimentación, la prueba y el error…además de la resistencia de la contra revolución que se da en todo proceso de Cambios.

La sexta línea del I Ching en el signo 7 ‘El Ejercito’ dice que luego de pasada la guerra o la revolución, es menester la construcción de las bases que sustentarán la nueva situación, y que es aconsejable repartir nuevos cargos y entregar pagos justos a quienes lucharon, pero que no es aconsejable mantener las mismas condiciones necesarias para la guerra o para el éxito de una revolución.

La Revolución Cubana marcó un Hito en América Latina. El proceso revolucionario previo al asalto al poder tiene su relato y tiempos, el asalto lo suyo, y la construcción de la nueva sociedad socialista tiene sus marcas evidentes en la historia revolucionaria de la Isla.

El asentamiento del socialismo y del Estado se estructura firme y definitivamente en los años 60, y sobre todo después de la crisis de los misiles (1962). Desde entonces YA no hay una Revolución, sino que ‘la construcción y consolidación del sistema socialista’ bajo los cánones generales del ‘socialismo real’ cuya matriz soviética marcó la ortodoxia del PC cubano.

La propaganda oficial en Cuba agita ‘la Revolución’ como ‘Un Todo permanente y eterno’. Y si así fuese: no existiría socialismo ni nada de lo que actualmente se verifica como Estructura de Estado;  porque una Revolución es CAMBIO, es Salto, es Mutación, es Rompimiento de las Estructuras…y NO ‘Construcción de Estructuras’ (porque lo nuevo que se construye es ‘un proceso revolucionario’ en tanto está en constitución y consolidación; y deja de tener cualquier atisbo de ‘revolucionario’ del momento que esa Estructura es un régimen estatal y cultural asentado y con fuerza de Ley y establecido como molde social obligatorio).

Un sistema en ‘permanente revolución’ se fagocitaría y nunca lograría estructurar un sistema político estable y definitivo. Por lo mismo, hablar hoy, a 60 años, de ‘Revolución Cubana’ es una entelequia. En Cuba hay un Sistema Socialista de carácter ortodoxo al estilo del ‘socialismo real’ conocido por la característica de Estado, por su concepción económica, por los modos de gestión, por las estructuras de ‘democracia socialista’ y el sistema de partido único, etc.

Se puede concordar o evidenciar rechazo por el sistema cubano, y eso es una opción de quienes observamos desde afuera la realidad en la Isla, porque los cubanos que viven, crecen y mueren en Cuba no tienen posibilidad de optar por otro sistema, intentar cambiarlo, o elegir un gobierno entre varias posibilidades.

Históricamente somos muchos quienes seguimos apoyando la Revolución en Cuba: la derrota de la tiranía corrupta, el cambio de la Isla: de burdel al servicio de los ricos de los EEUU y de la mafia del norte…a País y Nación propiamente Tal, con identidad y con soberanía. Y aceptamos que para consolidar ese Salto de Gran Cambio NO había otra posibilidad, -en medio de la Guerra Fría y con la amenaza norteamericana a millas escazas-, que optar por el socialismo con apoyo sustancial de la Unión Soviética. Porque, rehaciéndonos a esos años y condiciones (no visto desde hoy bajo la situación que ahora vivimos) la posibilidad de que Cuba se volviera otra ‘Puerto Rico’ era absolutamente concreta e innegable.

Caído el ´socialismo real’ del mundo soviético, la dirigencia comunista de Cuba tuvo la gran oportunidad de iniciar las Reformas que aseguraran la permanencia del sistema político mediante una apertura en el sistema económico. Europa estaba pronta y abierta a apoyar tal proceso. Una realidad similar a lo que hizo Vietnam…era la salida que garantizaría el socialismo como estructura de poder político. Pero la dirigencia cubana, con Fidel a la cabeza, optan por ‘resistir’ en la barricada de la ortodoxia y soportar un ‘periodo especial’ sin grandes reformas ni ‘saltos al vacío’.

Desde la Perestroika hasta hoy, en Cuba no sólo no hay una Revolución, sino que no existe un sentido mínimo de Reformas profundas. Y lo que hoy tenemos es un Estado Socialista en decadencia cuyo gran pretexto es el absurdo y odioso ‘Embargo’ norteamericano sobre la economía y mercado que afecta a la Isla en parte importante, pero que, sin embargo, NO le impide comerciar y participar en el mercado con varios y muchos países del mundo.

El Embargo o Bloqueo es una manifestación imperial nefasta, profundamente colonialista y contraria a todo estándar democrático y de respeto a las leyes internacionales. Pero NO es este mañoso Bloqueo la CAUSA que no permite reformas o cambio de mentalidad o decisión política en la dirigencia cubana. Creer aquello sería una necedad: porque Los Hombres pueden tomar decisiones de cambios aun si los bloqueos formaran muros carcelarios impávidos: porque las resoluciones y los cambios que Cuba necesita pueden decidirse y llevarse a cabo aun con un Bloqueo mayor que solamente el económico y de mercado, (que en mucho es relativo, pero igualmente odioso y reprochable).

Estar y apoyar política e históricamente a la Revolución en Cuba, y además considerar que el sistema socialista ortodoxo ha fracasado en Cuba, y alzar hoy la voz en contra de lo obtuso   de una dirigencia que es prisionera de sus propios esquemas: no es una contradicción.

Apegados al significado de aquello que debemos entender como ‘Revolución’, sí podemos apoyar y aceptar la Revolución Cubana en su contexto histórico. Pero como NO hay una Revolución que dure 60 años, (y lo actual ya hace tiempo dejó de ser ‘revolucionario’ y es un sistema obsoleto, añejo, inconducente y bloqueado desde adentro por la propia ortodoxia) y es -y ha sido de hace años- un ‘sistema socialista’: entonces sí podemos concordar con nuestra simpatía por el hito de la Revolución en Cuba, pero alejarnos y criticar al sistema de socialismo anquilosado que se impuso en la Isla.

La fuerza del motor revolucionario hace años que fue enterrado en Cuba.  El modo de salvar al socialismo en Cuba requiere que su dirigencia se abra a los ejemplos de otros sistemas que han logrado mantener la política socialista con apertura de carácter capitalista en lo económico, y aplicación de formas de democracia que permitan mayor libertad al pueblo. Esta fórmula, de mencionarla, suena a ‘pecado’ y ‘blasfemia’ para la curia comunista. Y esa religiosidad (que ya de sí no es revolucionaria) es precisamente parte del problema.

Igualmente, por encima de la particularidad de Cuba, o de la realidad de China: los Revolucionarios del Mundo hoy postulamos a Cambios profundos  que aseguren Más Democracia y Participación, y un sistema que ponga al Ser Humano al centro de las decisiones y al Medio Ambiente y a la Naturaleza como centro de referencia para la toma de decisiones económicas y de vida; y aspiramos a nueva matriz energética, radical y definitiva, y a nivel mundial; y postulamos al desbaratamiento de los grandes monopolios y a la democratización de la economía y a la diversificación del mercado como instrumento (y no cuan divinidad imperturbable), y proponemos un combate a fondo en contra de la producción de alimentos transgénicos y propiciamos el desmontaje de las monopolios de las semillas. Y postulamos a una Revolución Cultural que libere al Ser Humano de la ignorancia y entregue pleno Saber para Tomas de Decisiones en libertad y sin discriminaciones antojadizas. Y una Fuerzas Armadas para la Paz y una política de Paz que rompa con la cultura de los ‘héroes’ y de la ‘guerra’ como forma de concebir la solución de los conflictos; en donde los Derechos Humanos sean el centro neurálgico de un Estado de Derecho real y diferente al estrechamente aplicado y concebido hasta hoy. En donde la revolución tecnológica y científica de verdad se coloque al servicio del desarrollo integral del Ser Humano y se rompa con fuerza y para siempre con los gobiernos en las sombras. Y, por sobre todo, aspiramos a un Salto que revolucione al Ser Humano DESDE ADENTRO, en aras del Gran Logro del Hombre Nuevo.

Podemos tomar del socialismo histórico lo que sirva a los propósitos de la Revolución Humana que hoy postulamos, y del sistema capitalista aplicado  aquello que canalice nuestras aspiraciones de bienestar y progreso: Una Eco Democracia que supere los modelos y construya la sociedad humana del futuro.

Quedarse mirando hacia atrás: añorando lo ‘perfecto’ del capitalismo…o lo ‘soñado’ del socialismo… es el camino de los conservadores y de quienes no son revolucionarios hoy.

Para que la palabra nos aclare y mi visión

Subido a mi muro en Facebook:

¿Estallido? ¿Revuelta? ¿Presos Políticos? ¿Reformas? ¿Revolución?

Para que la palabra nos aclare

El poder de la palabra está en su justa y consensuada conceptualización, significado y/o acepción. Cuando la palabra no posee un fundamento unánime entre quienes se comunican: surgen las diatribas, el subjetivismo y las conclusiones erradas. Incluso en la semántica hay democracia: que la conclusión de un considerado pueda dar interpretaciones diversas y diferentes. En eso consiste la riqueza del lenguaje.

Estallido Social: ‘estallido’ es un estrepito que se manifiesta con violencia y rompimiento, y es ‘social’ porque involucra a capas de la sociedad que previamente han acumulado rabia, indignación y/o frustración no siempre manifiesta y que se expresa como en un detonar explosivo que por lo general se caracteriza de masividad, uso de fuerza, violencia y crisis política. Su espontaneidad define que ‘como estallido’ persista lo que dura una explosión. No tiene continuidad propia.

Revuelta: el escrito Octavio Paz la describe así: “La revuelta es la violencia del pueblo; la rebelión, la sublevación solitaria o minoritaria y de marcada espontaneidad. La revolución en cambio es reflexión.” “para que la revuelta cese de ser alboroto y ascienda a la historia propiamente dicha debe transformarse en revolución […] para los revolucionarios el mal no reside en los excesos del orden constituido sino en el orden mismo”.

Es decir: la Revuelta, contiene rasgos del Estallido Social, pero se acerca más a una revolución debido a que supera el corto tiempo de la explosión social, sino que postula a una Rebelión de mayor alcance. Es lo que en Ciencias Políticas se entiende como ‘periodo prerrevolucionario’.

Presos Políticos: se acepta que hay calidad de prisión política cuando una persona es arrestada o encarcela por sus ideas, opiniones, escritos, alocución o manifestación de conciencia y no violenta: Presos de Conciencia. Y se considera Preso Político -No de Conciencia sino por razones políticas- si:

1. La detención ha sido efectuada violando alguna de las garantías fundamentales establecidas en el Convenio Internacional de Derechos Humanos o cualquiera de sus protocolos. En particular, libertad de pensamiento, conciencia, religión, libertad de expresión o información, libertad de reunión o asociación.
2. La detención ha sido impuesta por razones puramente políticas sin conexión con ningún delito tipificado.
3. Por motivos políticos, la duración de la detención o sus condiciones son claramente desproporcionadas con respecto al delito del que se ha declarado culpable o se sospecha que fue cometido.
4. Por motivos políticos, el sujeto es detenido de manera discriminatoria en comparación con otras personas.
5. La detención es el resultado de procedimientos que fueron claramente injustos y esto pudiese estar relacionado con los motivos políticos de las autoridades.

 “En consecuencia, rara vez una autoridad estatal admite la existencia de presos políticos; los críticos del gobierno aducen que los procedimientos legales empleados están solamente diseñados para ocultar la condición de preso político. Esto puede incluir la invención de cargos criminales, o la negativa de beneficios concedidos a otros presos en situación semejante, así como la aplicación de poderes especiales, como el estado de excepción”

Característica de ‘Terrorismo de Estado:” Uso sistemático, por parte del gobierno de un Estado, de amenazas y represalias, considerado a menudo ilegal dentro incluso de su propia legislación, con el fin de imponer obediencia y una colaboración activa a la población.

” Cuando el Estado a través de sus gobernantes reprime a la población, la hostiga, la persigue, de modo sistemático, para poder llegar a dominarla a través del temor, evitando cualquier acto de resistencia a la opresión, esa manera de actuar recibe el nombre de terrorismo de Estado, que es un abuso de su poder coactivo, donde los civiles son secuestrados, torturados o asesinados, sin juicio previo, o sin las garantías del debido proceso”

De acuerdo con tales conceptos ampliamente aceptados y consensuados: ¿Hay presos políticos en Chile? ¿Tiene rasgos de ‘terrorismo de Estado’ la acción de las fuerzas del orden público en Chile?

¿Hubo ‘estallido social’? si la respuesta es sí:  Entonces ahora cabe subsanar los factores que acumularon la carga socialmente explosiva y restaurar una nueva normalidad.

¿Hubo y hay revuelta’ en Chile? Entonces no habrá solución en reformas y mejorar causas, sino que se ha entrado en un periodo previo- prerrevolucionario-  a un salto de cambios que se conoce como ‘etapa revolucionaria.  Es decir: que postula a la caída de la matriz causante de la rebelión.

¿Cuándo se entra en fase declaradamente revolucionaria? Cuando la espontaneidad y la desorganización o el asambleísmo típico de los Estallidos y Revueltas da paso a estructuras orgánicas en grado de liderar un salto violento o radical, y se alza una propuesta clara y evidente de nuevo modelo opuesto al anterior o distinto en su matriz y propósitos.

 ¿Por qué es vital entendernos en el lenguaje?: porque de esta nitidez conceptual tomaremos las Decisiones Coherentes que aportan a mayor claridad en la realidad social de acuerdo con nuestra Conciencia y Proyección política y humana. Y dejamos de enredarnos y confundirnos con nuestra propia verborrea… y la de los demás. Tan importante que de las palabras construimos realidad.

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• Mi visión: según estos parámetros en Chile hubo un Estallido Social, sin duda alguna, pero al prolongarse en el tiempo y adquirir contenidos políticos y orgánicos tomó la característica de la Revuelta o Rebelión. Y sí hay presos políticos, siguiendo los puntos 3,4 y 5 del Derecho Internacional.

La orgánica y estructuración horizontal, sin mandos definidos, transversales y de carácter asambleísta que postula a gestionar la Revuelta y su resultado político, en base a reivindicaciones atinentes a las causas que provocaron el Estallido, puede tener peso e incluso representación mientras se sostenga el transito ‘prerrevolucionario’, pero no estaría en grado en derivar en una orgánica con capacidad para liderar y dar luces hacia una fase revolucionaria.

La fase prerrevolucionaria puede ‘reingresar’ en el orden constituido mediante cambios constitucionales y reformas sustanciales al modelo que provocó las condiciones para el Estallido. Y una vez alcanzado tales cambios se disipará el ímpetu de la Revuelta, y la organización nacida de esta realidad, por su inorganicidad estructural, tiende a disiparse, fagotizarse, disiparse y atomizarse. Eso muestra la historia política comparada.

En Chile NO hay una postura revolucionaria, ni hay fuerza política organizada que plantee un nuevo orden con evidencia y claridad. El amplio arco de quienes o participan de la Revuelta o simpatizan o apoyan sus motivos NO se plantea a sí mismo cuan ‘vanguardia revolucionaria’ en grado de empujar el carro de la historia, para que el transito prerrevolucionario entre ya en una fase de insurrección bajo propósitos definidos.

Lo que vemos hoy en Chile es el efecto de la Revuelta (Iniciada con el Estallido Social) y canalizada mediante salidas políticas, propuestas de cambios institucionales y mejoramiento y humanización del sistema.  Y eso ‘aparece’ revolucionario no por lo sea en estricto rigor, sino porque el sistema de Capitalismo Salvaje aplicado en Chile y su clase mandante es sumamente arcaica, cavernaria, ultraconservadora, mezquina, egoísta, socialmente insensible y hambrienta de lucro. Pero hasta la postura aparentemente ‘ultra’ de un organismo con características típicas de una Revuelta (la Lista del Pueblo, por ejemplo) en su realidad política, en su composición, en su propuesta y en sus bases manifiestas NO son revolucionarias- siempre en rigor a los conceptos y a la Ciencias Política- y son  el producto natural de una Estallido Social que derivó en Revuelta y ahora es una Fuerza por el Cambio en el marco del ‘estado de Revuelta’ que perdura y se mantendrá mientras la Nueva Constitución esté en proceso, y cuyo tiempo y condición derivará y dependerá de los resultados de este proceso Constitucional. Y eso incluye que fuerzas de la Revuelta participen en o postulen a hacer parte de otros organismos del Estado: legislativo, gubernamental, etc.

La descentralización, la transversalidad orgánica y la democracia asambleísta no es nada nuevo: ya podemos verificarla en la Revolución Francesa, y ha sido un efecto político y social que ha caracterizado a las Revueltas o Rebeliones sociales. Y tales formas de organicidad pueden adquirir fuerza y presencia en el periodo ‘prerrevolucionario’, pero como este traspaso debe culminar y es imposible que dure en el tiempo: o se convierte en una organicidad revolucionaria, o desaparece.

Cuando la derecha recalcitrante alza su histeria para alarmar sobre la eventualidad del comunismo y de una inminente revolución: está alzando un fantasma que solo asusta a los que ya están tomados por el pavor, y que caen en ascuas ante la sola palabra ‘cambio’.  Sin embargo, en Chile NO hay NINGUNA posibilidad de que, con la realidad actual, este proceso político de transición derive en un salto revolucionario, y por la profundidad política del mismo proceso en curso menos existe la probabilidad de que el populismo campee a sus anchas con alguna capacidad de hacerse del poder.

La violencia de grupos antisistema, que incluso pueden voltearse en contra de compañeros de ruta nacidos en las calles durante la Revuelta, no representa una alternativa de revolución: porque una revolución exige organización, sustento político y estructura de vanguardia que es contraria a la indisciplina natural de los acráticos. El gobierno y sus aparatos pueden infiltrar tales grupos, y de alguna forma permitirles su sobrevivencia para justificar sus medidas represivas y si acaso el corte en el proceso político.

 Por último, la actitud del sistema político institucional, del gobierno, de la clase política, de la derecha, de la izquierda tradicional definirá en gran medida el ´porvenir de esta realidad’: si se cierra y estrangula la liberación hacia más democracia y cambios  reales (lo que favorecerá el surgir de las nuevas fuerzas revolucionarias, o convertir a parte de los actuales militantes de la Revueltas en dirigentes revolucionarios) o si favorecen y no colocan muros a los Cambios y a mayores expresiones democráticas (lo que diluirá cualquier razón de planteamientos de mayor mutación o de saltos revolucionarios).

La ultraderecha históricamente postula a reventar los procesos de reformas y de cambios: en modo que la revolución tome cuerpo y cabeza, y eso les coloca a ellos en posición de fuerza para golpear militarmente o con el surgir del fascismo que, finalmente, de un corte de raíz al entero proceso y regrese a la sociedad a sus viejos bemoles de capitalismo salvaje…disfrazado, travestido… tal vez… pero lo mismo que se quiso destronar.

En este contexto lo más Revolucionario está en la exigencia y propuesta de Mayor Democracia y real modos de Participación, en una Nación pluri cultural y plurinacional, con pleno y expansivo Estado de Derecho en términos modernos, y con un Plan de relación con el EcoSistema radical, profundo y definitivo…cuya concepción del Ser Humano sea Integral y Plena y no esclavizada a normas religiosas oficiales o valores parciales impuestos.  En donde el Ser Humano y la Naturaleza sean los centros definitorios de todo el proceso de desarrollo. Y en donde el Estado Democrático garantice la Integralidad del Hombre como Ser mental, como ser emocional, como Ser físico con propias exigencias, y como Ser Espiritual y Creativo. Porque Hoy la revolución pasa POR LA PERSONA HUMANA y por una profunda Revolución Ecologista.  Y eso conlleva a la verdadera libertad. Y esa revolución requiere de personas liberadas de esquemas y paradigmas ya consumados y obsoletos. Y ese Cambio sí debe ser radical y revolucionario.

Nada nuevo en el Cambio

Cada generación humana, en su nación, pueblo, continente o realidad concreta ha sentido y creído que lo suyo, lo propio, lo que a ellos y ellas toca vivir e interpretar, es único, excepcional y trascendente. Y bien que esto sea así, porque si el conglomerado humano no enfrentara su realidad con esta percepción de urgencia y vitalidad perdería vigor, carecería de fuerza, mermaría su interés y no se concebiría a si mismo cuan elemento fundamental para la continuación de la especie y su desarrollo.

Gracias a Dios porque los Hombres hemos sido dotados de capacidad de análisis, de discernimiento, poder de crítica y de un buen bagaje para atesorar recuerdos colectivos y personales. Y esa Virtud no nos permite justificarnos en lo natural de los instintos (para aventurar en la vida sin un proyecto o propuesta evidente y clara) o en la flojera de no pensar, o en la inercia del ímpetu del presente como si, – como Hombres, y como pueblo- hubiésemos nacido recién ayer: cuando esta generación entendió que debía cambiar su condición política, social, cultural, o elevar y superar su concepción de fe.

El revolucionario se distingue por su capacidad de mirada histórica, en donde los efectos de hoy provienen de Causas pasadas, y en donde si hay algo vetusto ahora es porque en su día ese mismo fenómeno o cuestión fue nuevo o novedoso. Y así como en pasado hubo urgencia de Cambios para implementar lo nuevo, así hoy es una emergencia igual de apremiante Cambiar eso mismo que ya demuestra agotamiento, obsolescencia y en su anquilosamiento comienza a convertirse en escollo y freno, desigualdad e injusticia.

El Conservador siempre intentará mantener los privilegios o particularidades convenientes que el régimen ya decadente entrega a unos pocos: porque todo sistema humano genera resultados que en algún momento crea intereses y afecta a otros, y los beneficiados conforman oligarquías, y los rezagados mastican su miseria hasta que se rebelan e inician un nuevo giro de mutaciones necesarias. Y al moverse: chocan con el muro conservador, y se abren callejuelas liberales o reformadoras que apuntan a mantener el statu quo bien cimentado en sus pilares, con tal de que el Cambio no se verifique.

En esta fenomenología social y política no hay izquierda o derecha: pues la historia nos muestra que la consecuencia del poder y de los procesos trascurridos generan castas y residuos oligárquicos sin importar si la ideología que se proclama es de derecha o de izquierda.

La contradicción verdadera está centrada en el eje: Revolucionarios-Conservadores.

El Revolucionario no acepta un estereotipo, porque de estrechar la idea misma de ‘Ser Revolucionario’, ya concede que no es revolucionario. El Revolucionario posee un principio apegado a una Ley de la vida: El Cambio. Postula a que el Cambio apunte al Progreso, a la superación MEJORADA de la realidad, a la solución de aquellos elementos de injusticia, desigualdad y tipos de esclavitud que cercenan la índole superior del Ser Humano.  Es decir, hay una Visión, un Proyecto de Hombre Nuevo que en su conjunto logre conformar sociedades en donde, por ejemplo, la pobreza no exista, y el trabajo sea sinónimo de dignidad, y los derechos constituyan la base sagrada de la Libertad.

La historia nos muestra, con evidencias majaderas, que cuando el capital y el mercado se transforman en la sustancia divina de una sociedad, lo que prevalece es la esclavitud; y si hay rasgos de esa lacra es porque una alcurnia social goza de esa miseria inhumana. También nos muestra la evidencia que los intentos por someter el capital y el mercado al pleno control del Estado genera un ‘capitalismo de Estado’ y la conformación de capas burocráticas, hambrientas de sustento que se extraen del pueblo trabajador… haciendo brotar otra arista de la misma esclavitud en alguna de sus formas.

Hoy en América Latina vivimos un periodo prerrevolucionario. Los Conservadores solamente ven complots internacionales, terrorismo de grupos acráticos, el fantasma del comunismo que ellos mismos sacan de los sarcófagos, vándalos y delincuentes, etc. etc. Los liberales aceptan aspectos de injusticia y necesidad de reformas, pero no de Cambios. Los Revolucionarios saben lo que ya no quieren…pero no saben con certeza aquello que quieren. Y mientras la parte revolucionaria no tenga un horizonte mínimo que aúne voluntades: verá fracasar su salto al futuro.

Un transito prerrevolucionario es una transición inestable y plena de peligros. Podría culminar en un golpe de carácter represivo, un gobierno autocrático, una asonada fascista y años de dictadura, o un pasar por el populismo que destroza los márgenes de la moral revolucionaria y lanza a las izquierdas al barranco de las aventuras, o – siendo gobierno- de las prácticas mafiosas, o del absurdo nepotismo y de dominio personal y la sublimación de la personalidad por encima de los Derechos del Pueblo. Por lo mismo es imprescindible que dicha transición deba ‘pasar rápido’ y empujar la realidad hacia un campo de Visión y Proyecto que aclare las alianzas políticas y ponga a los conservadores lo más arrinconado posible y bien aferrados a sus privilegios y defendiendo sin tapujos a su sistema de injusticia.

Para lograr aquello es urgente determinar que LA DEMOCRACIA como un Principio de Gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo debe superar y enterrar los modelos restringidos y tutelados que ha impuesto el mundo conservador; y debe establecerse una Nueva Democracia bajo patrones de gobernabilidad que garanticen la soberanía y el mandato del pueblo, y den al país una estructura de Estado abierto y transparente imposibilitado de fomentar en su senos sesgos de castas y privilegios, abusos y corrupción. Una Democracia en donde el sistema de Plebiscito y Referéndum den al pueblo el instrumento de poder para ejercer fiscalización y provocar cambios consensuados. Un sistema en donde el capital y el mercado- por ahora- se colocan bajo reglas jurídicas claras en donde se garantiza la libre competencia, la inversión, la ganancia, pero en donde se elimina la especulación, la usura, las formas de esclavitud moderna, los salarios de hambre, las exenciones abusivas, la explotación territorial sin compensación, y en todo: salvaguardando el Medio Ambiente y respetando los planes de desarrollo verdes bien establecidos según modelo de una ECO DEMOCRACIA.

Un Estado y una Sociedad que garantiza el derecho a la vivienda Digna por Mandato Constitucional. Un sistema inteligente que garantiza bienestar al pueblo que llega a la edad de su retiro laboral. Un sistema de Salud publica de alto nivel. Un sistema de investigación, innovación y ciencias que impida dependencias de potencias extranjeras. Unas Fuerzas Armadas y policiales basadas en Principios de Salvaguarda de su Pueblo, con pleno apego a la Constitución, bajo formación democrática y respeto a los Derechos Humanos. Es decir: empujar esta Democracia hacia su máxima expresión y capacidad, en modo que logremos ver más allá de los horizontes ficticios que el conservadurismo nos ha dibujado y de paso nos amenaza con todos los males apocalípticos si nos atrevemos a romper con la falacia impuesta.

Cuando los Revolucionarios den una Visión, un Proyecto y una plataforma al CAMBIO: entonces el Salto será posible, y nada podrá impedir que Lo Nuevo inicie su periodo largo de constatación… hasta el día en que otros Cambios serán necesarios y la revolución deba proponer proyectos y dar Visión a las mutaciones para que ese porvenir también sea una realidad.

Por siempre revolucionario

Cuando creía en las posibilidades que supuestamente brinda el sistema del Mundo, y confiaba en la capacidad de bondad y de voluntad constructiva y de justicia del Hombre: luchaba por la libertad, por la Justicia y por poner fin a la miseria y a la pobreza. Aborrecía a las tiranías, me indignaban los abusos, me rebelaba ante la tortura y el cinismo político de los oligarcas. El capitalismo y sus injusticias y el mercado dios con sus consecuencias perversas me provocaban un profundo sentido de insurrección en mi alma.

Creí entonces, como muchos en mi generación, en el socialismo, y postulamos a la revolución incluso con las armas y emprendiendo aquel camino que creíamos entonces imprescindible e inevitable: el de la violencia revolucionaria. Cuando recorrí el mundo y viví la guerra, y reporté la realidad que luego los Medios no publicaban o lo hacían convenientemente, y pisé el suelo concreto del socialismo en sus diversos efectos y realidades, y pude corroborar que en realidad el Hombre no posee esa bondad que yo le endosaba, ni era esencialmente constructivo; y retorné a mi país a combatir a la tiranía… caí en cuenta que había vivido en una mentira, y que el sistema de este Mundo está construido para esclavizar y no permitir una visión superior a la que ya está programada.

Ahora sigo siendo revolucionario: creo en la Ley del Cambio y nunca tomaré partido en el conservadurismo que intenta frenar el progreso y la transformación debido a sus mezquinos y pequeños reinados de castas; y soy Cristico y desde mi coherencia de Fe me opongo a las religiones por ser ellas parte activa del sistema opresor Mundano que coarta la libertad de conciencia de las personas Espirituales. Y atesoro la Libertad, la Justicia y la Democracia como PRINCIPIOS de Vida y no solamente cuan postura política militante o temporal. Y estaré siempre en contra de toda y cualquier tiranía, contra todo régimen que aplaste los derechos y que imponga cadenas al pueblo, y haga de su causa particular una supuesta ‘revolución’ mentirosa y esencialmente oligarca.

Ahora creo en el Hombre que se Construye en su Coherencia, creo en la Fe de quienes luchan por su verdad y lo hacen desde la justicia, la mesura, la libertad y la SABIDURIA. Hoy postulo a Revolucionar la Fe del creyente: porque esa creencia y esa fe están contaminadas y sirve al mismo plan mundano que somete y esclaviza al Hombre y coarta su inteligencia y Espiritualidad.

Me sigue indignando la pobreza. Me sigo rebelando en contra de la tortura, de los abusos, de la violencia institucional, de la insensible y abusiva burocracia; y me sigue causando un estado insurreccional interior la mediocridad, el populismo, la estupidez, el acérrimo dogmatismo, el fascismo en sus distintas expresiones, el autoritarismo cobarde, el maltrato y violación de niños y niñas, la violencia cavernícola en contra de la mujer, las oligarquías y los privilegios, los mentirosos de las noticias falsas y aquellos políticos burdos y ladrones (que por lo mismo: mienten), los corruptos y la corrupción, las iglesias y su parafernalia engañosa, la ignorancia voluntaria, lo baladí y la superficialidad de los milenios, el fundamentalismo y su falta de bondad.

Hoy me fastidia la violencia por considerar que es la acción de quienes no tienen la razón y carecen de firmeza política. Y me duele la violencia de la delincuencia – la de cuello y corbata y la del montón- porque nos dice que no hemos roto la línea de las cavernas y de la prehistoria. Y atesoro la Paz como un Valor imprescindible que debe ser fomentado desde la Verdad de la Persona, desde la Conciencia Humana, desde la Coherencia de Vida.

Sigo aborreciendo al dios mercado, y postulo a que éste sea colocado -(¡ya no cuan dios! sino como instrumento) – bajo las necesidades e intereses de las personas reales y en concordancia con el cuidado de nuestro planeta y medio ambiente. Y no he cambiado mi rebeldía en contra del Capital como centro religioso al cual el Hombre debe someterse en calidad de esclavo… sacrificando su más esencial cualidad de Hombre Libre. Eso es abominable.

Hoy soy Cristico, y con humildad llevo conmigo los Sellos del Sacerdocio Cristico; soy un firme discípulo de la Sabiduría que me enseñó y me sigue instruyendo el magnífico I Ching; y en mi corazón voy atesorando lo profundo y virtuoso que el budismo impregnó en mis células. Postulo y lucho por un mundo nuevo, por la superioridad del Humano mediante su Camino Espiritual; y trabajo para que la Sabiduría y la Espiritualidad sean el idioma y mentalidad del Hombre Nuevo. Soy revolucionario, por siempre.

‘Traigo la Espada’

¿Está el Hombre preparado…? o mejor dicho: ¿tiene el ser humano la voluntad y decisión de asumirse cuan Ser Espiritual antes que Carnal?

No dudo sobre la capacidad, y menos guardo reservas, sobre la potencialidad del Espíritu en el Hombre, sino que me refiero a esa Opción de Conciencia que se basa en una simple introspección de sí mismo. ¿Tiene el Hombre la sabiduría innata para ‘observarse’ y discernir aquello que Es? Por inteligencia, racionalidad y posibilidad de su condición humana: Sí. Por cultura, educación y realidad social: No. ¿Y quién forma y diseña, resguarda e impone el modelo y el sistema que no permite ni incentiva al Hombre a esta urgencia primaria de auto observación y de propio discernimiento? El Mundo. El Mundo no es el planeta, sino un régimen construido por el Hombre desde su naturaleza oscura y deseos de Poder.  Y como el Bien y el Mal existen y son una Ley que rige como Jurisdicción de la conciencia humana, entonces toda elección en el modo de vida se mueve necesariamente sobre esta polaridad de Bien y de Mal;  tenemos que concluir, a la luz de la historia y de los hechos, que la tendencia prevalente ha girado la balanza hacia el Mal; sin embargo,  la inteligencia del Hombre -y su psicología de la ambivalencia que disfraza los engaños- ha travestido de ‘bien’ y  de ‘necesario’  y hasta de ‘normal’ una construcción social y de vida evidentemente injusta, esencialmente esclavista, preponderantemente violenta y de todos modos contraria al sentido natural del entorno con el cual comparte este planeta,  el que funciona bajo leyes opuestas a la forma de concebirse a si mismo el Hombre Actual.

¿Cómo, en este sistema Cainita, y bajo un régimen que impide toda libertad de discernimiento y trascendencia, un Ser sensible y espiritual podría desarrollar su Camino? ¿Cómo el simple Ser Humano, y todo Hombre, podría recibir el incentivo de entender de qué está hecho, y en qué consiste su persona, si la maquina mundana impone sus parámetros impertérritos y amurallados que aplastan cualquier pensamiento critico o posibilidad de auto observación y libertad de opción espiritual? ¿Cómo hablar de Dios desde el Espíritu en la Persona si las religiones se han apoderado de todas las ‘esferas celestiales’ reales o inventadas?

Y porque el resultado de esta realidad mundana no arroja una marea de libertad y de Seres libres que optan según conciencia, sino olas de ‘verdades individuales’ que chocan entre sí y se organizan en alianzas políticas e ideológicas o dogmáticas para avasallar a otros en una danza perversa llamada ‘control mediante el abuso de poder’. Entonces entendemos que el Mundo en el que nacemos ya está ‘programado’ para hacer de cada Ser una parodia que irradia diversidad y pluralidad mentirosas pero que, en definitiva,  lleve agua al único molino que manejan los pequeños dioses que gobiernan desde las sombras a un mundo fabricado por sus ancestros Cainitas, y que deberá permanecer  mientras les nutra y sostenga a ellos, y deberá desaparecer cuando sus mezquinos propósitos no sean complacidos ni satisfechos.

Una inocente auto observación que pudiera ejercer el Hombre desde su edad de conciencia conllevaría a demandas sustanciales: ¿Por qué tengo este cuerpo y no otro? ¿Cómo funciona este cuerpo? ¿Por qué pienso? ¿Cómo se arman mis pensamientos? ¿Por qué puedo hacerme estas demandas? ¿Por qué siento? ¿De dónde viene la emoción? ¿a qué sirve? ¿Qué es el Alma? ¿Dónde está o cómo se mueve el Alma en mí? ¿Qué rol cumple? ¿Qué es el Espíritu? ¿Cómo hago para conocer a Mi Espíritu? Y si Yo Soy: Cuerpo y Mente, Alma y Espíritu: ¿Cómo haré para Discernir mi Índole y la razón de mi existencia? porque sin comprender aquello que me integra y me compone cuan Ser Inteligente nunca seré ‘Persona’.

Sin claridad de aquello que somos es imposible que se establezca La Persona en plenitud cuan Ser Consciente de Si Mismo; entonces, lo natural sería que desde temprano se nos enseñara, a los Hombres, a Discernirnos a Nosotros como a Seres con leyes propias, en nuestra calidad humana en medio de un entorno diverso y complejo. Pues sabiendo quienes somos podremos Discernir a la vida que nos rodea y al mundo del cual hacemos parte. Porque si entendemos desde niños que somos Personas bajo leyes naturales según nuestra calidad humana, entenderemos que otros seres vivos se hallan bajo otras leyes inherentes a su cualidad, y tal distinción redundaría, sin duda alguna, en un acto de mayor sabiduría y de interrelación entre las especies con pleno conocimiento de las distintas leyes naturales moviéndose en el planeta.

No sabemos quienes somos. Nadie nos enseñó a Discernir, ni autoobservarnos, ni a conocernos. Y desde que entramos en la razón nos vemos en espejos construidos como hormas para hacer de cada uno de nosotros un perno más de un engranaje ya establecido según la conveniencia de la casta que se beneficia del ficticio sistema. Y así, un Ser en grado de Discernir, cuyo origen es divino y contiene un potencial superior, ahora languidece subyugado por un molde criminal; y si acaso se integra a un ejércitos y muchedumbre de necesitados e implorantes de las migajas consumistas, o se agota persiguiendo el arcoíris de la auto realización… todo muy bien administrado por los entes autoritarios que nunca permitirían una ruptura en sus esquemas de poder y privilegio.

Las sendas artificiales que se abren ante el Hombre, enclaustrado en el sistema mundano, parecen ser variadas y democráticas: carreras y oficios, emprendimientos, expresión de arte y cultura, ciencias, religiones, política, deberes sociales y familiares, capacidad de adquirir cosas, propiedad, libertad formal según marcos de derechos relativos…etc. Y esto que parece ‘tanto’ y ‘tan diverso’ es en realidad una sola huella que conduce al mismo y único propósito: que el Hombre se mantenga entre los márgenes trazados, sirviendo a los objetivos estratégicos y vertebrados del sistema, y genere ganancias e incentivos para fomento de las riquezas de los gobernantes en alturas auto concedidas.

Dos columnas portantes han sido útiles a esta ficción del Mundo construida para engaño de nuestra inteligencia y potencialidad: el dinero y la religión.

Toda religión tiene por dios al dinero, y el dinero es sí mismo una religión acérrima y tiránica que posesiona y encanta. El dinero no es solamente ‘la plata’ o la ‘moneda’ sino que el concepto del dinero es el medio casi mágico que permite ‘obtener y retener’ y ‘ejercer poder’, y crea apego inconmensurable, y gobierna la vida física, social y emocional del humano víctima del sistema. Y lo del apego y el endiosamiento y la DEPENDENCIA son factores intrínsecos que el dinero requiere para ser el centro del Reino de este Mundo. Y cuando el poder supuesto de dios debe demostrarse con institucionalidad potentada y bien cimentada en sus finanzas, debe por obligación de Poder, alzar construcciones de alto valor y lucir riquezas que un humano común jamás podría siquiera imaginar: entonces es cuando la religión centra su divinidad en los productos del dinero y en la gestión del poder que de éste emana.

Bajo esta realidad, el Hombre es mantenido esencialmente ignorante de Si Mismo, mirándose en los reflejos de otros, en fantasmas de logros que se esfuman con la vejez y en la enfermedad, y sin respuestas ante la muerte. Y como nunca supo del potencial superior que siempre fue y ES: encuentra lógico que la vida sea un pasar por las luminarias de una falacia que nunca da respuestas y vacía todo sentido de existir. Entonces ‘las cosas’ pasan a ser vitales, y los afectos pudieran ser la única prueba de sabiduría o de estupidez por la cual somos medidos. Y no hay más.

Quizás algo interno y extraño sopla a la inquietud interior…que ‘esto’ no puede ser todo, ni es verdad todo aquello que la persona cree y le han enseñado o inoculado desde los pulpitos mundanos.

Pero también ‘la búsqueda’ podría hace parte de una senda ya programada. Hay ya un sentido bien planificado por la maquina Cainita para los rebeldes e inquietos que ‘buscan respuestas a un llamado interior’. Ese programa específico, que desvía y engaña a los pasos de ‘la búsqueda’, es el Ego.  

El Hombre puede cuestionar a la trama hasta en su más ínfima transmisión, y eso ya sería un salto revolucionario casi rupturista, y peligroso para el duro dictador sistémico; pero si esa salida de madres se hace desde y con el Ego: lo cierto y seguro es que ese Ser de algún modo volverá al régimen por uno de sus vericuetos: el de los místicos útiles, o el de los libres pensadores que jamás mueven una hoja al entramado mundano. Porque el Ego no es solamente ese reflejo mentiroso del yo mal concebido y siempre mundano, sino que es un poder falaz que lucha por fijar un centro propio de poder y de ejercicio de influencia: y eso no necesariamente es individual siempre, también suele ser grupal, orgánico y sectario.

Al igual que las franjas contestarias que se fueron entrelazando en estructuras sociales y políticas en contra de aspectos del sistema, y finalmente condujeron o hicieron de propio una revolución o dieron un golpe a las infraestructuras debilitadas del régimen y se hicieron del Poder. ¿Hubo bajo estas nuevas gobernanzas una mutación sustancial del Ser Humano y de su identidad como Ser Superior y de inteligencia en grado de revolucionar la realidad? No. Hubo sí repetición de males equivalentes, conformando una nueva maquinaria con idénticos propósitos dirigidos a flamantes castas de novatos privilegiados… incluso peor que la anterior, y al final parte del mismo programa.

Bajo este cuadro: ¿Cómo convencer al Hombre de su gran potencial espiritual? ¿Cómo proceder si cuanto se explique y cómo se hable ya todo está contaminando por una cultura de apostasía innata y de relativismo oportunista que ha castrado al Hombre de su capacidad de Compromiso?

Decimos: no hablaremos de religión, no construiremos una iglesia, no fomentaremos secta alguna, no haremos política militante, no nos basaremos en la social o en lo cultural, y no se trata de ‘solucionar’ asuntos de sobre vivencia, de dinero, de cosas o de haber; tampoco de hallar la felicidad emocional o la seguridad familiar, o de evitar la vejez, o nunca enfermar… y menos burlar a la muerte del cuerpo que inexorablemente perecerá. No reafirmarás a tu Ego ni hallarás aquí la fórmula para hilvanar la madeja mágica de la auto realización en este Mundo.  ¿A qué sirve entonces tu Camino?

El escollo mayor no es que la gente en general no comprenda la propuesta que los libera del Mundo y de su maquinaria malvada, sino que la traba se presenta cuando quién guía y enseña esta salida no está completamente libre de  las influencias mundanas,  y en el fondo de su Ser sigue anidando al mundano que ama en secreto;  y esto significa que aún espera soluciones imposibles de parte del viejo régimen que dice aborrecer, y del cual jura haberse librado, a saber: que la liberación y la trascendencia no quiebre los  tramposos equilibrios profanos o bien que el gobierno de ‘lo nuevo’ esté firme en manos del imperio del Ego.

Si una fuerza divina, Superior de todos modos, debiera introducir su bendita y benéfica cuña para comenzar a liberar al Hombre de este mundo, y bajo el yugo del Mundo, ésta no haría demostración manifiesta de su poder: porque entonces los Hombres seguirían cuan becerros a ese señorío sin ocuparse de su propia evolución y menos se empeñarían en la Conciencia de su Propio Salto y Cualidad. Y el objetivo mayor es que el Hombre desnude la verdad que YA se encuentra en su Índole y Origen. Y si toda vez que a un Hombre se le ayudase a su liberación -para que asuma su superioridad innata y espiritual- el resultado fuese que el Ego,  al fin,  tomara posesión de esa labor…inevitablemente se fomentaría otra religión, otra corriente, otra arista en grado de ser absorbida y archivada por la capacidad de la maquina…Entonces ¿Cuál es la solución para derrotar al Mundo y abrir una brecha que permita el enraizamiento de una siembra de libertad y nueva realidad Espíritual?

La intervención, de las esferas superiores, en este mundo es un asunto sumamente delicado y frágil en su esencia. La divinidad interventora debe tomar la calidad y la forma del Hombre, y desde la condición de ‘Hijo de Hombre’ acudir al Espíritu, al Alma y a lo más puro de la mente de algunos Seres que luego serán los sembradores de la transformación que en ellos y ellas se constata por primero.

Pero para facilitar dicha Herencia es menester crear las condiciones de vida que favorezcan la aplicación de los caminos que se propone; como ejemplo: si la muerte era un factor de caída a un abismo de olvido que empujaba al retorno a la carne en otra existencia con la misma deuda, aquello, esa realidad, era sustancialmente opuesta a cualquier acto de liberación. Cambiar esa realidad era entonces primordial.  Que las esferas celestiales estuvieran cerradas para los Hombres: era un freno que favorecía al principado opuesto que tenía potestad sobre los destinos del Hombre. Cambiar esas leyes de vida era fundamental para que el camino planteado tuviese asidero y resultado.

Ahora, ya cambiada la realidad del Hombre por el Hecho Cristico, éste ahora posee un Espíritu pujante y dispuesto a gobernar, un Alma disponible para unirse al Espíritu para conformar una sóla fuerza, una mente amplia que puede ser Iluminada por su Espíritu y recibir magisterio desde las instancias Superiores a este mundo.  Desde la Gran Mutación Cristica la muerte ya no es absoluta sino ‘solamente física’, y el Hombre cuenta con la garantía de que la Conciencia, y el Alma, y el Espíritu, (y todo lo que por Conciencia, Alma y Espíritu la mente natural pueda reunir y atesorar) siguen y continuarán vivas y conformarán al Nuevo Ser  engendrado de aquel Ser Humano Carnal que ahora ha pasado a una etapa superior y distinta de vida. Eso es lo que se entiende por ‘derrota de la muerte’ y se conoce como Ley de Resurrección.

Si el objetivo es que el Hombre recupere su calidad divina: ese es el camino abierto para ese Gran Logro.

Esta gran buena nueva fue deteriorada, tergiversada, escondida y apostata por quienes mucho más tarde dirigieron a esta herencia liberadora por las torcidas vías del Ego, de la religión, del Poder mundano; e integraron sus caminos a la maquinaria del sistema de la perversión. Ahora el Mundo tiene a sus dioses y ha inventado a un dios a su medida y forma, y así los incautos ruegan por cosas del Mundo a esas divinidades artificiosas.

¿Qué hacer entonces?

Intervenir acercando los Poderes Superiores Cristicos sobre la matriz de este mundo, produciendo mutaciones invisibles cuyos efectos el Hombre conoce en sus expresiones y manifestaciones pero no logra comprender en sus Causas y Orígenes. Y crear un intersticio de luz y de nueva herencia para que los Hombres siembren cuan agentes de un Bien Superior en medio de un régimen de sombras y potestades mezquinas y tiránicas. Esa ha sido la respuesta de Lo Superior. Eso ya ha acontecido.

Colisionando la realidad supra terrenal, -fuerzas invisibles pero reales en su poder Superior-, se producen consecuencias radicales en el mundo y entre los Hombres, y afectan al andamiaje del sistema del Mundo: es el Tiempo de la Tribulación. Y este Tiempo de Tribulación señala un Cambio impostergable que no se detendrá, y es un llamado para que el Hombre se libere y logre su ascenso por propia fuerza: y eso marca a fuego que la condición de La Gracia está culminando su dádiva porque el ciclo anterior (El Meridiano de los Tiempos) se ha agotado.. Esta realidad equivale a un Juicio.

Si uno, tres, doce o varios varones y mujeres recibieren de Lo Superior las herramientas para su liberación, y se les concediera poderes y sellos desde lo alto… y en lugar de liberarse a si mismos con esta gran ayuda se quedaran exigiendo los supuestos beneficiosos prometidos por las religiones, incentivados por las metas del Mundo y las creencias inculcadas por la maquinaria Cainita: ¿cómo serían calificados?

Y si quienes liberados por lo Superior se hicieran de lo recibido para el logro de la meta engañosa de la auto realización ¿Qué serían?

O si una vez pactado un compromiso con lo Superior simplemente se echaran a dormir el sueño de la espera para recibir beneficios sin cumplir con el sacrificio de la transformación: ¿Qué tipo de seres serían aquellos?

¿Qué hacer para guiar  la senda liberadora? Comenzar por abrir la conciencia sobre la composición del Hombre, del valor de su Espíritu y de su Alma; también dar luz sobre la realidad de este Mundo; y abrir el Plan Superior para liberarse y vivir colocando la mirada en el porvenir de la trascendencia y del justo paso por la muerte, para nunca morir y vivir en el Nuevo Ser: y en pos de tales propósitos superiores CONOCERSE en lo superior de Sí Mismo: EL ESPÍRITU, el Ser Espiritual antes que Carnal;  y asentar toda virtud para  servicio de una siembra que abra por fin la brecha que provoque la crisis de este Mundo e instale en su terreno oscuro el faro de luz que haga caer a este sistema perverso… y de paso convertir al Humano común en un Humano Superior… ¡eso e posible, es necesario y es urgente!. Es lo que se debe hacer.

Y para llevar a buen término esta gran tarea de vida es imprescindible que quién abre los caminos sea ya una persona liberada desde su interior, desde su convicción, desde su propósito de superación permanente, desde su confianza, desde su fe, desde su Poder Espiritual. Porque si quién debe abrir brechas de luz en medio de una maquinaria de oscuridad poseyese simpatías innatas o secretas con(por) su viejo sistema: al final, inevitablemente sería consumido por la maquina que bien reconoce a los suyos y mejor sabe  manipular los deseos de quienes se les escapan…pero que aún le pertenecen.

Y tales simpatías se disfrazan de intenciones buenas, que para ‘mejor sembrar’ y ‘facilitar el cambio’: que por sensibilidad social, que por necesidad política, que para no quebrar la cultura, que por no pasar a llevar las costumbres, que por comprensión de las necesidades, que por humanizar lo espiritual, que para tener más personas en torno, etc. etc. Y por tales ‘buenos propositos’ se concede al Mundo su espacio en lo espiritual, nuevamente negando el Valor de lo Espiritual para vestirlo de religión y vaciando el Sentido de la realidad Superior:  ilusiones que conllevan a negar la liberación; y esos cantos de sirena además adormecen el ímpetu del guerrero y para peor llama a los virus del sistema a que vengan rudos por quién aún se siente parte de su entramado.

Desde el Hombre y las respuestas que el Ser Humano debe integrar a su Conciencia; y desde la identificación del Tiempo que vive la humanidad; y explicando el Plan de Lo Cristico aplicado y en ejercicio con ejemplos de rectitud y coherencia; para llegar al Compromiso con la propia liberación inserto en un Plan de Consagración  que es garantizado por fuerzas Cristicas altamente Superiores … llevando al Hombre a un sentido de realidad sin temores, aunque crudo en su verdad… esa es la forma y el itinerario en que un Ser Humano ya liberado, y actuante cuan agente de cambio, debe llevar a cabo su acción constante y disciplinada en su afán por sembrar El Cambio y la Espiritualidad en muchos Hombres.   Y como tal acto es un Mandato acordado con Fuerzas Superiores Cristicas: no serán los efectos vivenciales en cada persona solamente causa de la labor de quien Guía, sino que habrá una respuesta correlativa desde lo invisible y espiritual que ayudará a iluminar la conciencia en quién recibe. Es una Alianza de Intervención directa.

¿Cuál es el problema o la debilidad con este excelente Plan? Que quienes reciben sellos y liberación, poderes y llamados, y fijan alianzas y juramentan compromisos: sigan siendo en su verdad interior hijos o hijas de la máquina que los deformó y los esclavizó por generaciones. Y al final: la maestría que debía conformar núcleos de discípulos prontos a liberarse…termina sumergida en el Ego, o en la esperanza de un mejor retorno al Mundo que los castró de toda espiritualidad. ¿No es eso una paradoja?

¿Y si no es al Mundo que quiere retornar, sino que pretende imponer su versión del Ego sublimizado cuan panacea de ser aceptada e integrada como parte del camino de liberación?  Entonces todo estaría perdido, y la apostasía volvería a triunfar sobre la lealtad e integridad humana.

Es cuando el valor y la abnegada lealtad de Uno que lucha y se ENTREGA logra mantener expeditas las puertas del Cielo para muchos: porque de Uno o de algunos que mantienen la brecha abierta, cuan herida al costado del Mundo, es la Victoria de Lo Superior de la Luz sobre las potestades de este Mundo; y tal lealtad y perseverancia es altamente valorada por las Fuerzas Superiores Cristicas: porque mientras la daga  esté clavada cerca del corazón del sistema, habrá siempre posibilidad de que Lo Superior empuje al moribundo principado mundano por el barranco del olvido…para siempre.

A 21 años del siglo 21

Imaginábamos en los lejanos 1960 – 70 que al alcanzar la humanidad el fin de siglo e inicio del sublime siglo 21, las sociedades habrían ya superado sus aprendizajes y errores, que en el siglo 20 desembocaron en dos guerras mundiales y en una no menos cruenta ‘guerra fría’.

Parecía que las pandemias y pestes eran remembranza de un mundo de atraso que por fin se había superado, el consumismo ahora sustituía a la época de las necesidades: signo de la abundancia de los tiempos modernos, según creían muchos. Lo más difícil de superar y desterrar: la estupidez… ya no era un asunto político para considerar, ni hacía parte de esta generación tecnologizada e inicialmente robotizada. Incluso los temores de una catástrofe climática, tan avisada en los últimos 50 años del siglo 20, ahora, casi por milagro de la post verdad, simplemente desaparecía del radar publicitario y cesaban sus congresos y simposios que acordaron puntos que nadie respetaría, o no concordaron en nada y sólo hablaron demasiado e hicieron muy poco. Eso, hasta que la naturaleza misma se ha encargado de demostrar que esa crisis existe, que está en su pleno desarrollo y que continuará su hecatombe hasta eliminar las causas del mal y a sus autores.

En este salto actual se ha roto, nuevamente, la lógica lineal del desarrollo y de la evolución. La realidad no es un acumularse de hechos que derivan en otros efectos. Encerrados en esta franja de Tiempo, y consecuencia del Tiempo que nos condiciona, no logramos concientizarnos de la verdad: que estamos en una especie de sueño de algún sistema virtual llamado Creación, muy bien estructurado por fuerzas que identificamos como divinas. Las leyes del cosmos y de la materia, de la naturaleza y del Hombre se hallan regidas por códigos y cánones ordenados para el Logro de fines que nos resultan imposible de descubrir (no al menos como hoy estamos) y mucho menos concebir y aceptar.

Y en ese Plan nuestra ‘evolución’ se produce y está determinada por Saltos, no por desarrollo lineal y acumulativo. Y son estos Saltos los fenómenos cíclicos que conducen a la especie a niveles de mayor conciencia y uso de su inteligencia, o a la caída en la oscura ignorancia y exagerado uso de su bestialidad.

Y será de acuerdo a cómo el Hombre asume la libertad que se le concede, -al buen uso de la capacidad e inteligencia de la cual es dotado, y el rol que juega en el programa de la Creación (si Destructivo o Constructivo) – aquello que finalmente determinará su destino y la condición de Tiempo que deriva de sus actos y opciones.

Estos primeros años del siglo 21 nos muestran con evidencia irrefutable que nos hallamos envueltos en un sismo de mutación que se nos presenta como una Suscitación y Tribulación que está reculando la rueda hacia viajes retrógrados e involutivos que dejan al desnudo nuestra incapacidad de entender los mensajes y advertencias que por millares aportillaron los sordos oídos de los Humanos. La ignorancia y la estupidez, la sin razón de la fuerza bruta, no solo pulula por las calles de las metrópolis del mundo, sino que elije gobernantes y legisladores, jueces y sistemas económicos nefastos, injustos, corruptos e incomprensiblemente atrasados según el contexto de la historia; y entrega coronas eclesiásticas y religiosas a las más baja  pasiones, y ha reflotado una practica cavernaria que nos empuja de vuelta al foso: las guerras religiosas, y con ellas ha resurgido de sus agujeros abismales el fascismo en sus diversas formas y colores, y la cultura nazista con sus nuevos engendros, y el fanatismo que coloca a Dios en cada parte de su oscura intención.

En la hora de las tinieblas brillan los que en la normalidad de la inteligencia media nunca tendrían espacio en la gobernanza de una sociedad seria y digna; y ahora son los líderes de la monada: una monería atrevida y audaz que encubre su cobardía en la pandilla, en la muchedumbre amenazante o entre la abrupta jungla de lo virtual. Y estos remilgos populistas no esconden su magra politiquería, porque han hallado un terreno a plena disposición, debido a que la inteligencia y la cordura, la espiritualidad y la sensatez, la misericordia y el sentido de la paz, lo constructivo y democrático, se ha retrotraído sobre sus bondades y ha caído en la autocomplacencia, y ha dejado de creer en sus proyectos y ha cedido su espíritu de combate porque no ha tenido la osadía de renovarse, de revolucionarse, y de superar los intentos del pasado y aprender de éstos para no repetir sus yerros y caídas. Como si todo lo bueno que se puso en practica con la debida carga ideal de finales del siglo 19, y bien diseminado en los surcos del siglo 20, con sus altos logros y sus evidentes triunfos sobre el mal y sus tiranías, simplemente demostrara que nada de lo Bueno valió la pena… ni con el peso de sus muertos ni con la esperanza de los vivos. Como si lo virtuosos pagara mal y la maldad retribuyera con creces; un ‘todo está perdido’ que entrega a lo más bajo de la sub – naturaleza humana el Mando de nuestras vidas, por sobre- (y a pesar)- de la potencialidad divina del Hombre bueno.

Desesperados podemos otear a viejos planes y propuestas que en su día sonaron a esperanza y dieron luz en los túneles del oprobio. Como, desde veredas contrarias, hacen los hirsutos: desempolvan añejos fantasmas y los reviven como tropas infernales disfrazadas de novedosas propuestas. Quizá ese ejercicio pigro y abúlico de escarbar en lo pasado sea menos agotador y estresante que esa incierta vía de introducirse en la realidad para arrancar soluciones de futuro. Porque los esfuerzos del siglo 20, en cuanto y en tanto evitar el desastre ecológico, estuvieron plenos de respuestas y reacciones, pero no hubo voluntad de cambio que descuajara la raíz económica de un sistema perverso, egoísta y voraz. Y no la hay hoy. Y si políticamente seguimos colocando fichas de esperanzas en trazos caducos de lo pretérito, como si hubiésemos agotado nuestra creatividad y la capacidad de ‘imaginar y pensar’ aquello que ha de venir y los propósitos que queremos alcanzar… entonces, tal vez, merecemos la arremetida de los antropoides que nos gobiernan, legislan y nos arrullan con sus predicas repetitivas, cansinas y vacías de contenidos.

No es un tema de ‘los políticos’ o de ‘la política’, tampoco es solo un acápite de las religiones y de las iglesias y sus escándalos, o de los Estados y naciones: el Cambio, la Revolución del siglo 21, se encuentra, se halla, está enteramente en manos- y en la inteligencia- del Hombre: porque es el Hombre el que hace política y conforma religiones e inventa deidades y consiente cielos en la tierra a su antojo y conveniencia. Y depende del Humano que asuma su calidad de Ser de Razón y abandone su Opción por la estupidez y la sosería baladí. Y es hora, hoy, aquí y ahora, que nos asumamos cuan Seres Espirituales, dotados de un Espíritu en grado de convertirnos en Seres Superiores tanto en nuestros talentos y capacidades como en lo divino que somos en potencia y posibilidad.

Y para hacer esto requerimos de tres factores: Responsabilidad, Compromiso y Sentido de Realidad.

El Sentido de Realidad es la verdad que nos circunda: hay un virus que enferma y mata. Puedo negarlo o ignorarlo, pero al final la Realidad me alcanzará y como sea esta realidad sigue existiendo e imponiendo sus condiciones. Puedo travestir un asesinato con mantos de derechos e igualdad: lo real es que matar a un ser humano cuyo corazón late y su cerebro ya está en formación, y abortarlo: es un crimen. Luego podemos agregar las vestes que cultural y políticamente consideremos, pero la mentira seguirá siendo falacia, la maldad será siempre mala, la violencia de todos modos y formas es traumática, dolorosa y demostración de atraso y condiciones oscuras y extremas, y los Hechos tendrán siempre una verdad intrínseca que debe buscarse mediante todas las versiones y con análisis apegado a la objetividad.  Luego vendrá el adorno, los sentimientos, las versiones emocionales, la voluntad política, la construcción del propio relato, la interpretación subjetiva, la traducción conveniente, la negación o la distorsión… y aquello nos conduce directo al relativismo, y por esa acérrima callecita descendemos abruptos a la falta absoluta de compromiso. Porque cuando nada es verdad y todo puede ser real: surge la ambigüedad y lo insulso, y entre ese ramaje hosco se embosca la estupidez y la engatusadora danza de las arpías.

Los dogmas que las religiones han conferido como ‘fe ciega’ y han arropado con la ‘esperanzas’ se basa en verdades que prescinden de una Realidad, a saber: que en el Hombre hay un factor de vida e inteligencia superior llamado Espíritu, y que aquello que imaginamos y se nos ha narrado como en un cuento infantil sobre la existencia de ‘este dios’ al cual incluso la maldad evoca y los tiranos adoran, no solo no es verdad sino que no es real.

 Y si la Realidad es que en el Ser Humano hay ya un elemento distinto a su carnalidad, pero no contrario, y que Dios es una Ley de Vida que ya mora en el Hombre: entonces nunca fue necesaria iglesia o religión alguna, pues bastaría con que el Ser Humano asumiera la Responsabilidad con un mundo que NO le pertenece, pero si del cual hace parte, y se comprometiera con su propio pasaje de existencia, que será breve, y que desembocará indefectiblemente en la muerte, para BUSCAR adentro de su Ser a esa Ley de Vida que permita a su especie evolucionar en su máxima posibilidad y capacidad, y romper con esta franja de Tiempo, y terminar con la esclavitud de los sistemas mundanos que encarcelan y anulan lo más alto y sagrado que el Hombre posee: su Espíritu, su Espiritualidad, su Practica de Fe coherente y comprometida con su prójimo y su entorno natural.  

Dios está en el Espíritu del Hombre, y desde esa Realidad intrínseca espera por nuestra Conciencia y Decisión:  podemos romper la ignorancia y correr el velo que no nos permite ver la Realidad más allá de este Mundo y de esta franja de Tiempo.

El Compromiso es con nuestra Inteligencia, Sabiduría y Amor por el Espíritu que somos. Y con Sentido de Realidad entramos en discernimiento de las leyes de la naturaleza para unirnos a ésta y combinar nuestra creatividad de vida para fomentar la vida. Y eso nos hace Responsables: porque bajo esa mirada macro nos sería imposible la incoherencia, la incongruencia, la mentira, la manipulación de los deseos, y la violación de la verdad objetiva: porque a partir de esta Realidad nos Comprometemos con la armonía de pasar por este mundo y por este Tiempo sin hacer daño, con el propósito sano y santo de hacernos mayores en conciencia y espiritualidad, y más cerca de nuestra superioridad humana: porque tal es la única valiosa herencia que hará de nosotros una causa que vale el esfuerzo de los dioses.

Son 30 años

Hace 30 años (1990) vivía los estertores de mi segundo exilio. El primero había iniciado el 30 de diciembre de 1973 y lo había cerrado haciendo retorno a mi país aun bajo dictadura, en agosto de 1983. Después de cinco años de oposición activa en contra de la tiranía, (tres años y medio en lo más duro de la clandestinidad), en 1988 volvía a los paramos emocionales de un (segundo) exilio pleno de asuntos por resolver, en medio de la febril actividad que caracterizaban entonces mi modo de vivir y de hacer.

Aquel 1990, hace 30 años ya, estallaba mi existencia; y a la altura de esta misma fecha me hallaba inmerso en una abadía inundada de cantos guturales y en profunda observación de mi peregrinación: lo cual me conduce, justo en diciembre de ese año 90, a mis primeras visiones de una montaña que debía hallar, y de un Cristo al que debía encontrar. Atrás -y afuera- quedaban 22 años de actividad política inmersa en los subterráneos más recónditos de las revoluciones posibles y de los proyectos imposibles. Culminaba también 13 años de periodismo de guerra, de investigación dura, de pisar colas de animales humanos sumamente peligrosos. Vida mundana que no tuvo miramientos con mis debilidades y oscuridad. Pero algo esencial de esa existencia que moría rescataba para mi nueva vida: una misteriosa y salvadora relación con el Buda, y una íntima alianza de luz con el I Ching.

30 años ya:  entonces en Chile una paupérrima democracia entraba corcovando debido a las amarras de acero que apretaban su vientre. Lo vital entonces era la esperanza, y como bien enseña La Sabiduría: la espera vana que sueña con que el horizonte llegue hasta propia puerta es lo que los Hombres llaman ‘esperanza’. Contrario a dicha ilusión es la Certeza: porque ésta obliga a la acción e ir al encuentro de aquello a lo cual se aspira. Rota la entelequia:  cae sobre nosotros la realidad. Y es la dura encrucijada de hoy esa circunstancia que nos hace fuertes, y debe empujarnos, ahora sí, a construir Certezas por las cuales jugarnos en los años en que sabremos forjarnos un futuro sin los fastidiosos nudos oligárquicos.

También en mi vida nueva, (retornando- nuevamente- a mi país, en abril del año 1991), hubo necedades e inexperiencia, con los consiguientes desaciertos y aprendizajes. Sin embargo, a 30 años de aquel reciclaje existencial entre mis ‘rescatadores’ budistas, y a 29 años de mi entrada y permanencia prolongada en la montaña… que encontré exacta a como la veía en mis meditaciones…puedo resumir que nada ha sido en vano, y que incluso los dolores y frustraciones se han alzado cuan maestría iluminadora.  Y que lo construido y sembrado en estos años, –aunque en la dura comprobación de los hechos fue diferente y distinto a como el anhelo me los pintó en mis días de neófito-, me colma hoy de una convicción calma y asentada que seguramente es efecto de la vejez, o de hallarme en paz con las Certezas que se han hecho Persona en mi verdad interior.

En estos 30 años he aprendido que si el Camino Espiritual y la Fe es una arraigada verdad interior: entonces habrá Certeza que dará Sentido a la vida, incluso más allá de la muerte.

Presentación

Andariego soy. De nacimiento a muerte una senda ha quedado dibujada para memoria y aprendizaje. Pasando ampliamente los 60 años y acercándome a la próxima frontera de los 70, puedo asegurar con plenitud y certeza que sí he vivido, y si hubiere culpa en la intensidad entonces culpable soy.

Envejezco como debe hacerse: con la conciencia en paz, con mis arrepentimientos bien sancionados, con el perdón expuesto y declarado setenta veces siete, nutriéndome de la Sabiduría que nos heredaron antiguos Santos y Sabios, y en dialogo interior constante y vívido con mi Dios, el Verbo, el Cristo Vivo. Y de lo mío doy testimonio, y enseño a quién quiere recibir, y aconsejo a quién lo solicita, expongo lo que creo debe servir como luz en la huella para que otros y otras Andariegos y Andariegas no pierdan tiempo precioso detrás de utopías y falsos vericuetos.

Somos un Ser y muchas personas: tantas como personas nos viven o con nosotros conviven o con las cuales pasamos por vivencias…breves o largas, no importa, porque lo vital es el brío, la convicción, y el efecto que dejamos para bien o para mal. De lo bueno no nos jactaremos, sino que aprenderemos. De lo malo nos arrepentiremos y también aprenderemos: porque si luz tenemos, sombras nos siguen.

Hoy expongo ideas y pensamientos, políticos en su razonamiento, naturales en su humanidad, sociales según mi conciencia de hacer parte de una generación y de estar en medio de un núcleo humano, espirituales en su ética y génesis; y además muestro trazos de mi existencia: la de antes de entrar en este Camino de consagración y sabiduría, y la de ahora: que ya por treinta años ha ocupado mi historia y seguramente me acompañará hasta fin de este periplo temporal que inexorablemente debe culminar.

A nadie quiero convencer. No me interesan los litigios y los debates: todos inconducentes e inútiles, y que jamás cambiarán un ápice de la realidad. Observo en los argumentos de hoy las mismas ideas de mi juventud: también a mi parecían novedosas y nuevas, y sin embargo eran las mismas que los abuelos de mi tiempo habían expresado con otras vestes en su lozanía.

Hoy veo que las divisiones entre los Hombres del Mundo no son políticas, ni de ideas… es todo un asunto de poder, de control, de un profundo sentido de divinidad oscura que aspira a beneficiarse de la esclavitud de otros; y claro: yo defendí el viejo socialismo de entonces porque era supuestamente más justo que la miseria del capitalismo salvaje que se nos imponía bajo las sombras del ‘gran hermano’ norteamericano. Para constatar con mis ojos y en terreno, y luego con datos duros de la historia, que bajo esa aspiración idealizada pululaba la misma ponzoña del poder y la sumisión que tanto gusta a los señores de este Mundo. Entendí que no por ser una víctima de la agresión del poderoso se está precisamente del lado de la justicia y la razón. Que la nación, el conglomerado humano, o el sistema político agredido por la prepotencia del más fuerte pudiera esconder debajo de su tragedia un puñal para matar la libertad apenas está nazca y muestre sus primeros retoños. Y así, por años, aquellos que fueron esclavos ahora, con el poder en sus manos, justificarán la oprobiosa y propia dictadura instrumentalizando el victimismo que recuerda los amargos días de la agresión sufrida, y regando cada día la raíz del miedo ante una nueva arremetida de un enemigo cada vez más caricaturesco.   

El Hombre es el problema: un Ser Destructivo y Auto Destructivo no puede construir en armonía y compartir vida en paz.   No habrá cambio alguno real y profundo sin que el Hombre mute al punto de sepultar al Hombre actual y su apego por la prehistoria. Porque aún no conocemos la Historia ni hemos ingresado a sus grandes avenidas.  

Hoy expreso opiniones y expongo miradas que razonan políticamente: a veces algunos ven en éstas una postura de izquierda, otros consideran que son centristas, y de la izquierda dicen que rozan con el liberalismo derechista. Dejo a los fabricantes de esquemas que encasillen según sus medidas siempre tendientes al cuadrado: las personas libres aprendemos a mirar la realidad con sentido objetivo y ya no pertenecemos a parcialidad alguna que nos restrinja la visión global de los hechos.

Soy Cristico, y eso me impulsa según principios irrenunciables que no desmienten mi vida transcurrida: la Libertad; La Justicia; La Paz; el Sentido de Comunidad; el Amor expresado en la justa Solidaridad, en la necesaria Misericordia y en la Compasión, en el Arrepentimiento causal, en el Perdón liberador, en el rechazo profundo a la violencia de todo tipo y forma. Y como Cristico busco Verdad en lo más profundo, sin conformarme con las apariencias, con las formas y las formalidades… y para llegar a ese logro he tenido la compañía cercana y vívida de la Sabiduría, que por medio del I Ching abrió sus umbrales y ha dejado que camine por sus portales.

Viví la militancia política; fui internacionalista y estuve al servicio de causas lejanas a mi país y nación pero cercanas a los conflictos sin resolver por la humanidad; viajé…mucho, como buen andariego. Ejercí periodismo político y cultural. Fui poeta y escritor. Me enclaustré en una vieja abadía budista a mis 24 años.  Y volví a ser rescatado por mis misteriosos guardianes budista a mis 37 años.  Estuve no pocas veces muy cerca de la muerte: ésa dejó de ser un misterio cuando me hundió en un mar de cadáveres que me volvieron enemigo de Dios por varios años de este andar. Y volví a renunciar a la comodidad y a lo adquirido, nuevamente, y esta vez para regresar a mi país para quemar un karma que me consumía por dentro: vine a combatir con las armas a la tiranía que sumía a Chile en el más abyecto oscurantismo.

Yo fui Camilo, un oficial del Frente Patriótico Manuel Rodríguez.

 Yo fui Camilo desde mi militancia anterior en el MIR. Yo fui Camilo Maturana el escritor, el representante de la Resistencia Chilena recorriendo Canadá, Italia, Albania…  El mismo que se hizo miembro de la Sociedad de Escritores de Chile y ayudó a conformar y organizar el Colectivo de Escritores Jóvenes bajo la dictadura. Y este Camilo tuvo su iniciación militante apenas saliendo de sus 14 años, cuando aún no aparecía ‘Camilo’, y era el ‘Urrutia’ de las Juventudes Comunistas.

23 años de militancia activa en diversos roles y en diferentes circunstancias. Hasta que en el invierno de 1990, hallándome en Uruguay, mi vida da un Salto Cuántico que matará a Camilo y fomentará una verdad interior que reclamaba ser considerada y que ahora sería mi gobierno y mi razón de existir: de esto ya han pasado 30 años plenos de riqueza espiritual.

Nada de aquello que este andar ha provocado, ha incluido, y he vivido, tendría importancia alguna, y sería no más que una serie de anécdotas,   sin el cierre Espiritual que eleva lo temporal y circunstancial a la calidad de trascendencia: porque solamente cuando el andariego y la andariega sale de esta existencia por los pórticos atemporales que rompen con la pequeña y vana ilusión de la materialidad…es cuando se ha vencido a sí mismo-a y ha logrado vencer al Mundo y su entramado de falacias y quimeras. Porque entonces tu libertad será el inicio de tu nueva existencia.

18 octubre 2019: una advertencia que no debemos soslayar

• La clase política no juega a los dados –

• Lo Justo entonces es: ampliar, profundizar, ensanchar, enraizar, renovar…REVOLUCIONAR la DEMOCRACIA ACTUAL para lograr un Sistema Democrático que supere los modelos ya agotados e inconducentes-

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En el paupérrimo teatro de la política actual parecen haberse diluido los conceptos sustanciales y el rigor de las ideas: nada parece sostenerse sobre pilares académicos o de sentido común…que en política exige razonamiento consensuado sobre el significado y génesis de los fenómenos sociales.

La violencia, por ejemplo, se escapa por los intersticios de la subjetividad y se alza sobre efímeros puentes de conveniencia… como los Derechos Humanos, al igual que La Democracia… en donde al final del enredo sólo se escuchan vociferantes argumentaciones que empequeñecen la temática y obnubilan la visión de la realidad.

La violencia no es invención de la derecha o de la izquierda: es un factor preponderante desde que Caín mató a Abel, o desde que el Homus Sapiens exterminara a los Neandertales. En Psicología es vista y analizada como el factor residual de la bestia interna que lucha por predominar por encima y malgrado la Inteligencia y la Razón. Y ya las ciencias diversas han abordado este tema existencial, desde aristas disímiles, para concluir en igual variedad de diagnósticos.

Desde la Moral, cuan Jurisprudencia de la Conciencia, se propone un camino hacia la Superioridad Humana en una batalla del Hombre con Si Mismo (o consigo mismo): en donde la Conciencia postula al conocimiento y a la sabiduría, y a romper hasta la frontera más fina de la ignorancia, para lograr la aniquilación de cualquier atisbo de salvajismo: porque la violencia es síntoma de irracionalidad bestial.

La Violencia Estructural es el ápice o ‘estado superior’ del uso de la fuerza: porque postula al Dominio Integral y absoluto de una sociedad humana.

Cuando ‘las Estructuras’ del Mercado, de la Economía, de la Religión, de la Cultura, de la Educación, de la Política…y del Estado… se constituyen de forma que la masa de la población literalmente sea sometida a la esclavitud y/o formas de sujeción -(o en su mejor expresión concede niveles de participación contralada, o reparte beneficios relativos, o limita la democracia a manifestaciones elementales)- mientras el Poder real descansa en la divina e intocable  Super Estructura a cargo de pocos privilegiados y contados centros de ‘gobernabilidad en las sombras’ o ‘poderes de facto’…entonces estamos ante un Sistema Violento.  Y tal forma de Violencia ha sido bien aplicada bajo el Capitalismo como también en el Socialismo, y ha sido el propósito estratégico del Fascismo al igual que ha nutrido al postulado del Comunismo ideal.

Chile ha sido una vitrina evidente que ha exhibido la miseria humana que provoca el uso exagerado de la Violencia Estructural. Porque la dictadura en nuestro país surgió como furiosa respuesta de la Estructura y sus beneficiarios, al intento por desmantelar sus engranajes vitales, mediante formas democráticas empujadas al máximo de sus posibilidades: cuyo resultado no podía ser otro que el enfrentamiento en algún tipo de guerra, en donde una de las partes debía subyugar a la otra. A eso se le conoce como ‘lucha de clases en su fase prerrevolucionaria’.

La dictadura en Chile, a diferencia de otras similares en América Latina, (precisamente porque surgida de una contradicción política de mayores implicancias), se esmeró en ‘Re Estructurar’ el andamiaje del Estado con tal de que éste ya no fuese permeable a factores ajenos a su propósito de Dominio. Lo hace bajo tiranía y ausencia de democracia: por lo mismo todo su producto es esencialmente violento. Y una vez parida la arropada y bien amarrada ‘democracia de los acuerdos’ aquello que se establece cuan modelo irrenunciable es, en lo vital: la sacra Estructura construida bajo régimen absolutista. De ahí entonces: modelo de Educación, de Pensiones, de Salud, de la religiosidad del ‘mercado salvaje’, de las Fuerzas Armadas y de Carabineros, del Estado y su Constitución, de las formas mañosas para legislar, de los vericuetos de legalidad que impidan gestiones de cambios medulares. Y esa Estructura es violenta: sea por génesis, sea por propósito, sea por ejercicio de poder, sea por creación de castas y privilegios, y también por condena a la subordinación incontrastable de un pueblo inconsulto…hasta ahora.

Para cambiar una Estructura asfixiante e injusta se requiere Más Democracia; o más bien: romper con los márgenes amurallados de una democracia engendrada bajo el chantaje, la provocación, la amenaza y los encadenamientos legales. Y no que ahora neguemos que esa democracia paupérrima y triste fue en realidad un paso hacia adelante y superior a la tiranía enquistada: porque sí sirvió y fue una instancia transitoria quizá necesaria.  Pero el alargue y prolongación de una Estructura mal habida y peor engendrada… en un tiempo que ha dado un salto cuántico que en corto lapso ha dejado obsoleto cualquier idea y modelos del siglo pasado… impone, exige, clama por un Cambio real y profundo. Y la retención de las mareas de la transformación, con sus armas de siempre y viejas herramientas represivas, fomentan aún más la violencia callejera, provoca la rebelión de los hijos del modelo, y también hace surgir la voluntad masiva para avanzar hacia nuevos estadios de desarrollo.

En este cuadro, y considerando este marco y contexto, escuchamos hoy a los defensores del impertérrito Sistema levantando una hipócrita y tediosa perorata en contra de la violencia callejera que en su brutalidad demostró el nivel de rabia acumulada en aquel 18 de octubre del año 2019. Y, de su lado, vemos, nuevamente, a dirigentes comunistas culebreando entre la ambigüedad y la concesión. La clase política no juega a los dados: su aparente ambivalencia es una postura calculada con objetivos poco nítidos pero con estrategia interna bien definida. Y así como la derecha se alza, falazmente, cuan adalid de la paz social… la izquierda surfea entre la justificación y el suave reproche.

Existe un Sistema intrínsecamente perverso y estructuralmente violento: y defender o pretender no mover las columnas de este entramado es sumamente injusto y prepotente; y proponer o accionar la violencia callejera con el fin de rebelarse y ojalá hacer caer el odioso tinglado es, por lo menos, infantil y contraproducente.  Y esto nos lleva a CONDENAR TODA FORMA Y ESTRUCTURA SUSTENTADA EN LA VIOLENCIA, y NO ACEPTAR METODOS Y TACTICAS VIOLENTAS PARA DESTRONAR UN SISTEMA ARCAICO e INJUSTO. Lo Justo entonces es: ampliar, profundizar, ensanchar, enraizar, renovar…REVOLUCIONAR la DEMOCRACIA ACTUAL para lograr un Sistema Democrático que supere los modelos ya agotados e inconducentes. Y ese plano superior se logra con: PARTICIPACIÓN, MOVILIZACIÓN Y ORGANICA DE FUERZA PROPIA.  

La violencia hoy sirve solo a los que sostienen y resguardan al raído sistema que cruje por cada poro de su añejo cuerpo. Amalgamar la movilización de la gente con la consecuencia de la violencia como elemento natural e inseparable… y por lo mismo decir que no se puede condenar la violencia porque eso equivaldría a negar el derecho a la movilización… es un subterfugio poco brillante y bastante burdo. Así como equivaler e igualar la respuesta de fuerza y el uso de la violencia en la autodefensa bajo una tiranía, en tiempos de dictadura, con la violencia callejera en tiempos de democracia… con un proceso de Nueva Constitución ad-portas…es de una ignorancia y estupidez que colinda con la sandez.

Porque la Ciencia Política y el sentido común de un político serio y responsable asume que la violencia en democracia siempre será favorable para reforzar a los sectores más recalcitrantes y cavernarios -(y que será ‘más democracia’, exigida por la  movilización sostenida y orgánica del pueblo, aquello que realmente hará reventar los anclajes autoritarios)- y que el uso de la respuesta de la fuerza y de la autodefensa en situación de tiranía es una política necesaria para la sobrevivencia de las organizaciones de la gente, del pueblo.

Se puede disentir o concordar: pero la violencia JAMAS ha sido EN SÍ una base política causal y estratégica: siempre la violencia – en política- ha sido un ‘factor de momento’ que mira a lograr propósitos concretos que de otro modo es imposible alcanzar. Dicho de modo clásico:’ es la política conducida por otro medio’. Y este ‘medio’ siempre apunta al logro de un objetivo de poder, y nunca a la permanencia (de la violencia) como forma de gobernar. La teoría de la violencia permanente, cuan sistema de gobierno es Nazi Fascista, y fue la fundamenta errada para la aplicación de la ‘dictadura del proletariado’.

Si volvemos a las ‘cuestiones de Principio’ nos entenderíamos mejor: porque si la violencia es un factor nocivo, -y obligación evitar-, y tal postura es de ‘Principios’: entonces mal podríamos justificar o defender Sistemas Violentos estructurados para sometimiento e injusticia, mientras condenamos la respuesta violenta de los subyugados.  Y eso, independiente y por encima de posturas militantes y bagaje partidario. O los Derechos Humanos serían un Principio que mide la coherencia o la incongruencia de un gobierno democrático y de un verdadero Estado de Derecho, sin miopías parciales o relativismos. Y si una tiranía domina a sangre y tortura, y la libertad es aplastada e inexistente: es cuestión de Principio el Derecho a rebelarse y oponerse con el uso de la fuerza a tan oprobioso régimen. Como es asunto de Principios que: en Democracia la violencia es un factor ajeno que siempre atentará en contra de las libertades del pueblo y favorecerá a las capas más retrógradas de la sociedad.  Y estas enunciaciones bien trazadas, como Principios bajo cualquier situación particular, y válidas para toda nación: deben ser concebidas y bien defendidas como Valor Humano indivisible de nuestra condición de ‘Ser Racional con grados y buen uso de Inteligencia’.  

Derechos Humanos: una cuestión de principios

La base de los DDHH que establece la ONU mira en sustancia a establecer Derechos de toda persona que pudieran ser inculcados o negados por el Estado. En esta jurisprudencia internacional los Derechos violados por personas en daño de otras personas no están incluidos por lógica: son éstos delitos comunes juzgados bajo código penal o civil. Así como aparte y bajo otros criterios se ha establecido el delito de carácter terrorista cuando es ejecutado por civiles armados o grupos irregulares en contra de la población. Al tratarse de ‘terrorismo de Estado’ – (cuando el Estado y sus aparatos ejercen sistemáticamente violaciones a los derechos por medio del terror: desapariciones, encarcelamientos extrajudiciales, ruptura de todo derecho a la defensa, etc.) – cabe plenamente en la concepción penal de ‘violación a los Derechos Humanos’.

Este marco legal reconocido por la mayoría de los gobiernos y naciones del planeta parece ser ignorado por nuestros políticos, tan poco rigurosos en su verborrea: cuando, por ejemplo, un policía, cuan representante del Estado, violenta, hiere, mata, agrede en forma desproporcionada y abusiva, o tortura…no lo hace a nombre propio, sino que en su veste de ‘servidor del Estado’. Y si fuese un acto individual: el Estado debe castigar sin titubeo ni complicidad tales arbitrariedades. Y si tales flagelos fuesen ‘una política de gobierno’ y/o recibiesen ‘encubrimiento u orden de mandos o instancias del Estado’ aquello ya es ‘Violación de los Derechos Humanos’.

Bajo este cristal objetivo y apegado al concepto jurídico: en Chile sí se han violado los Derechos Humanos, y al constatarse en forma reiterada y bajo permanente obstrucción a la justicia por parte de un aparato del Estado y ambigüedad de las esferas gubernamentales: cabe esta figura que se establece en el Derecho Internacional sobre este asunto. Sin embargo,  no cabe, en rigor, la calificación de ‘terrorismo de Estado’.

El ‘empate’ que intentan los negacionistas de la violación de los DDHH consiste en levantar como de ‘igual violación a los DDHH’ los actos de violencia en la zona de la Araucanía, según se cree adjudicable a los movimientos Mapuches, y seguramente provocados también por células paramilitares de derecha extrema. La violencia de civiles en contra de civiles, de grupos armados en contra de empresas, y las respuestas armadas contrarias de otros civiles, y de civiles en contra de policías se enmarcan en la categoría de ‘conflicto armado’ cuyos rasgos de aplicación de la categoría de ‘terrorismo’ puede distinguirse en ciertas acciones, pero no en todas. Y como en todo ‘conflicto armado’ hay siempre razones y causas POLITICAS, y la solución a tal deterioro se debe hallar en ‘Acuerdos y Dialogo Político’.  Por lo mismo, es una barrabasada ‘empatar’ un acto vil de lanzamiento de un cuerpo humano al rio desde un puente, o el enceguecimiento de víctimas, o la tergiversación y falsedad de los hechos llevados a cabo por ‘agentes del Estado’ en una rutina que resulta ya sistemática…que los efectos lamentables de un ‘conflicto político’ no resuelto por muchos años y que ha desembocado en un incipiente ‘conflicto armado’ que aún puede detenerse y no dejar que crezca. Ambos hechos: la violación de los DDHH y el abuso desembocado de carabineros de Chile, y la violencia en la Araucanía muestran evidencias de crisis en la capacidad del Estado (Y DE CLASE POLITICA…TODA) para salvaguardar los fundamentos de la Democracia y del Estado de Derecho. Y eso sí es altamente preocupante.

Tratándose de un asunto de Principios y de Ley Internacional: no caben los ideologismos en este punto central: el informe de la ONU sobre la catástrofe humanitaria y política en Venezuela es recién una arista jurídica que asoma al mundo para espanto de cualquier demócrata honesto. La realidad cotidiana, de hace años, es aún más tremenda y violenta. Cualquier defensa o argumentación de justificación sobre las atrocidades que comete el Estado (en Venezuela) en su conjunto, unido por la misma política y bajo un único mando, es una distorsión intelectual que bordea la hipocresía. Y algo no cuadra cuando se alega, justamente, por las aberraciones del Estado en contra de la población civil en el propio país, pero se razona mañosamente al intentar encubrir la realidad en Venezuela movidos por una forma rancia y conservadora de hacer política, en donde ‘los amigos’- aun si nefastos y sátrapas -son ‘buenos gobernantes’ y van defendidos aun si hacen cosas peores que los violadores de DDHH en el propio país.  

La revolución en tiempos de pandemia

En lo común entendemos que una revolución es un alzamiento de una parte social o de masas en contra de un sistema o representación de ‘la otra parte’ que debe ser derrocada, para instalar en su lugar ‘lo nuevo’ o ‘distinto’ que, finalmente, supere el estado de cosas obsoletas.

En realidad, la revolución es una mutación, un salto de cambio que transmuta los factores y los trasladas a un estadio diferente de desarrollo. Y eso sucede en las personas, y en todo proceso de la física y de la materia conocida.

Un Salto de Cambio- una revolución- rompe con la cadena de la Causa y Efecto: creando con su transformación una nueva base Causal con Efectos propios y novedosos. Aquello que empuja y provoca una Mutación – revolución- es la acumulación de Efectos que alcanzan una condición de crisis que al no hallar salidas y respuestas provocan el agotamiento del empuje Causal.

También los ciclos en la historia del Hombre están sujetos a esta ecuación natural; y, por supuesto, el planeta que nos cobija posee su propio itinerario de Cambios y Mutaciones que respetan el fenómeno del agotamiento de los factores y la necesidad del Salto que asegure un nuevo inicio.

Una pandemia es un aviso que pone en dramática relevancia aquel punto de quiebre que denota la eventualidad de una crisis de mayor envergadura. Y si concebimos, como debe ser, que el planeta en su realidad conocida y en su verdad desconocida, en un cuerpo único en cuyo seno habitan formas diferentes y diversas de vida, que por hallarse en reciprocidad y dependencia conforman un Ente ligado y comunicado entre sus partes: entonces, esa mirada global, nos permitirá concebir y ojala ‘tomar conciencia’ sobre el rol y desempeño del Hombre en este engranaje maravilloso de la vida.

O Destructores o Constructores. Y si hemos optado por la Destrucción y la Auto Destrucción, es natural, por ende, que el Cuerpo planetario inicie su defensa ante este agente patógeno (los Hombres) que desarmoniza sus perfectos equilibrios y amenaza con la extinción de vida imprescindible.

La revolución está en marcha… los Hombres estamos siendo tratados por lo que somos: elementos detonantes de crisis que han perdido su empuje Causal y han acumulado efectos perniciosos que hace urgente un Salto de Cambio existencial que: o neutralice esta amenaza o la elimine definitivamente.

La realidad de los hechos nos manifiesta a las claras que como especie nos encontramos en una disyuntiva trascendente: o NOS revolucionamos, o sufriremos las consecuencias de ser tratados como pandemia que debe ser combatida; y la naturaleza y el cosmos, y la vida moviéndose en solidaria reciprocidad, por fin inoculará su anticuerpo que salvará al planeta, pero no al Hombre.

Urge un Salto de Cambio, y esta Mutación apremiante debe ser radical en su propuesta y acción; ya no basta con el cambio en la persona – (que es y será siempre un factor vital e irremplazable)- sino que ahora las personas en proceso de cambio debemos movilizarnos mirando al futuro, porque quienes insisten en fijar presente en base a sustentos añejos y caducos, son elementos retrógrados y cavernarios que atornillan al revés del Salto Urgente. Para el Cambio, mirando al porvenir, lo pasado y lo acontecido sirve como lección, aprendizaje y sobre todo como alerta para no repetir errores y evitar horrores.

Futuro es una vida en plena armonía y reciprocidad con la naturaleza y sus leyes: y es una revolución porque para implantar esta Causa como inicio de nuevos Efectos se deberá destronar por completo al perverso sistema de mercado tal y como hoy lo concibe el odioso privilegio de las castas y la mezquina mentalidad de las oligarquías. Porque al desbaratar el sistema de mercado a ultranza actual cae automáticamente el sentido de Poder imperante, y con ello pierde vigencia la política como ahora se entiende, y entra en crisis el concepto estrecho de democracia que prevalece por motivo del impertérrito tinglado mercantil.

Las guerras son el efecto lógico de la lucha entre Poderes por expansión y aseguramiento de los mercados. Ninguna guerra carece de este fundamento: el objetivo final será siempre ‘asegurar mercados y ganancias para asentar Poder político’. Justamente esa idea, esa perniciosa mentalidad, es la que debemos desechar, enterrar y extirpar de nuestra concepción humana.

Es hora de pensar que:  ‘la Paz es el factor que garantiza que los bienes y la producción satisfaga las necesidades de todos y cree reciprocidad y solidaridad entre seres humanos sin que éstos deban agredir las leyes de la naturaleza’ ‘La Paz es un principio de vida que concibe a los Hombres como parte de un solo cuerpo de la Creación, y por lo mismo nadie de la especie humana puede verse mermado en su Libertad ni puede quedar al margen de los Derechos y de la impartición de Justicia’ ‘La Democracia entonces es el ejercicio de la Libertad y del Derecho ejercido por personas conscientes de su igualdad en derechos y responsabilidades; siendo su compromiso principal el pleno Deber de salvaguardar la Libertad y los Derechos de los otros tal como los otros cuidan y respetan mi Libertad y mis Derechos’ ‘La Democracia en la economía establece el derecho de propiedad personal y asociativa, y del libre emprendimiento, en beneficio de sí mismo según respeto a los derechos de  los demás, y con absoluto apego a las leyes de la naturaleza’ ‘La Paz es un mandato que prohíbe la violencia en cualquier de sus manifestaciones, y será por Educación, por Cultura, por ejemplo social, colectivo, que este principio de No Violencia radical deberá ser integrado a la forma de ser y de concebir de los seres humanos’ ‘La Democracia de la Paz no concibe la guerra, la confrontación violenta, la construcción de armamento y rechaza la sola idea del daño, de la muerte y del exterminio’

En el Futuro habrá una Eco Democracia cuyo cimiento basal será la Paz; en donde ninguna señal de esclavitud asome por la maldiciente oscuridad, y el Ser Humano se integre a la armonía de su casa planetaria, y de a poco vayan cayendo fronteras hasta que un día no lejano no existan divisiones, sino que sólo Seres Humanos con un comportamiento de Hombres Superiores.

Entonces la Historia iniciará su marcha. Y este hoy en crisis quedará como los estertores de una prehistoria que comenzó a desmembrarse cuando vino una pandemia…y los Hombres entendieron el aviso e iniciaron su revolución.  Porque la otra lectura sería que: entonces los Hombres no creyeron la advertencia pandémica, y eso abrió la vorágine de la crisis que inició el último tiempo de esta prehistoria, en donde el Humano sucumbió.

 

¿A quién, a qué, sirve la violencia actual en Chile?

La violencia en los Seres Humanos es una opción, no una condición. La condición humana por naturaleza es la razón.

Se opta por el uso de la violencia- o de la guerra en cualquiera de sus formas o tipología- como continuación de la política: llevada por vías contrarias a las formas y modos de la democracia.

La instauración de un sistema opresor (dictadura-tiranía) que anula libertades y socava cimientos básicos de democracia (por ende: que usa la violencia para fines políticos y modos de gobernabilidad absolutista) justifica la opción por la respuesta y resistencia armada que accede a diversas formas de lucha y asume formas de guerra irregular en contra de una tiranía impuesta.

En democracia es una seria contradicción dotar al Estado de Derecho de estamentos represivos bajo el monopolio de las armas que a priori determinan la existencia de un ‘enemigo interno’.

La democracia conocida justifica el uso de la fuerza y de la violencia por medio de cuerpos armados preparados para ejercer control y represión según protocolos regulares y acceso a leyes especiales que rompen aquellas reglas: como el ‘estado de sitio’ o ‘estado excepcional’.

Una Nueva Democracia debería superar este vestigio de violencia que se auto adjudica el Estado como deber de ‘orden público’; para tal efecto debiera eliminarse el concepto de ‘enemigo interno’ y considerar que las contradicciones sociales y políticas pueden ser superadas por vías no violentas, creando instancias de participación directa que permita prever y enfrentar los síntomas de conflictos cuando éstos se gestan, y no recién aceptarles –si acaso- cuando se convierten en estallido social.

La violencia revolucionaria – en contra de una tiranía que usa el terrorismo de Estado para aplacar a ‘sus enemigos internos’: el pueblo – es siempre ‘orgánica’ e ‘identificable’: como el MIR o el FPMR en tiempos de dictadura en Chile. La violencia actual en Chile NO es ‘orgánica’, ni posee entes políticos que bajo cierto análisis hayan optado por considerar que las circunstancias justifican el uso de las armas y de la vía violenta por sobre los métodos y modos democráticos.

La violencia en este tiempo en Chile es ‘inorgánica’ y carente de propósitos ‘político- estratégico’ claros, y sin una estructura organizativa que represente una ideología o propuesta política evidente.

La respuesta del gobierno ha sido sospechosamente ineficaz y ‘extraña’: recurriendo a metodología represiva de carácter dictatorial, con un cuerpo policial con grados alarmantes de autonomía, permitiendo de hecho que los conatos violentos se expresen, crezcan y manifiesten…acompañado esto con una profusa publicidad que acusa a esta violencia como principal escollo para avanzar en solución de salidas democráticas y constitucionales de nuevo tipo o diferentes a los declives actuales.

‘Extraño’ porque cualquier Estado que cuente con un mínimo de Inteligencia y capacidad disuasiva identificaría formas, métodos, logística, personas dirigentes y lugares que van conformando la red de la acción violenta en el territorio. No hacerlo, pudiendo, resulta ‘extraño’ y ‘sospechosamente conveniente’ para quienes pretenden usar esta misma violencia: o para desprestigiar al verdadero movimiento social y sus banderas y peticiones…o impedir salidas constitucionales y democráticas que anulen la paupérrima democracia actual…o saturar el ambiente político y social para propinar un ‘golpe de orden’ que justifique el bloqueo de cualquier avance democrático de nuevo tipo, y regrese así el estado del país a los tiempos de buen control de la oligarquía y al silencio de los cementerios.

Esta violencia actual en Chile se asemeja en demasía a la instaurada por el fascismo en Italia previo al ascenso de Mussolini; la misma que atormentó a las ciudades años antes de que Hitler tomara el poder: una violencia indiscriminada mirante a causas terror, zozobra en amplios segmentos de la población, todo con el propósito de llegar a la ‘justificación de un orden acérrimo’ o de una ‘dictadura necesaria’.

Violencia fascista que en Italia usó y organizó a los sectores marginales de Roma para asaltar barrios de clase media y enfrentarse a los obreros: lumpen subproletariado que también manipuló el nazismo bajo el terror de perder lo poco que tenían debido a la invasión de emigrantes. Guerra entre pobres: pueblo contra pueblo. Eso es fascismo.

Esta violencia actual NO es ‘revolucionaria’ en el sentido libertario, democrático: porque no da (o pretende dar) un salto a una sociedad bajo modelo bien expuesto e ideológicamente sustentado… o se alza cuan opción revolucionaria con características orgánicas precisas y/o posibles de verificar o identificar.  Esta violencia actual ha perdurado y perdurará sin considerar las urgencias y necesidades del movimiento social: porque esta violencia está destinada precisamente a hundir al movimiento de cambios al que tanto teme la oligarquía. Es una violencia que juega en favor de los fines más oscuros, recalcitrantes y reaccionarios de este país.

El gobierno no terminará con esta violencia para poder utilizarla para sus fines: entonces debe ser tarea del movimiento social, de los trabajadores, de los pobladores organizados, de los estudiantes revolucionarios tomar el control de esta situación para: o colocar esas fuerzas bajo horizonte político y estratégico que sirva al movimiento social…o terminar con su acción del modo en cómo se está dando y manifestando.

Desde siempre el movimiento obrero, las grandes batallas sindicales, los profundos cambios promovidos por los estudiantes, las dignas luchas campesinas y las justas batallas de los pobladores ha recurrido a la autodefensa y al combate directo en contra de sus opresores con una mirada política bien definida, con puntos estratégicos claros, con razones y propósitos manifiestos y expuestos; y cuando ha sido necesario recurrir a la resistencia con uso de armas, ha sido porque todos los caminos de libertad y derechos han sido usurpados y aniquilados.

La manifestación de violencia que hoy constatamos en Chile posee una característica de tipo fascista: y quienes, desde la supuesta ‘izquierda revolucionaria’, o desde el romanticismo anárquico…o mirando la realidad desde pulpitos ajenos a la realidad de Chile… quieren ver en estos estallidos un gesto de ‘valentía revolucionaria’ que ayudará a instaurar en este país un sistema justo que eliminará el neo liberalismo que muchos detestamos…creo que están profundamente errados. Quizás sí estemos ante la más grande de las victorias de la oligarquía: gracias a la violencia que la reacción secreta incentiva y deja hacer; y que los perdidos ‘revolucionarios’ analizan más desde las tripas que desde la razón: y cuando un revolucionario pierde la razón y la objetividad- y el análisis crítico de la realidad- cae en los agujeros del fascismo aun creyendo que va en el sentido contrario.

Al final: siempre la OPCION por la PAZ -y el SENTIDO DEMOCRATICO en su esencia más libertaria y popular- es la frontera que define y distingue el tipo de violencia que se impone y su propósito político real.

Ecos de otra vida

‘Ecos de otra vida’ es un libro testimonial de quién fuese militante del MIR (1971-1975) y del FPMR (finales de 1984 – mediados 1988) bajo el seudónimo de ‘Camilo’. Para mayor información invito a entrar a  este enlace:

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La Paz por sobre todo

• El ‘Estado subsidiario’ que impone la actual Constitución es contraria a la Paz social. 

La pacificación del sometimiento es engañosa y falaz: tarde o temprano quienes padecen sujeción y abuso hallarán la circunstancia y el momento para rebelarse y estallar. Una vez en la tormenta, la salida al torbellino social no será jamás regresar al estado anterior, precisamente porque aquel tiempo y condición es la causa del estremecimiento presente.

Siembra injusticia y cosecharás rebelión.

La violencia por sí sola no explica los fenómenos humanos, sociales, políticos. Ésta nunca será un fin en sí misma. La solución a los fenómenos de violencia será siempre política; nunca aplicando grados y formas de represión ascendente  y/o  favoreciendo estados de conflagración: a no ser que se considere que se está en medio de una guerra, porque entonces son las leyes de la guerra las que determinan resoluciones políticas.  

Para enfrentar la violencia, bajo cualquier manifestación, es imperativo establecer nítidamente la doctrina y concepción aplicada de La Paz. Porque si el sustento ‘de paz’ fuese la injusticia, el abuso, la expoliación y la manga ancha para el potentado al cual le es permitido someter y empobrecer a la mayoría sin derechos o con derechos avasallados, entonces aquella formula ‘de paz’ encubará los gérmenes de una revolución inevitable.

La Paz desde principios de equidad, justicia y Derechos reales e  irrefutables conlleva necesariamente a políticas sociales y económicas que apuntan al progreso de la mayoría y a la desaparición de la pobreza; y en aras de este estado de Paz  es menester equilibrar las ganancias de  los más ricos a través de una justa política impositiva y una malla legal que establezca firme estado jurídico para el desarrollo empresarial y creador de riqueza, en modo que se garantice el impulso del capital según un mercado con fuerte propósito y  carácter social y un sistema de expansión absolutamente respetuoso y concordante con el medio ambiente. Es decir: el mercado supeditado en su forma y progreso según beneficio para las mayorías -y de la Nación-, y no solamente para conspicuo profito de minorías

El Estado, en un sistema que garantiza la Paz, por sobre todo, jamás podría ser un ente subsidiario regido por una divinidad llamada ‘mercado’, el cual  desde sus fauces e insaciabilidad   determina el tipo de sociedad que se va conformando.

Porque el ‘mercado es perverso’ y su fría lógica de máxima plusvalía, sin sensibilidad social y carente de factores humanos esenciales, empuja a contradicciones que asemejan siempre más a una tiranía embustera y burlesca: como por ejemplo que millones de habitantes y ciudadanos, trabajadores, sean arrinconados  y amontonados en largas listas de espera para recibir salud, y aun así igual deben enlistarse en pagos, aunque mínimos, de un sistema que nos les acoge ni les da la atención que se supone la red estatal debiera garantizar. Mientras por su lado la riqueza de los menos se desborda y agota en  cifras siderales para integrarse al privilegio de  ser atendidos como seres humanos. Y esta realidad es una ‘contradicción’ porque la salud y el bienestar de las personas es garantía de progreso, de menores gastos para el Estado (porque hay debida prevención), de mayor productividad y creatividad, de amplia capacidad de integración, y, por ende: de propensión a la Paz como estado permanente de desarrollo personal y colectivo. Mientras que la injusticia y la desigualdad en este plano esencial crea más enfermedad, amplía la gama de males en las personas y eso se traduce en secuela de desanimo, improductividad, carencia de creatividad, indiferencia social, rabia, dolor, impotencia y frustración.

Un pueblo saludable y con acceso eficiente y garantizado a la salud es un pueblo que no renunciará a La Paz que aquello genera.

Usamos el mismo análisis de la contradicción que produce ganancia para unos pocos y el mal efecto para la mayoría que deriva en  aquella ‘pacificación de los sometidos’ y en  la ‘paz para los potentados’  (que es caldo de cultivo para los estallidos sociales, para los populismos, para los movimientos fascistas bajo diferentes banderas y pretexto ideológico, o las revoluciones armadas de variado cuño): y  trasladamos esta irresoluta dicotomía  al tema de las pensiones, o al asunto de la vivienda, o al modelo laboral, o a las políticas medio ambientales, o al engranaje financiero, bancario y económico, a la Educación; o al tipo de ciudad que destruye los modos de convivencia y complica la conectividad haciendo de la vida de las personas un calvario que redunda en deterioro de la salud mental, anímica, física…y social… pero que en cambio genera ingentes ganancias a las frías y ambiciosas empresas de la construcción.  Contradicciones múltiples porque hablamos de un sistema hecho por Hombres que afectan y dañan  a muchos Seres Humanos, y postula ciegamente a la riqueza en crecimiento de una casta que impera bajo un remedo de democracia carente de derechos reales. Eso es contrario a La Paz.

La violencia como producto de un estado de cosas mal habido, peor concebido y siempre injusto, debe ser contrarrestadas por medios políticos. Si a la cabeza del estallido social se hallaren fuerzas identificables y dirigencia bajo siglas y propuestas abiertas y manifiestas: sería urgente establecer dialogo y transacciones con aquella cabeza dirigente con el propósito de concordar el fin de la violencia y encaminar procesos hacia la Paz:  la que esta vez debe basarse en Justicia Social y sustentarse en una mayor y más participativa Democracia.

Pero si la violencia no contara con fuerzas políticas dirigentes con las cuales entablar puentes, – y ésta fuese palanca de extractos de subproletariado inorgánico, con el aprovechamiento de bandas delincuenciales y el empoderamiento de sectores acráticos que dan al movimiento el barniz político que no guarda sustancia ni contenido, limitándose a consignas y títulos de agitación–  la solución política a ese cuadro  sería  construir una mesa de acuerdo social y político que incluyese a las fuerzas representativas de cada sector en pugna y contraposición: salud, trabajo, vivienda, pensiones, educación, ecología, etc. etc.  para desde ese dialogo llamar a que en conjunto se aísle la violencia; y con ese peso político el gobierno pudiera entonces identificar, separar y detener a los gestores del vano enfrentamiento, sin por eso tocar, menos reprimir al pueblo que protesta y se manifiesta, (y claramente no confundir las aspiraciones sociales y a sus interpretes con las expresiones de violencia sin fundamento político).

Contrario a la Paz y conducta  en favor del desorden que ocasiona la violencia es: 1)  no tender puentes hacia los sectores sociales y sus organizaciones para acordar hojas de ruta que superen las causas del malestar social- o quizá hacerlo unilateralmente desde el gobierno, según propios objetivos y sesgada visión– ;2)  considerar indiscriminadamente que representantes sociales de las demandas, y/o partidos que apoyan los reclamos, son cómplices de la violencia y debieran ser éstos los llamados a detener a quienes prosiguen su arremetida de fuerza; 3) intentar acuerdos de cúpulas e institucionales sin consideración de la realidad social, para luego incluso cuestionar su cumplimiento debido a que estos pactos – de por sí-  ‘no apagaron el incendio’; 4) usar primero la fuerza desproporcionada en el momento de mayor auge de la confrontación, para luego aplicar la ‘retirada estratégica’ de la fuerza publica para agotar el movimiento social mediante la violencia de una minoría que debe ser enaltecida y abundantemente publicitada  por los medios de comunicación; 5)  y a su vez enrolar todo acto social y de protesta legitima en la misma rueda violentista de grupos que- además-  es posible identificar  y no debiera ser complejo apresarles si hubiere voluntad política… (y no se procede a su finiquito porque la violencia al final sirve a los propósitos de las posturas más conservadoras y cavernarias)… ¡esta es la fórmula para el caos que llama a intervenciones de  carácter autoritaria y tiránica!

Cuando un gobierno no trabaja para la Paz: es porque la violencia de algún modo sirve a intereses no declarados que benefician el statu quo rígidamente establecido. La violencia sin cabeza política es un instrumento manipulable que siempre sirve al poder causante de la crisis. La violencia con cabeza política- en cambio-  siempre postulará al termino y conclusión de cualquier estado de guerra y confrontación. Estas son normas básicas de la política. 

Sin duda alguna: el acuerdo para iniciar y concluir un proceso  para una Nueva Constitución fue y ha sido el único punto loable y acertado de la casta política: en parte asustada por el inesperado estallido social, en parte necesitada de ganar tiempo para readecuar su lente político, y en pequeña porción siguiendo una legítima aspiración por la Paz y las soluciones pacificas que impliquen cambios que beneficien a la democracia.

Estos últimos(‘ siguiendo una legítima aspiración por la Paz´) no cambiarán su plan ni condicionarán su parte en el acuerdo; sin embargo, quienes ya han ajustado su óptica política según la nueva realidad: ahora van por los matices y los detalles en los que se juegan los intereses políticos particulares; pero los asustados retoman aire, esconden su manchada ropa interior, recomponen su imagen y recuperan color en sus rostros, y ahora sacan la bronca voz de patrón que estuvo silente por la turbación: amenazas de romper el único acuerdo inteligente de la clase política, inercia sospechosa ante la ahora muy forzada  violencia callejera (que sería fácil desbaratar); construcción de ‘opinión publica’ mediante campañas que por majaderas  horas insisten en ‘la violencia con rostro’ que boicoteó la malograda y obsoleta PSU. Para llegar a la amenaza de bajarse del proceso constitucional.

Un intento burdo y absurdo por parte de los ‘arrepentidos’ (ahora recompuestos de sus horas de terror) que ojalá impida esa hora fatal y terrible en que los y las Constituyentes establezcan – por ejemplo- que este ‘Estado subsidiario’ sometido al ‘mercado’ ahora cambie por un ‘Estado Social de Derechos que resguarda el Bien de la ciudadanía por encima de todo otro interés particular, corporativo, mercantil o foráneo’;  y establezca que:  ‘Los Bienes estratégicos de la Nación, como el Agua, los Minerales, el Mar y sus productos, la Agricultura y la red de alimentación, la salud, la Educación y la Vivienda quedan bajo resguardo Constitucional cuyo propósito es asegurar de todos modos que dichos Bienes Ciudadanos y de la Nación no puedan ser regidos por criterios especulativos,  y su desarrollo y producto se enmarque en una política de progreso y bienestar, y si acaso sustento y apoyo,  a cargo del Estado, (aunque  si en  parte de su gestión y administración pudiera permitir participación  de carácter comunitaria, cooperativa o de asociación ciudadana, o empresarial NO- Monopólica) , siempre y en todo caso  bajo resguardo y fiscalización real del Estado por tratarse de Bienes Estratégicos de toda la Nación’

Acápites como estos son los que aterran a los que hoy se benefician del ‘Estado subsidiario’: ‘Estado subsidiario’ garantizado por la actual Constitución, y  que es raíz y causa  de toda la  convulsión actual.  Por esto mismo la batalla política por cambiar la actual Constitución es un hito que la Democracia y los demócratas amantes de la Paz NO podemos perder, ni dejar que caiga.

 

Chanfreau

Mi hermano Antonio estudiaba en el liceo 6 de nuestra comuna, San Miguel. Alfonso era su compañero de curso: su familia tenía una hermosa casa antigua en la esquina de Berlín con Chiloé, en donde una pareja de perros buldog parecían montar guardia cada vez que nos deteníamos en esa esquina a esperar la micro ‘Mapocho – Lo Vial’ que nos llevaría al centro.

Alfonso ayudaba a mi hermano con el francés: idioma obligatorio que en ese entonces. También era muy capaz con las matemáticas- decía  mi hermano- Sólo una vez acompañé a Antonio a esa hermosa casona de muebles solidos y grandes. Pude verificar que los perros eran mansos y juguetones.

Meses antes del 11 de septiembre de aquel año 1973, junto a Washington Maturana y mi hermano íbamos justamente en la ‘Mapocho -Lo Vial’ a  una marcha de nuestro partido: el MIR. Llegamos cuando ya iniciaba el cortejo: cañas de bambú con banderolas del movimiento, filas ordenadas, consignas gritadas con disciplinado fervor; adelante, siempre sonriente, estaba Alfonso. Un fuerte abrazo con mi hermano, saludos y apretones de mano. Coincidentemente a escasos metros de él también nos saludaba ‘Quico’: amigo de adolescencia temprana, pololo de  Miriam, -la morena que agitaba mi impúber corazón-, con la cual entonces Quico se había casado; y para nuestra sorpresa  también él hacía parte del MIR. Más abrazos, saludos e intercambios de información sobre otros amigos en común de aquellos despreocupados años de fiestas y malones, ahora lejanos.

Alfonso Chanfreau y el Quico – también Washington Maturana- fueron apresados por la  nefasta DINA  después del golpe de Estado. Los tres están desaparecidos. Ninguno de los tres fue apresado con armas, ni combatiendo desde las trincheras: los tres cayeron en medio de su rutina sin nunca oponer resistencia. Torturados, vejados y posiblemente masacrados… esfumados entre las tinieblas del oscuro tiempo.

Hoy veo y escucho  al nieto de Alfonso -Víctor-   hablando en su calidad de dirigente estudiantil: no pude evitar escuchar la voz rebelde del hermoso joven  que fue su abuelo, imposible fue no notar la inteligencia y la firmeza de una herencia que misteriosamente parece burlar a los asesinos…como si los muertos desaparecidos siguieran clamando justicia desde la fuerza de su descendencia.

Luis Heinecke Scott: Mi Replica

El profesor Luis Heinecke Scott escribe en su librito ‘…caso arsenales y atentado presidencial’, lo siguiente: ‘Un hallazgo muy simpático, es que, curioseando por Internet, me encontré con que uno de los terroristas que estuvieron en el atentado al general Pinochet ¡fundó una iglesia! Se trata de Ricardo Andrés Urrutia Vargas, alias «Camilo» o «Sebastián» que ahora es muy activo en Internet con su iglesia «El Gran Fundamento, de Carismas Obra Sacerdotal para la Consagración del Creyente». Yo creía haberlo visto todo, pero me faltaba esto’

Tratándose de un hombre con ínfulas tan elevadas y muestras evidentes de prepotencia intelectual… este ‘experto’ en historia escrita con firme mano derecha, sin embargo, no se da el trabajo de ‘seguir curioseando’ y arribar a las posturas doctrinarias que se exponen justamente en la página ‘El Gran Fundamento’, y de paso, seriamente, como todo un investigador que se considere, indagar el Blog personal del ‘referido terrorista’- (El Andariego wordpress)-.

Tampoco menciona un hecho judicial de importancia, a saber: que detenido el año 2009 bajo la acusación de haber participado en el atentado en contra de Pinochet, he reconocido ante el ministro Solís mi ex – pertenencia al FPMR pero negué mi intervención operativa como parte del grupo de fusileros, según imputaba la fiscalía militar. Y queda en expediente que la acusación especifica en mi contra se basaba en una supuesta declaración de Marcial Moraga, la cual fue extraída bajo tortura.

La curiosidad cibernética de este ilustrado de la historia según parámetro político de parte, no se convierte en indagación responsable; y según su rígido esquema mental expuesto, para él, un hombre no puede cambiar y jamás pudiera tomar rumbos diversos en su vida; precisamente por su título debiera asumir con sentido de realidad que las personas van ocupando roles según van transitando por la historia; y la opción que escogemos insertos en el tiempo objetivo va agotándose según culmina la realidad que nos forma y condiciona.

Tal vez, bajo la inflexible concepción del profesor, un ser humano en 60 años debiera quedarse siempre según aquello que Es… enclavado en una etapa de su existencia; pero- en cambio- la vida, la naturaleza y la realidad social se mueven, cambian, son dinámicas… y los Hombres van moviéndose, mutando y adaptándose con (a) la realidad que les circunda. Así también se va haciendo la historia.

Para el sistema cuadrado del sr. Heinecke no es posible que un supuesto ‘terrorista’ (en realidad un miembro activo de la resistencia a la tiranía en Chile) pueda insertase en democracia con todo el derecho que le cabe por ser chileno y por haber luchado por la libertad; tampoco es posible para su odiosidad intrínseca que en democracia se escriba y se hable, se plantee y se mantenga una postura absolutamente contraria a la violencia, –como consta en mi escritos, mis libros, mi blog y mis conferencias (que puede hallar…si sigue curioseando…en YouTube…en Facebook…)– porque antes, bajo dictadura, concordó con el uso de la fuerza: y esto debido a su ecuación simplista que dictamina que alguien que bajo tiranía asumió las armas para enfrentar el oprobio,  ya nunca más podrá renunciar a la violencia aun hallándose en democracia. ¿Quién estableció esa ley tan tirada de los pelos? Porque podemos discutir sobre la validez (o no) de la violencia política en democracia y la necesidad de la fuerza de resistencia bajo un sistema tiránico. Es un tema ya planteado en las aulas universitarias desde hace decenios, y ha sido causa de documentación en la arena de la política internacional. Incluso es arista abordada y polemizada en el seno de la iglesia católica.

¿Por qué el señor Heinecke es tan irrespetuoso y carente de prudencia? al sostener de la nada, apoyado en su propia soberbia, que un ser humano, una persona, que participa en eventos y hechos que atañen a la historia de un país, ha quedado prisionero de su rol y opción para siempre, sin importar si esto es real, y careciendo de la información fidedigna que atestigüe que, por ejemplo, mi persona sigue- según su creencia- impertérrita, inamovible y encastrada en (por) mi paso por el FPMR.

¿Tanto cuesta aceptar la riqueza humana que luego de pasar por la violencia y las guerras logra el cobijo en su fe sin renunciar a los valores libertarios que sustentan su índole y espíritu? Ejemplos de conversiones y saltos optativos de envergadura está repleta la historia…esa que el profesor debiera bien conocer.

¿Cuál es la causa del espanto sarcástico del catedrático?… ante una persona que no vivió toda su existencia en el FPMR, sino que pasó por este trazo del acontecer, pero ya antes tenía vida- que él ignora- y después siguió descubriendo una intensa vida de la que obviamente nada puede saber este señor que se alza cuan juez de retratos construidos a propio modo. Según su paradigma infranqueable: esto de ‘pasar de ser terrorista’ a ser ‘casi un cura de iglesia’ (tratando de entender su coloquio interno) es imposible; si acaso se trata de un encubrimiento, de simple mentira para propósitos secretos y espurios. ‘Un terrorista será siempre un terrorista’.

Deduzco entonces que este soberbio historiador no es una persona de fe: porque en todo cuerpo de fe que se considere ‘bueno’ para el Hombre existe el perdón como ruptura con ese pasado que debe ser superado, y se postula a que el cambio derivado en nuevas obras logre definir la coherencia del verdadero arrepentimiento. Son conceptos de fe que poseen todas las buenas corrientes de creencias.

Pero debemos ir más a fondo: ¿hay un sentido humano en el frío análisis de los hechos que relata un historiador? Porque si son PERSONAS las que hacen la historia e interpretan los hechos: ¿habrá en el interno de esas personas un mundo emocional, espiritual, de ideas y de percepciones propias y propensas al cambio? Porque plantear los hechos y la historia como un cuadro estático en donde los personajes quedan petrificados bajo epítetos y genéricas didascalias… es una pésima forma de entender la evolución humana, y a los Hombres haciendo su historia.

Si yo hubiese fallecido haciendo parte del FPMR, y mi periplo llegara hasta ese punto: claro, entendible sería que lo mío fuese militante al cien por cien: porque hice parte de la izquierda desde mis 14 años y rompí con esa vida pasada a mis 37 años precisamente cuando me alejé de las filas del Frente por serias discrepancias políticas.   Pero desde mis 38 años, hasta hoy, que alcanzo ya los 67 años, he dedicado mis esfuerzos y labor a la enseñanza del I Ching…y recomiendo a su capacidad curiosear en búsqueda del significado de este tema antiguo de origen chino… y he publicado un libro sobre este tópico que ha sido un aporte para los círculos que siguen y estudian este argumento. Puede también curiosear en ‘página del I Ching en Chile’ o http://www.iching.cl

Desde finales del año 90 mi opción de vida se mueve firme por el universo espiritual, y de búsqueda de la Sabiduría, y de la Coherencia de Fe. Sigo sosteniendo opinión y parecer político…pero no hago política militante… y las bases de principios y valores como la libertad y la justicia yacen en mis fibras como en el primer día de mi despertar.

Desde 1997 nos unimos un grupo de personas que habíamos ya transitado un cierto tramo de experiencia espiritual y de búsqueda de respuestas (desde finales de 1991) para consolidar nuestra mirada de vida más allá de lo mundano y material: entendemos entonces que Cristo no era quién enseña el cristianismo, y como CRISTICOS sin pretensión de iglesia alguna nos dimos una organización propia que, gracias a que vivimos en una democracia y rige el Estado de Derechos en Chile, pudimos colocarnos bajo la Ley de Culto, tramitar nuestra personalidad jurídica y trabajar en todo Chile y en Bolivia desde entonces.

No fundamos una ‘iglesia’. Somos personas LIBRES mancomunadas por un orden espiritual abierto y sin secretos. Nuestro ideario y doctrina es pública. Nuestros estatutos están expuestos en nuestro portal.
La dirigencia de nuestra congregación es colectiva, y los nombres y cargos están también publicados, y bajo cualquier petición correcta nosotros accedemos a brindar lo que se requiera de nuestra orgánica.

No seguimos a una persona: seguimos a nuestra fe y nos empeñamos en la Coherencia de Fe. Nadie me sigue cuan cordero: ni entre quienes comparten las enseñanzas de sabiduría del I Ching, y menos entre las personas Cristicas: todos y todas personas maduras, libres y con criterio formado. Y no sólo nadie es becerro detrás de mi pastoreo: además yo mismo he sido firme en evitar cualquier tipo de dependencia y sectarismo que obnubile la libertad de conciencia de las personas. Nos respetamos, nos escuchamos, sabemos reconocer a quienes aportan más por su experiencia y sapiencia: en fin: somos personas normales que aman su libertad y van adelante por la vida siempre con la verdad.

La verdad, señor Heinecken, son los hechos: y para corrección de los hechos que ud. ha presentado como su verdad… y de mi parte exponer la realidad según mi versión para que los perros de la calle ya no busquen huesos que lamer… es que me gustaría enviarle un libro de memorias sobre mi vida pasada, en donde pongo las cosas en su centro, obviamente según mi vivencia y los hechos por mí interpretados (y no imaginados o imaginarios)

Pero considere ud., como cualquier lector inteligente, que aún sigo con vida, y por ende mi camino no se ha cerrado todavía, y eso quiere decir que no obstante nadie- menos ud.- puede encuadrarme en un todo determinista según una existencia -supuestamente- ya consumada. Por la simple razón y verdad que mi vida no ha culminado, y he sido mucho más que un episodio, y espero interpretar aún muchos más actos en esta vida.  Y para su información: después de mis años de combatiente… confieso que he seguido viviendo a pleno…lo reconozco… soy culpable de aquello.

Porque antes de mis 14 años- cuando entro a las juventudes comunistas- yo ya existía, y antes de ingresar al FPMR ya tenía un largo y variado recorrido en militancia política, y además vivía haciendo otros oficios, y VIVÍA… (quizá para ud. esto de ‘vivir’ no tenga una connotación particular, pero para mí ‘vivir’ es intensidad, es sentir, es comprender, es aprender, es crecer extrayendo lo mejor y mejorar reconociendo lo peor…en fin: la vida es CAMBIO y vivir es sabiduría…y no solamente conocimiento…señor profesor) . Y después de mis tres años y medio en el Frente yo sigo vivo, y viviendo; y porque vivo y existo: cambio, reflexiono, experimento, aprendo, crezco y no me quedo enredado en el pasado. Y me he atrevido a entrar en este camino espiritual y de sabiduría que usted seguramente confunde con religión y con forma común eclesiástica. Lo comprendo: no es lo suyo.

Pero para ud. yo morí como ser humano y me clavó en la historia, la suya, la que ud. se inventa bajo su erudición aceptada por ciertos círculos; y ahí quedo yo como eterno ‘terrorista…’ que – ¡lo que faltaba…!  ¡levantó una iglesia!

No sé si su sorpresa sobreactuada confirma que yo sigo siendo lo que ud, quiere que yo siga siendo: o demuestra sus límites y cortas fronteras de visión humana.

Lo invito: una vez que curiosee por mis páginas y trochas virtuales, -y quizás se consulte usted con sus viejas fuentes de la inteligencia ligada de alma e ideario a la dictadura-, a que me escriba y nos juntemos a conversar mirándonos a la cara, como personas cultas y que se respetan en las antípodas. Lo cierto, don Luis Heinecke Scott es que ofrezco la posibilidad de atacarme desde datos reales y demostrables, y si acaso argumentar en mi contra desde aquello que ahora soy, y no solamente según aquello que hace casi 30 años fui. Porque lo que más me molesta de su liviandad es lo parcial de sus fuentes y lo jactancioso de sus comentarios: hiere mi inteligencia.

Gusto tener enemigos y contrincante fuertes, con sólidos argumentos, con capacidad intelectual sostenida en la realidad y en ideas claras; para eso me pongo a su disponibilidad: para dar a ud. el material que eleve el nivel de sus ponencias cuando se refiera al ‘terrorista’ que usted ha paralizado en su museo mental.

2020: cuando comenzamos la Revolución Desarmada

Lo más claro que nos entrega la rebelión ciudadana durante el año 2019 es todo aquello que ya no queremos, el conjunto de políticas que ya no dan respuestas, los puntos precisos de abuso y desigualdad intolerables, las injusticias que no pueden seguir gobernando.

El estallido social de octubre (11/19) permite tomar el pulso a la realidad violenta que pulula entre las capas más empobrecidas -y políticamente menospreciada- de una sociedad enferma de ceguera auto inferida. Y reescribe los intereses políticos de la manoseada ‘clase media’: prioridades que  demuestran hallarse en lugares muy diferentes y distantes de aquellos en donde la teoría liberal los colocaba, y la izquierda nunca supo dónde ubicarles.

La ‘confusión’ de la clase política en general se debe a su apego interno, y no declarado en forma nítida, a los modelos y moldes ideológicos del siglo veinte, los cuales proponían soluciones y salidas bien cimentadas en teorías densas y sumamente discutidas, y mejor escritas por ilustres teóricos y doctores de las ciencias políticas.

Tal bagaje- ahora inútil- sigue aflorando entre los liberales que asoman cabeza sobre el pantano de la derecha, y se mantiene fuerte en el inconsciente colectivo de la izquierda en su entramado global.

La derecha recalcitrante- por su sectaria parte-  lo tiene claro: cavernas, mazo, dictadura, militares salvaguardando grandes intereses civiles, oligarquía asegurada y millones de pobres felices de su miseria, y muerte para los sublevados.

Ya no hay una ‘ultraizquierda’ ideologizada y pragmática como sí la hubo hasta la década de los 80. Ahora existe un área oscura e imprecisa de antisistema, y el viejo anarquismo nihilista que sueña con llamas voraces y sociedades imaginarias, y nostálgicos del catastrófico socialismo que  reproduce los mismos fenómenos profundamente antidemocráticos del fascismo. Pero estos últimos ya no agitan sus banderas ante las asambleas vociferantes: ahora  mantienen fidelidad a sus aspiraciones solamente en ‘las internas’ mientras que hacia afuera juegan con cierta ambigüedad democrática que disfraza realidades injustas y violadoras de los Derechos Humanos, y contrarias al Estado de Derecho…como Venezuela, Cuba y Nicaragua.

Un alcalde comunista que ha hecho buenas cosas por su gente en Recoleta respondía a una demanda periodística: ¿quién está más a la izquierda: los comunistas o el Frente Amplio? Y su respuesta fue: ‘nosotros, los comunistas, porque al igual que el F.A somos declarados opositores al modelo neoliberal, pero ellos no se declaran abiertamente anticapitalistas…y nosotros sí’. Según esa respuesta el anarquismo está en la izquierda coherente: porque no solo es antineoliberal, sino que odia al nefasto capitalismo hasta en su hedor. Pero la respuesta del personero del PC  es parcial, pues los comunistas chilenos aún abrogan por el socialismo de viejo cuño que nunca se ha zafado del capital, ni de la gestión capitalista de los medios de producción, ni de la administración capitalista del Estado, y menos de las reglas esenciales del Mercado: travistiendo ese capitalismo paupérrimo según  vestes ‘socialistas’ cuyo ropaje ahora cubre a una nueva oligarquía que por necesidad ‘revolucionaria’ debe restringir la democracia ‘burguesa’ y consolidar un fuerte Estado militarizado sustentado en una sólida malla de agentes propios bien diseminado entre la masa que garanticen control y movilización permanente para impedir el accionar del ‘enemigo’ tanto externo como interno. Es decir: el mismo modelo del fascismo, ahora con ropaje socialista… en su brutal imposición en contra de la democracia.

Porque el meollo de todo asunto hoy es La Democracia. Desechar la democracia es un suicidio, un viaje a los abismos. Sostener que ‘la única democracia posible’ es aquella que brinda la buena gestión de los poderosos oligarcas gobernando sobre millones de receptores de migajas que chorrean de la gran mesa de las exclusivas y excluyentes riquezas particulares: es una gran falacia. Y el terror de la clase política – de izquierda y derecha- hacia una democracia distinta, amplia, diversa y sobre pilares de igualdad deriva de la potente incertidumbre  que les advierte que bajo nuevas reglas democráticas ellos, los de siempre, perderían el control y asistirían a la propia extinción.

Si cambiamos el paradigma y nos volvemos a la realidad, debemos aceptar que en este mundo actual, y de acuerdo a la larga historia del Hombre, el capital es un medio de intercambio que genera riqueza, y el asunto no es si eliminar el capital, sino  destronar la concepción capitalista que entrega al Mercado no solamente el poder de regular la injusta repartición de la riqueza, sino que concede a una pequeña y férrea oligarquía – de derecha o de izquierda- la gestión y el control del Mercado y por ende del sistema capitalista… el cual podrá tener en su seno ‘mayor justicia social’ o ‘menos sensibilidad social’: porque el mismos orden capitalista tradicional ahora con el agregado de ‘capitalismo social de mercado’ es una entelequia para cazar incautos y asegurar los privilegios que pueden pasar de tal grupo oligárquico a otro grupo de la misma calaña.

Dos fundamentos deben regir a una Nueva Democracia: 1) el Hombre en su Dignidad; 2) el Ecosistema y el medio ambiente.

Rompiendo con el anquilosado y restrictivo esquema de ‘la izquierda’ y ‘la derecha’ (que ya es una revolución cultural necesaria y urgente), ahora la sociedad debe considerar que la gestión del capital y la regulación del Mercado deben favorecer siempre al Hombre en la Plenitud de su Dignidad y Derechos; y debe considerar para su desarrollo y expansión armoniosa la realidad sustentable del Ecosistema y el resguardo del Medio Ambiente.

Siguiendo este principio que debe ser Constitucional, la sociedad moderna debe cimentarse sobre el desarrollo humano en su más amplia gama y capacidad, extinguiendo el sentido puramente mercantil de la vida social y del trabajo: siendo el concepto de trabajo un empeño creativo que dignifica a la persona si ésta realiza su labor según propia aspiración, capacidad y libre opción. En modo que su producción, en cualquier ámbito, sea parte integrada a la red social que se enriquece en la diversidad y en la amplitud de la capacidad humana.

Una sociedad que apunta al futuro: a las energías limpias y renovables, a los nuevos sistemas productivos, y a formas libres de trabajo. En donde la educación se coloca al servicio de la necesidad del Hombre, y del desarrollo y protección del Medio Ambiente, dando impulso a la creatividad, a las ciencias, a la investigación y a las nuevas tecnologías… sin mermar lo fundamental de la sociabilidad y sensibilidad humana.

Un sistema político democrático cuyo centro de decisión y poder esté realmente en la gente, en el pueblo, en las personas: cargos de representación sin condiciones elitistas, con sueldos establecidos por ley que impiden privilegios en concordancia con una política de servicio público decente y transparente; con debido poder de destitución reglamentada en su proceso y forma, y con formula Plebiscitaria y de Consulta Popular Vinculante ante leyes y decisiones vitales que no logran consenso o que  por su importancia deben ser llevadas a Referéndum.

Una democracia que elimina la putrefacta idea del ‘castigo’: cambia y transforma su sistema carcelario bajo orientación de reparación, formación y reintegración social; elimina la idea arcaica que obliga al Estado a poseer ‘sistemas represivos’ que ‘garanticen el orden público’, lo que corresponde a la jodida teoría de la ‘violencia necesaria’ y al ‘uso exclusivo de la fuerza de parte del Estado’: todo lo cual es profundamente violento. Porque la Paz, como concepto de desarrollo y condición social que debe partir de la Persona, no debe quedar afuera de un proyecto de Nueva Democracia. Y las Fuerzas Armadas deben reemplazarse por Fuerzas de Servicio Civil cuya misión de Paz y Servicio debe preparar guerreros para la Paz y no soldados para la guerra.

Todo es posible con la Educación concebida desde el principio que determina que para Ser Libre y construir Libertad es fundamental la Información, la Formación democrática, y el conocimiento sin murallas ni cortapisas;  por ejemplo: se enseñará Religiones Comparadas  con exposición de toda forma de creencia y practicas de Fe para que la persona desde la niñez tenga la visión amplia y completa que permita libremente y por opción consciente elegir su Creencia, Fe y Camino Espiritual  o práctica religiosa…u optar por nada en este terreno. Porque para Optar es imprescindible ‘Saber’  y tener la mayor información posible. De este modo además se evitan las ‘guerras religiosas’, y los ataques a la libertad religiosa o el acoso y persecución a las vías Espirituales libres y al margen de los sistemas religiosos institucionales; y se destrona la vieja religión usada como eje de poder oligárquico y encubrimiento de la corrupción en su peor manifestación.

La misma Educación debe garantizar conocimiento, Información y Formación política de acuerdo con la Historia  Comparada y a las Ciencias Políticas Básicas, y al debate abierto entre posturas diversas: de modo que por tal libertad se pueda optar. Porque en la opción informada, y formada en la sapiencia, descansa la Libertad, y en la Libertad hay garantía de desarrollo y crecimiento de la Conciencia en el Hombre.

Una EcoDemocracia exige  la VOLUNTAD de CAMBIAR por parte de cada individuo o de la mayoría de éstos. Sin la disponibilidad para REVOLUCIONARSE  en la propia persona, y con  la decisión de botar esquemas y viejos paradigmas, – sin temor a lo nuevo, optimistas y confiados por lo nuevo que traerá soluciones modernas, –   ya no postularemos, nunca más, a caminar hacia adelante mirando al pasado, oteando  hacia lo  viejo para hallar allí seudo modelos ya probados, agotados o inservibles, con la vana  intención de  colocarlos forzadamente en el porvenir. Ahora debemos atrevernos a enfrentar el futuro con armas, herramientas y mentalidad de futuro.

Es Urgente y necesaria una Revolución Desarmada: que destrone definitivamente en nosotros y en nuestro modo de concebir la realidad, la sociedad y la vida, aquellos  esquemas y paradigmas del siglo veinte, nacidos muchos de ellos en el siglo diecinueve, heredados casi todos de ciclos oscuros e imposiciones decimonónicas.

Una Revolución Desarmada que debe desestructurar no sólo el ‘modelo’ sino que la idea misma de sociedad, la idea propia de humanidad, la visión obsoleta y antigua que aún conservamos de nosotros cuan monada carente de Inteligencia Superior:  ya  no más pensarnos como algo más que bestias  en evolución lenta y esclava de supuestas condiciones  restrictivas que nos impide un Salto cualitativo de Mayor Logro.

Ahora tomemos en nuestras manos nuestra condición de Seres Inteligentes en grado de Discernir nuestro propio desarrollo sin traumas y limitantes inoculado por una falsa ciencia pasada y una falaz religión antigua que nos implantó la mentira que enseñaba que nosotros, como seres inferiores, requerimos ser tratados igual a becerros arreados cuan  redil de  inconscientes e ignorantes, siempre a merced de la guía del experto patriarca  oligárquico.

Y esta Revolución debe ser Desarmada y No Violenta: porque la violencia y las armas son la peor herencia del viejo sistema de opresión que nos hundió en la necesidad imperiosa de la revolución violenta y armada para romper con las armas y violencia de otros: en un eterno periplo de sangre y muerte que ambos bandos glorifican alzando héroes y mártires cuya herencia es la señal para nueva violencia, otras guerras, más muertos y nuevos héroes que alabar para seguir matándonos entre nosotros… movidos por  el orgullo del criminal que justifica sus absurdos.  ¡Salgamos de esa lógica de muerte!

La violencia, todo tipo y en todas sus formas, es la señal más evidente de nuestro atraso cultural y de nuestra incapacidad para evolucionar cuan Seres Inteligentes y Superiores.

Un Hombre Nuevo, un Nuevo Ser Humano nacerá de nuestra propia Revolución Interior, y desde una Revolución Desarmada  que rompa con los tiempos de la prehistoria que aún nos encierra entre sus fauces de atraso y oscurantismo.  ¡Comencemos a Hacer La Historia!

28 años de Dispensación de Paz

Este 21 de diciembre 2019 cumplimos 28 años de Dispensación de Paz y de Camino Espiritual bajo dos sólidos rieles: La Sabiduría y La Consagración.

Hace 28 años el mundo era otro, y todo mal que ahora entra avasallante en su crisis manifiesta, recién se mostraba ante los ojos expertos o sensibles, y mucha estructura religiosa y política gozaba aun de buena apariencia, e impunidad. Chile entraba en su periodo de reconstrucción democrática no sin dificultades y amenazas. Era otro Chile, no el de hoy.  Y enseñar y proponer aquello que desde entonces proponemos y enseñamos: no era ni simple ni fácil. Aquello que hoy parece natural y hasta lógico: en aquellos años era resistido hasta con violencia y calificativos peyorativos.

El año pasado (18) escribí esta nota en Facebook que la repropongo por considerarla vigente y actual.

 

Hace 27 años…un 21/12/1991

Nadie se ilumina- o trasciende su condición carnal y terrenal básicas- siguiendo a otro ser humano cuan oveja detrás de su pastor.

La experiencia de uno puede ser luz para otros: pero para elevarse por encima del humano básico y lograr la Virtud del Humano Logrado, siempre será irreemplazable la altura de la Conciencia propia y de la relación personal con Dios.

El 21 de diciembre del año 1991 viví un hecho personal cuya preparación fue mucho más larga en tiempo y en hechos de lo que yo mismo creí (y que después de años he entendido). Ese 21 del 12 del 91 mi vida se quebró en dos: un pasado bien definido, y un presente que ha determinado lo futuro de forma definitiva y definitoria.

Aquello que soy, desde ese 21/12/91, no es lo fui antes de ese día: a las 21 horas de aquel día, hallándome entre rocas talladas con petroglifos, al interior del valle de Aconcagua, en zona Putaendo-Piguchen, aconteció un hecho que solo tiene asidero pleno para (en) mi persona, y sobre el cual – obviamente-  nadie más puede adquirir vivencia, experiencia y menos transformación.

Por lo mismo: no es este evento, vital para mi existencia, aquello que enseño y comparto desde entonces; ni menos coloco los hechos acontecidos en este trance como una panacea a seguir, cuan causa para que otros y otras hagan de sus caminos un remedo del mío. ¡Nada de todo aquello!

Si embargo, si el estallido en los cielos acontecido en esa hora y en aquel día- y mi profunda vivencia interior – hubiese sido un único acontecimiento personal, y nada más: sería entonces una experiencia intima destinada a provocar los cambios silenciosos que mi conciencia debía atesorar.
Pero luego, en los días siguientes, por nueve semanas y media, y en especial desde el 11 de enero del 92 – y durante todo febrero de ese año- en el mismo lugar de la montaña  los hechos, eventos y experimentaciones también fueron colectivas. El 11 de enero del 92 hubo 44 personas. Hasta el término de ese tiempo (de dos meses y medio): habían pasado por diversas experiencias y vivencias cerca de 120 personas.

Entonces, de esas vicisitudes y hermandad en la experiencia colectiva nacen los grupos de meditación ‘Tao Cristicos’. Luego vendría ‘la obra de consagración y sabiduría’, más tarde: ‘el movimiento carismático-evangelista’; y ahora: el Movimiento de Fe Cristico. Y en línea de permanencia: La Sabiduría cuan centro motor cuyo corazón es el antiguo Canon de las Mutaciones (I CHING).

Y fue precisamente este aspecto de cuerpo lo que en definitiva crea un movimiento de carácter espiritual: en donde las enseñanzas, formas y formulas, métodos y contenidos, doctrina y ejercicios, símbolos y oráculos… todo en su conjunto fue conformando experiencia y vivencia en cada persona participante, y con ello: luchas, contradicciones, victorias espirituales y ascensos en la conciencia de quienes PARTICIPAN  y han sido parte de este andar…y no solamente ‘observan’ o son ‘asistentes pasivos’.

Siempre, desde aquellas nueve semanas y medias- hace 27 años- en las montañas precordilleranas plenas de señales ancestrales, el asunto fundamental ha sido el COMPROMISO PERSONAL con la propia senda ESPIRITUAL: haciéndonos responsables de nosotros mismos, y nunca culpando a otros por nuestros fracasos y derrotas; y solo aferrándonos  a nuestro Espíritu en el combate: porque sabemos que el Espíritu que nos vive es Dios en nosotros.

Cristo entra en esta revolución como un rayo golpeando nuestra oscuridad: lo resistimos al inicio, pero enseguida debimos asumir que nada sabíamos del Cristo real, y que nuestra reserva y cautela era ante la religión que había usufructuado y manoseado su nombre y verdad.

Todos y todas quienes en estos 27 años han pasado, han permanecido, o se han estacionado…y mejor si han evolucionado, y muchísimo más alentador si se han revolucionado… han recibido enseñanzas, sistema, ejercicios, doctrina, claves y formulas, tipo de organización, sellos y oficios, sacerdocio voluntario, oráculos y Discernimiento;  y nos hemos reunido en retiros, eventos, seminarios, escuelas; y organizado en núcleos y cuerpos;  y hemos probado diferentes sistemas orgánicos colectivos;  y hemos cambiado con los cambios; y juntos hemos tratado de mantener abierta una puerta que ahora, después de 27 años, está demostrando  su plena vigencia y poder de transformación.

Ahora, lo que se inició aquel 21/12/91 es, para muchos y muchas, un día de reflexión: porque no es que de aquello que solo uno vivió…de eso debieron nutrirse otros… sino que: de aquello acontecido en uno:  hubo luego vivencia en varios. Y de esta experiencia en común nació la inquietud en muchas personas que- con inocencia y osadía- se han dispuesto a vivenciar la vía que les conduzca a su propio estallido de luz

 

Confesión de parte

Declaro ante el único tribunal que reconozco en este Mundo, el mismo  que fija jurisprudencia en toda   Persona: Mi (la) Conciencia… cuanto he de reconocer como parte real de  mi verdad interior.

Y no para juicios pequeños y sin valor de las jaurías virtuales que se emboscan en la jungla de algoritmos o se escudan detrás de la altanería de su divinidad intelectual, sino más bien para mostrar a los comunes que me hermanan que  basta con ser Persona digna entre millones de iguales para merecer la Gracia y la buena acogida de parte de lo infinitamente superior al Mundo éste.

Sí, porque existe un Dios, no como lo han enseñado las religiones de este sistema mundano, y no  viviendo en cielos lejanos: siempre lo hemos cobijado en nuestro Espíritu, y al Orar En y Con Espíritu abrimos, los seres humanos, las puertas al Dios que Es Espíritu.

Sí, he vivido, lo confieso.

No elegí nacer en la época en que vine a este mundo: simplemente nací. No opté en conciencia y en razón por los padres que me engendraron. No tuve posibilidad alguna de administrar mi realidad siendo un infante. Aquello que viví, vi, sentí y me abordó desde el  mundo y de lugares incorpóreos nunca pidieron mi permiso: fue y se quedó en mi interior fijando desde el albur una permanente realidad por resolver.

Como toda persona que despierta a la vida en este planeta podía mirar y a veces curiosear los hechos que se sucedían en el entorno cercano, y recibía noticias, a veces graves, y alarmas que se medían según espanto o alegría de los adultos: los niños no son participes de la realidad en el universo mezquino de los ‘grandes’.  Y como no existimos siendo ‘pequeños’ nos hacemos los mejores observadores de la realidad, y los mayores jueces de aquella generación que nos formó o deformó, informó o desinformó.

Necio sería sentirme culpable por los hechos y males de otros, que hicieron parte de mi núcleo más íntimo, aun si tales circunstancias a mí me dañaban o afectaban. Tengo mucho perdón en mis alforjas. Injusto sería de mi parte no acudir al arrepentimiento  por los daños que mi ignorancia e inexperiencia pudo ocasionar en seres buenos que afecté con mis necedades.

Soy completamente inocente de la causa espiritual que me vive desde las horas tempranas: porque aquello que identificamos como ‘Dios’ –porque no sabemos qué nombre colocar a una realidad que nos sobrepasa – estuvo en mi interior desde mi inocencia creyéndolo algo natural y corriente que sucedía a toda persona como yo…un común ser humano. Terrible fue comprobar que otros y otras nada sabían de tales asuntos, que a ellos y a ellas nada interno los movía, y que al declarar mi verdad como contando, creía yo, un cuento reciproco, quedaba como el niño raro cuya reacción de mi parte fue callar y volverme taciturno, como guardando un secreto que debía ser resulto primero por mí mismo, sin ayuda de alguien y de ningún otro.  De algún modo aprendí a ser- en parte de mí-: un clandestino.

 Me rebelé en contra de mi propia verdad interior, expulsé a Dios de mi realidad: y me hice comunista. Entonces todo tuvo sentido: mi dolor ante la injusticia, mi innata solidaridad con los trabajadores que, como mi padre, hacían huelga y marchaban por sus derechos. Descubrí  la rabia correctamente canalizada por rieles ideológicos bien aceitados y reforzados. Entendí mi aversión hacia los curas. Marché por primera vez en compañía de mi tío Antonio, un socialista hecho de sí mismo, en la campaña de Allende del año 64. Leí de luchas mineras y campesinas y me estremecí hasta los tuétanos con la historia de la masacre de campesinos en Ranquil y no pude evitar llorar al conocer detalles de la masacre en la escuela Santa María de Iquique. No tenía dudas: estaba del lado justo.  En la campaña de Allende del año 70 fui un joven activista bajo empeño sin miramiento con mi propia salud.

¿Acaso mi verdad interior acallaría su presencia? Nunca lo hizo. A momentos mi hacer revolucionario era más fuerte y aplacaba esa realidad pendiente, pero no apenas el Mundo me golpeaba con su brutal artificio, reflotaba de lo más recóndito esa vivencia que parecía exigirme cuentas y no daba muestras de pretender retirarse. Pero en la incertidumbre y la fragilidad me refugiaba en su calidez antigua que me hacía vivir una extraña sensación de mí mismo, como si no era el yo que conozco y ese que se miraba en los espejos.

La muerte aparece como idea que me acosa y golpea mi alma para que yo la descubra: parece tener un secreto que me llama y me reclama.

Mientras más fuerte era mi oculta verdad interior, más  radical se hacían mis opciones políticas, y más compromiso adquiría. Resultó que la cuestión militar no sólo era necesaria en la política, sino que para mí resultaba fácil: un arte que parecía conocer, leyes que tomaba como elementos naturales y necesarios, prácticas que me entusiasmaban, y una militancia conspirativa que proponía el asalto al cielo.

Como sincronía inmanejable las circunstancias se cruzaban en mi andar para interrumpir o condicionar mi camino: las cosas nunca iban según lo planificado, menos por donde yo quería que se desarrollaran; siempre algo sucedía para que no me encontrara en el lugar que buscaba o que me exigía mi condición militante y mi preparación combatiente.

 Y cuando menos lo esperaba, desde mi fuero interno hubo una ofensiva  de tal envergadura que por primera vez sentí la urgencia de solicitar asistencia. Así aparece el budismo entregando respuestas y soluciones. Nada sabía yo del Buda. Pero el budismo sabía mucho sobre mis estados internos. ¿Lo elegí? No. ¿¿Me hice un religioso budista? No.  

Entonces también en mi país la sangre corre por las calles: los muertos navegaban por  el río Mapocho; camiones con cadáveres cruzaban ante mis atónitos ojos llorosos; la muerte…esa que no había resuelto… ahora me mostraba su faz despiadada y feroz. ¿Y dónde estaba Dios?

Ateo furioso…llego al exilio contando amigos y amigas desaparecidos muchos, muertos todos, pocos sobrevivimos. Nunca había estado tan lejos de cualquier síntoma o atisbo de espiritualidad, y esta vez acallé con odio y dolor esa vertiente interior que ahora silente parecía haber perdido su batalla.

Una  promesa juramenté sobre la memoria de mis hermanos y hermanas caídos: volvería a combatir para vengar sus muertes y reivindicar su sacrificio.

Aquello que prometí encauzó mi primer año en el exilio: nuevamente circunstancias, contextos, episodios, hechos…iban moldeando una senda diferente a mis pretensiones y propósitos. No tenía una planificación, solo un objetivo: adquirir las mayores destrezas político- militares que me permitieran regresar al combate en mi país. Pero impedido siempre en el punto más cercano al logro, soy desviado al amor, y del amor a la cordura del vivir en intensidad.  Entonces la política se convierte en un halo romántico que en mi desprendimiento me involucra con las causas de otros lares geográficos, pero movidos por motivos y razones de la misma humanidad. Pisar los suelos concretos del ‘socialismo real’ decepcionó mis expectativas e ilusiones, pero no mermó mi fe en la revolución nuestra: según esa otra forma de entender la vida que nos caracteriza como latino americanos.

Un oasis en medio del páramo, una flor de loto superando el fango: así fue lo acaecido durante el raro año 1977. Completamente sumergido en mi labor periodística, como aprendiz en un grupo de expertos, fui arrojado por esas circunstancias inexplicables, que son parte activa en mi vida, a una vieja abadía en Katmandú, en donde por meses estuve aprendiendo los secretos del Sutra del Loto y conociendo por fin al Buda que ignoraba a pesar de que de lo suyo algo practicaba.

Mucha política entró por mis poros y corrió por  mis venas: recorría el planeta recitando poesía y exponiendo denuncias en contra de las dictaduras en mi patria grande.  Y cuando el amor pareció mostrar su punzante espalda: caí en un vacío interminable que me consumía las carnes y el alma. Negué cualquier llamado interno, debía salir por mis medios de esta hecatombe emocional. Aquietado lo interior: vino desde afuera un libro antiguo  de origen chino que desde el primer encuentro me habló claro y preciso, tanto como si me conociera y me desnudara con sus sentencias. Esta vez soy yo el que regresa al budismo, para hallar la hebra que me conduzca al perdón de mis dioses internos.

Pude haberme quedado en ese estadio de cosas vívidas: por fin lo espiritual tomaba prevalencia en mis opciones. La política se enfriaba, mis viejos camaradas se dispersaban, algunos se esfumaban: entonces llega a mis manos un documento escrito a máquina, como se hacía antes, sobre la política militar para derrocar a la dictadura en Chile. Vuelvo  entonces a mi promesa.

Siempre aquella sincronía majadera y omnipresente me conduce a las personas precisas y sin proponérmelo entro en relación con gente que me va introduciendo al plan primigenio. Nunca pensé pasar por una escuela como aquella: hubo también ejercitaciones y esa disciplina militar alemana que no deja espacio para liberalismos de algún tipo. Sin embargo, otros tópicos pude compenetrar en la ahora inexistente RDA (República Democrática Alemana) … la ‘del otro lado del muro de Berlín’ (también  hoy un recuerdo del pasado).

Pero ya había probado el placer de vivir: y ahora, en un país diferente, en la misma Europa, esperaba mis instrucciones para retornar a mi país: en tanto aprendí percusión, integré dos conjuntos musicales de música salsa, fui socio de una salsoteca con artistas en vivo (algunos famosos)…pero en las horas diurnas colaboraba con los Nicaragüenses que desde Ginebra intentaban romper el cerco norteamericano, y bajo la guía de la inteligencia cubana ofrecía logística para reuniones y eventos  que ayudaban a la revolución sandinista. Lo único ‘espiritual’ que aun perdura en ese tramo, es mi relación con el I Ching: al que también olvidaba por largos meses.

Entonces vino el llamado: podía retornar  a mi país. De la poesía a las lecturas en café y peñas, hasta las acciones de arte callejero, y en silencio colaboración en todo lo solicitado por el partido comunista  y posteriormente por el Frente. Luego vendrá la clandestinidad plena. Por fin llegaba al punto crucial de mi promesa: combatía con las armas a quienes sometían por las armas.

Nunca dejé de dialogar con el fiel Libro de los Cambios. Y cuando salgo hastiado y agotado de mi propia decepción, quizás consciente por primera vez que allí donde creí hallar la respuesta al nudo del Hombre sólo había una madeja aún más enredada  y sin hebras que llevaran al corazón de los asuntos humanos…supe que debía dedicar el resto de mi existencia a esa verdad interior que vino conmigo quizá de qué pasado misterioso.  Claro que nuevamente el Buda vino a mí: antes de caer en el barranco de los abismos, fui rescatado por los mamtram del Sutra del Loto, y aquello que se inició en el año 1977 ahora parecía completarse y culminar ya en los primeros estertores de 1991. Porque entro en el segundo semestre del año 90 a otra abadía, pero ante el mismo cántico y recitación para llenarme de respuestas al inicio, y suscitarme de conjeturas al salir de ese cielo en la tierra. Porque al culminar el viaje  vino un ser que no comprendí y que me llena de cautela: el Cristo intervenía mi vida sin pedirme permiso.

El Cristo fue mi secreto por años: mientras enseñaba I Ching y compartía mis aprendizajes budistas. Algunos me creían taoista, por mis referencias continuas a Lao Tse. Otros me encuadraban como budista, por mis antecedentes y mis formas de meditar. Pero yo nunca fui taoísta, ni budista, porque nunca he sido parte de la religión, sus dogmas y rituales. Soy búdico, en cuanto he tenido una intima relación espiritual y de conocimiento con la enseñanza del primer Buda, el príncipe Sakyamuni. Y he sido un discípulo de los contenidos espirituales del Sutra del Loto: los he vivido porque los he practicado. Y he sido un discípulo de la Maestría contenida en el I Ching, y por esas sincronías ya conocidas, fui agraciado con la develación de los secretos del sistema conocido como ‘La Flor de Oro’, y he practicado y vivenciado cada uno de sus pasos y he descubierto cada una de sus etapas. Siempre con estricta disciplina espiritual.

Soy Cristico, y eso no niega ni contradice mi buidad adquirida, ni mi intima relación con la maestría de los Santos y Sabios que giran en torno al I Ching. Porque Lo Cristico es universal y es la cabeza y origen de toda Sabiduría.

Lo Cristico existía antes de Jesús: porque Cristo es el Dios de los Hombres Adámicos. Es divinidad desde los Inicios: llamado El Verbo. No importa el nombre que las culturas y generaciones le entreguen según su lenguaje y experiencia. Bajo muchos nombres y enseñanzas ancestrales: el Cristo ha sido siempre La Sabiduría de la Creación.

Ni el Buda es sólo la persona del antiguo príncipe nepalés, ni Cristo es solamente Jesús.

Las religiones del mundo se alzan sobre supuestos otros hombres, superiores, pero personas humanas al fin. Porque un buda humano es criticable, es posible negarlo, cuestionarlo, o rechazarle como lo hicieron los cinco mil en la gran revelación del Sutra del Loto, y de su enseñanza y ejemplo se puede desvariar, sacar conclusiones convenientes y crear estamentos intelectuales que validen egos y creen poderes en el mundo.  Con una divinidad tal juego sería condena espiritual y karmatica segura. Lo mismo ha sucedido con el Cristo: limitarlo a Jesús y concentrar su enseñanza y valor en base a hechos milagrosos que sólo demuestran su caridad por los Hombres;  y su muerte en la cruz romana como un pago humano superior  por pecados que, sin embargo, siguen pesando y son torpemente esgrimidos por las iglesias hasta el día de hoy;  para que por dos mil años lo adoremos como ‘gran Hombre’ y ‘maestro’…que sigue crucificado y sufriendo para culpa de nuestras faltas… y dependamos de sus ministros en la tierra. Toda una gran falacia.

Cristo pasó por la encarnación en Jesús, pero Cristo es Dios y Elohim desde antes de Jesús y lo es después de Jesús. Por lo mismo es que Lo Cristico comprende la Creación como un hecho único cuyos ‘dioses’ (por dar un nombre a lo que no tiene nombre) han sido y son los mismos desde  los Inicios. Y Cristo es el Verbo desde El Principio. Eso significa que relacionarse con Cristo es establecer vínculo espiritual y consciente con una divinidad superior: y eso no da espacio a interpretaciones, subjetivismos o dependencias humanas. Menos sirve para conformar religiones mundanas o alzar iglesias formales.  Exige Espiritualidad, disciplina espiritual, discernimiento, y COHERENCIA de FE. Es decir: ceñir la propia existencia según un orden espiritual que debe ser libre y consciente, experimentado con hechos, y corroborado en la propia prueba de vida.

Ese es el Cristo que vino a mí, que al final acepté, y con el cual camino en plenitud y convicción.

Con el Cristo he disipado todas mis preguntas, y las inquietudes que vinieron conmigo e hicieron parte activa de mi verdad interior se han apaciguado con la Certeza de la Fe: porque sin Certeza la fe es una vana esperanza que elimina el potencial espiritual en el Hombre.

Ser Cristico no es lo mismo que ser ‘cristiano’: porque la cristiandad asume sobre sí la historia de la religión cristiana, y se reconoce en vertientes definidas por otros hombres o instituciones eclesiásticas. La persona Cristica no toma sobre sí un pasado claramente  negacionista de la divinidad del Cristo. No se rehace a iglesia alguna; si acaso toma ejemplos de personas coherentes con Lo Cristico; las personas Cristicas  nos congregamos  para aumentar nuestra capacidad de Siembra: en modo que muchas personas que creen en forma genérica… por fin se consagren en espiritualidad  y coherencia de vida.

Ser Cristico para mí ha sido la liberación más profunda y maravillosa: porque no he debido negar nada de mí mismo; sí he debido Vencerme a Mí Mismo.

 Y de todo lo vivido puedo extraer lecciones, aprendizajes y enseñanzas que me ayudan a ahondar en Sabiduría. Incluso de los más oscuro y abismal en esta existencia extraigo riqueza que luego comparto con quienes pasan hoy por los mismos estados o tramos que yo pasé en su momento. Por ejemplo: la violencia. La conocí por dentro, fui uno de sus acólitos, y navegue por sus arterias más tenebrosa: salir de allí no fue fácil, pero si rechazara y olvidara esa pasar aleccionador, no sabría como advertir y enseñar sobre la verdad de la violencia y su entramado. Cuando hoy niego formas y contenidos que   30 años atrás defendía: no estoy desconociendo  nada de aquello que hice y en lo cual participé. Más bien lo reciclo como aprendizaje a compartir, para evitar a otros-as pasar por sus escabrosos  laberintos y cavernas. Claro que el andar y el camino a recorrer, al final, lo opta y elije la persona en forma libre: así obtenemos el fruto de nuestra siembra, y somos el efecto de nuestras propias causas.

Lo Cristico no me ha mermado mi pensar político: porque pensar políticamente es una forma inteligente de analizar la realidad social. Y para ejercitar el pensamiento político no es requisito ni condición ser militante de un partido.  Hoy mis bases sustanciales no varían mucho de las ideas madre anteriores, en cuanto he aprendido en este Camino Espiritual, por ejemplo, que la Libertad es un principio de la Creación y condición sine qua non  para la adquisición y profundización de la Conciencia en el Hombre. Que la Paz no es un estado de tregua entre dos batallas, ni es esa pacificación de la muerte: sino un Estado Consciente en la persona que se logra desde adentro, desde el interior, llegando  a la raíz primera del árbol de la Libertad.  Y entre mucho otro, todo importante, he descubierto que ser Revolucionario es ser Cristico: no revolución en los términos de destrucción y violencia como arma s de la política, o imposición dictatorial sobre los antiguos opresores: sino ‘revolución’ como Ley del Cambio que es inherente al movimiento de la Creación. Si hay Creación hay Movimiento, si hay Movimiento hay Cambios: y si hay Cambios hay Saltos Revolucionarios que transforman el estado de cosas y su desarrollo previsto. Así es en el Hombre, así es las sociedades, así es en el Mundo, así es en el universo, así es en la Creación.

Los principios de la Libertad y del Cambio como leyes de la Creación hacen imposible alzar cualquier dogma impertérrito sobre el cual construir una inamovible o lerda religión.

Lo Cristico es Sabiduría: no conocimiento solamente, sino administración del saber y capacidad de discernir incluso aquello que en el Mundo exige empeño intelectual acabado y esfuerzos en el tiempo. Con la Disciplina Espiritual se logra una ‘lectura en segunda línea’, un ‘entendimiento del espíritu de lo expuesto’, un ‘discernimiento innato y espontaneo de la verdad oculta’.   La Sabiduría es una llave para disipar los misterios y dar luz incluso a aquello que aún no ha acaecido ni se ha manifestado.

Ahora, confesada mi Fe y aclarada mi postura: pueden preguntar lo que estimen, y yo contestaré aquello que sea fructífero y dignifique la inteligencia. Porque Dios nos hizo sensatos y cuerdos justamente para que no pensemos como necios, y no actuemos desde la ignorancia.